Primer Encuentro Nacional Sobre Calidad de Vida en la Tercera Edad |
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Universidad de Buenos Aires
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"RECREACIÓN con ADULTOS MAYORES"
Fundamentos teóricos para una práctica
ÁREA TEMÁTICA: IV Actividad física y prevención en la salud.
AUTOR: Lic. Elena Dorin Neumark DIRECCIÓN: Olazábal 4981 Piso 4 Dto.9 Cap.Fed. C.P.1431 TELÉFONO:4522-8413 CEL(15)4473-1307 E-MAIL: sneumark@hotmail.com / sneumark@yahoo.com INSTITUCIÓN de PERTENENCIA: Dirección General de Deportes(G.C.B.A.) ANTECEDENTES PROFESIONALES: Licenciada en Psicología - Psicóloga Clínica - Psicóloga Social - Especialista en Recreación Responsable a cargo del Área Adultos Mayores de la Dirección de Deportes del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Docente de la Universidad Argentina "J.F.Kennedy"
FUNDAMENTACIÓN TEÓRICA UN CAMBIO DE POSICIÓN
Históricamente, y sin discriminación de edades, la recreación, fue considerada como una actividad placentera, sin fines de lucro a realizar durante el tiempo libre. La pregunta que cabe es: ¿libre de qué? Libre de obligación, un tiempo liberado de la producción económica.
A partir de ahí, la antinomia trabajo-recreación se convierte en un par de opuestos cuyo único punto en común consiste en abarcar el tiempo total del hombre.
La recreación no queda aislada del estilo de la época: llenar los vacíos en términos de oferta; propuestas, que surgen del afuera y que cuesta discriminarlos de los intereses propios y genuinos.
El hombre moderno queda sujeto no sólo a la producción, sino también a la recreación. Una recreación más ligada al entretenimiento, al pasatiempo, que se aleja cada vez más de su significación etimológica. El sujeto es recreado por el múltiple contexto, que al modo de carteles luminosos lo desvían de la carretera principal que es su propio ser.
El hombre se posiciona frente a los condicionamientos en un lugar de receptor.
El sujeto es recreado por otros, otros determinan lo conveniente, otros enuncian la necesidad.
¿Dónde hallar al sujeto de necesidades pichoniano? ¿Qué lugar queda para el verdadero self winnicottiano?
Remitámonos al vocablo Recreación y más precisamente a Re-crear: volver a crear, volver a fundar, volver a instaurar, volver a producir.
Sugiero entender al hablar de recreación, una actividad que pone al sujeto en contacto con su propia realidad, y con su propia subjetividad.
El área recreativa toma el estatuto de espacio. Un espacio de juego creativo entre un sujeto recreador y una realidad recreada.
Un espacio que permita buscar en la propia mismidad la necesidad, un espacio que facilite y sostenga a la vez el devenir de la necesidad, su desarrollo y su satisfacción. Un espacio que permita el interjuego creativo del yo y los otros, un espacio transicional entre lo intra y lo inter-subjetivo. -2-
En síntesis: Considerar la recreación como un hacer del hombre, de adentro hacia fuera, como un proceso de desarrollo y crecimiento, que le permita desplegar su propio ser en la realidad.
Partiendo de esta concepción introduzcámonos en el mundo del adulto mayor para poder visualizar la función del espacio recreativo en esta etapa de la vida.
UN PROCESO PARTICULAR
¿Qué es un adulto mayor? Pensar al adulto mayor no implica hablar de decrepitud ó de caducidad y por supuesto mucho menos de involución. Muestra de ello, lo vemos en los aportes de grandes personajes de las ciencias y las artes que plasman después de los 60 años obras que contribuyen al desarrollo artístico y científico de la humanidad.
Tampoco debemos caer en una idealización. Hay ciertos aspectos característicos de esta etapa de la vida que nos enfrenta a sujetos particulares en sus aspectos bio-psico-social.
A partir de la mediana edad (45 a 65 años) las personas comenzamos las transformaciones progresivas (que no es idéntico para todas las funciones y capacidades ni para todos los individuos por igual).
Entre los factores biológicos observables enumeramos:
a)Acumulación de grasas en regiones determinadas (Vientre-Caderas).
b)Pérdida de hidratación y elasticidad de la piel (arrugas).
c)Encanecimiento y escasez de cabellos.
A estos factores se suman aquellos otros que limitan al sujeto en su funcionamiento social:
a)Alteraciones auditivas.
b)Alteraciones oculares.
c)Incremento de la fatiga muscular.
d)Cambios en la velocidad de las respuestas a ciertos estímulos (ej:sexual)
Como lo señala el Dr. Salvarezza, estos factores tendrán su correlato psicológico, particular en cada sujeto, que no vamos a profundizar, pero que luego retomaremos para articularlo con la función del espacio recreativo.
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Desde una mirada social, podemos numerar sucesos determinantes de cambios en el status quo del sujeto.
a)Alejamiento de los hijos del hogar (Síndrome del nido vacío) b)Jubilación.
c)Pérdida del cónyuge.
d)Pérdida de relaciones sociales.
e)Mudanzas.
Estos factores, tanto fisiológicos como sociales suponen para el sujeto, modificaciones en el orden psicológico.
Se produce lo que yo llamo "descatectización recíproca". Por un lado acontece un desinvestimiento de los objetos por parte del adulto mayor y por otro lado, el contexto desinviste al sujeto.
Podríamos pensar de esta manera, algo simplificada, la regresión libidinal que sostienen algunos autores como narcisismo del anciano.
El adulto mayor en general, vive esta etapa como un proceso de deprivación, que podemos pensar más como proceso de profundas transformaciones. Una multiplicidad de cambios, que tienen efecto sobre su psiquismo.
El sujeto necesita por un lado elaborar sus cambios físicos, personalizarse en este nuevo cuerpo que es, y por otro lado volver a crear (re-crear) su trama vincular.
Esto no significa solamente sustituir vínculos perdidos, también implica situaciones de suma (familia extensa: nueras-yernos, abuelazgo, etc.)
Para decirlo de otra manera: aún en proceso de envejecimiento no patológico, el sujeto debe enfrentarse con lo que considero el "adueñarse de sí mismo" y de su nueva realidad.
Mi experiencia clínica y como coordinadora de grupos recreativos de personas mayores me llevó a investigar este proceso de asunción del sí mismo y la resocialización del sujeto mayor, y a pensar un modelo de recreación que apunte a facilitar estos procesos.
-4- UN ESPACIO FACILITADOR
En primer término hablo de un "espacio recreativo", para nombrar un espacio común, un espacio donde tenga lugar el encuentro entre subjetividades, un espacio que no es enteramente subjetivo ni objetivo; una zona intermedia entre la subjetividad y la objetividad, un ámbito para desplegar la creatividad y el juego; el juego en sí mismo es creación, es confiabilidad y es vincularse con uno mismo y con los otros.
Este modelo tiene un objetivo particular: recrear la trama vincular. Este fin, no es en absoluto una enunciación teórica; surge de la praxis misma, y de escuchar muchos años una demanda: necesidad de desplegar el ser social: " Hace 6 meses que nadie me abraza", "me siento muy sola", "yo necesito estar con gente de mi edad"
Esto supone una recreación vincular a doble vía: Por un lado crear nuevos vínculos entre pares y por otro recrear vínculos con el afuera(del espacio grupal), es decir, favorecer nuevas formas de relación con vínculos ya establecidos.
Atribuyo al espacio recreativo, características similares al "espacio potencial" de Winnicott.
Un espacio de sostén y confiabilidad. Un espacio para crear la experiencia vívida de la autonomía. Una zona para vincular pasado, presente y futuro, y en ella ensayar nuevas formas y transformar otras.
En la práctica esto se traduce en nuevas relaciones de pares, conexión con intereses propios, postergados por la crianza y el trabajo, vivenciar placientemente el abuelazgo, re-encuentro con la pareja, y los hijos adultos.
Ya dijimos que lo fundamental para conformar este espacio es establecer un encuadre confiable que actúe como sostén para que el sujeto pueda jugar y jugarse.
Para desarrollar un cronograma de actividades, tendremos siempre presente la particularidad grupal. La primera diferencia que tendremos en cuenta será si son grupos con envejecimiento normal ó patológico; y a partir de allí las singularidades que hacen a cada uno.
Siempre trabajo con la concepción bio-psico-social del sujeto y desde ahí sugiero un programa de actividades que contemplen estas tres áreas. -5- Las actividades con mayor compromiso físico, mediaran para contactar al sujeto con su propio cuerpo y con el cuerpo del otro. Le permitirá investigar su cuerpo de "hoy", reconocer las transformaciones, trabajar sobre su esquema corporal, considerar sus posibilidades, pero también sus limitaciones. Fundamentalmente, apuntamos a promover el reencuentro placentero con el movimiento.
Las actividades con mayor compromiso psicosocial privilegian la reflexión y la actividad compartida, posibilitando el intercambio creativo entre las subjetividades y la realidad exterior.
El encuadre permite el hacer y el decir y favorece el surgimiento de aspectos conocidos y desconocidos , placenteros y displacenteros. La experiencia es valorada y compartida, y el grupo mismo se convierte en el escenario donde cada uno es protagonista, desde su particular modalidad de vincularse.
Por último las actividades con mayor contenido expresivo, dan un marco para el reencuentro con las propias capacidades, aquellas que fueron postergadas ,pero no por eso acalladas, y las otras que, en un ámbito de confiabilidad, surgen libre y espontaneamente.
En este modelo no nos planteamos metas o expectativas pre-establecidas. Nuestro objetivo no es el resultado final, sino la posibilidad de atravesar un proceso.
Nuestra meta como coordinadores es ofrecer un espacio para que el otro sea su ser más profundo y verdadero.
E L C OORDINADOR QUE PUEDE ABRIR LA PUERTA PARA IR A JUGAR
Para que este espacio recreativo que proponemos pueda tener las características que enunciamos (un espacio potencial, confiable y de sostén) el coordinador será un facilitador de experiencia suficientemente bueno.
Ser un coordinador suficientemente bueno, implica poder sostener el espacio recreativo, sostener el encuadre: estar en el lugar y en el tiempo; estar atento en la escucha a la necesidad grupal y poder decifrarla; poder soportar la etapa de dependencia relativa, pero también facilitar la autonomía percibiendo el timing de cada grupo.
La función princeps del recreólogo será promover la resocialización del adulto mayor, y en los casos de patología psiquiátrica agregada contribuir en una tarea interdisciplinaria a resolver
-6- problemas de aislamiento y depresión. A través de la estimulación de mecanismos
sensoperceptivos en relación con el medio ambiente, el coordinador profesional promueve un espacio de creatividad, facilitando el juego(como creación) individual y con los otros. El coordinador ofrece el espacio(especialmente creado y pensado para cada grupo) y este es tomado libremente.
Ya estamos suponiendo un perfil para el coordinador. El mismo será en primer lugar un creador. Esto significa que será capaz de habitar la zona intermedia del juego. El mismo debe poder jugar para promover el juego, lo que equivale para el profesional soportar en sí mismo, estados de no integración, para que de allí surja la creación.
En alguna entrevista, el doctor Mario Strejilevich, pionero de la Psicogeriatría y de la Gerontología en la Argentina señaló: "Los jóvenes hacemos cosas para os viejos, sin consultarlos a ellos".
Creo que en esta frase se encierra la dificultad máxima en las relaciones vinculares: dejar que el otro sea su propio ser a pesar de nosotros mismos; la función del coordinador exige aún más:
promover el espacio, para que ellos pongan en juego su propia persona, y además sostener y acompañar este proceso de crecimiento, evitando la intrusión que interrumpe este proceso.
Para sintetizar, ocupar este lugar, requiere del profesional una formación que resumo en los siguientes puntos:
- Formación específica en la especialidad: .
- Entrenamiento gerontológico.
- Análisis personal del profesional.
- Supervisión de la tarea con otros profesionales.
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CONCLUSIONES
A partir de este modelo en el campo psico-social, surgen interrogantes en relación a su función terapéutica. La experiencia me ha mostrado que en grupos de mediana edad y mayores con procesos de envejecimiento normal, este espacio recreativo favorece las redes vinculares, sobre todo si la inclusión se produce en la mediana edad(50 años). Se denota un incremento en la autoestima y mejoramiento de las relaciones familiares, otorgamiento de nuevos sentidos a la existencia.
En relación a lo físico-orgánico he observado un considerable mantenimiento de las funciones, un mejoramiento en la función del sueño y una mayor concientización de las necesidades corporales.
Si pensamos en la transformación del sujeto, en los cambios logrados, en la movilización de estructuras rígidas y estereotipadas, tenemos que admitir funciones terapéuticas en las tres áreas(bio-psico-social) y por lo tanto considerar en principio como un modelo de prevención primaria y en 2° término como una forma asociada y complementaria de la rehabilitación psíquica y física del adulto mayor.
Para concluir, y a modo de reflexión citaré a Sófocles, que de la manera más sencilla supo describir que la oportunidad de ser, no se limita a una cuestión de tiempo: "Aún cuando haya visto pasar de largo el tiempo oportuno, el hombre suele sentir todavía atracción por el mundo"
-8- BIBLIOGRAFIA
1.- "Psicogeriatría" de Leopoldo Salvarezza Ed.Paidós
2.- "Los Procesos de Maduración y El ambiente Facilitador" de Donald D.
Winnicott Ed.Paidós
3.- "Psicogeriatría" de Osman N. Antonuccio Ed. Akadia
4.- "Realidad y Juego" de Donald D. Winnicott Ed.Gedisa
5.- "Temas de Psicogeriatría" de Mario Strejilevich Ed.1919
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"RECREACIÓN CON ADULTOS MAYORES"
Fundamentos teóricos para una práctica
ABSTRACT
A partir de la experiencia recreativa con adultos mayores la autora se plantea la reformulación de la actividad, desarrollando un encuadre teórico que surge a través de una praxis.
Queda enunciado un cambio de posición en tanto define la recreación como una actividad que coloca al sujeto en contacto con su propia realidad y con su subjetividad.
Luego de describir algunas particularidades del proceso normal de envejecimiento, se plantea un modelo de espacio recreativo, a partir de un objetivo específico: recrear la trama vincular.
El espacio recreativo queda definido como un "espacio potencial", capaz de contener la experiencia de juego como creación subjetiva.
Se sugieren aspectos técnicos y de contenidos, especificandose el tipo de actividades a tener en cuenta (actividades con mayor compromiso físico; con mayor compromiso psicosocial; y con mayor contenido expresivo).
La autora, resalta la importancia del encuadre como facilitador del modelo.
Finalmente el trabajo intenta precisar el perfil del profesional habilitado para constituirse en un coordinador que se define como "suficientemente bueno" y fundamentalmente como un creador.
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