RESUMEN :

Frente a explicaciones reduccionistas o deterministas de la relación entre experiencias religiosas y experiencias políticas, el trabajo muestra los múltiples y variados vínculos de esta relación a nivel social, simbólico y de actores concretos a partir del análisis de los orígenes de la experiencia peronista en la Argentina de la década del 40.

El concepto de catolicismo integral , es decir aquel que rechaza tanto al liberalismo como al socialismo y busca penetrar el conjunto de la sociedad y el estado , le permite al autor mostrar las continuidades de largo plazo de un modelo hegemónico de catolicismo que encuentra en la crisis del estado liberal de los 30 la posibilidad de expandirse desde la sociedad al estado rehaciendo legitimidades e identidades.

LOS DIVERSOS CATOLICISMOS EN LOS ORIGENES DE LA EXPERIENCIA PERONISTA

Dr. Fortunato Mallimaci

UBA / CEIL /CONICET

Bogotá, 1997

El peronismo debe estar al lado de la gente, de los que más lo necesitan. Esta acción se liga profundamente con la Iglesia. El peronismo es el partido que se acerca más a la doctrina social de la Iglesia

Chiche Duhalde - esposa del gobernador de la provincia de Buenos Aires - Clarín, 4/5/ 1997

Introducción

Las múltiples y complejas relaciones entre los universos simbólicos y los concretos procesos de creación de identidades sociales, políticas y religiosas en nuestro país, en especial con referencia al peronismo, están comenzando a tener cada vez mayor importancia en los estudios de sociología histórica.

Trabajos aparecidos en otros países como en el nuestro nos han mostrado la importancia de lo simbólico, lo cultural, la compleja trama de relaciones que deben ser tenidos en cuenta al analizar los procesos sociales. Junto con datos y aportes económicos y estructurales se hace cada vez más necesario conocer los hechos sociales desde la perspectiva de los actores, mostrando como se van creando y reproduciendo comportamientos, visiones, sueños y expectativas en aquellos y aquellas que asumen y hacen suyo tal o cual comportamiento social.

NOTAS BIBLIOGRAFICAS

Son numerosos aquellos estudios que están renovando nuestra concepción de los procesos sociales. Quiero destacar aquellos más significativos sobre el período estudiado en Argentina:

Daniel James, 17 18 de octubre de 1945: el peronismo, la protesta de masas y la clase obrera Argentina en Desarrollo económico, BsAs, nro. 107, 1987.

Mariano Plotkin, Mañana es San Perón, BsAs : Ariel, 1993. Una crítica a este trabajo en : María C. Cangiano, Mañana es San Perón. ¿ Trabaja el patrón? En Desarrollo Económico, nro. 141, BsAs, 1996

Lila Caimari, Perón y la Iglesia Católica, BsAs :Ariel, 1995

A nivel latinoamericano son de destacar los importantes aportes a la comprensión de la relación entre cultura popular y experiencia política realizados en el Perú por Imelda Vega Centeno, especialmente en sus estudios sobre el aprismo popular.

Dentro de estos universos simbólicos es importante destacar aquel ligado a las concepciones culturales y religiosas dado la importancia que tienen las mismas en otorgar sentido a las acciones que realizan individuos y grupos sociales.

Analizar entonces las relaciones múltiples y complejas entre catolicismo y peronismo , entre catolicismos y peronismos (subrayamos el plural frente a estudios reduccionistas ) es dar cuenta de las posibles relaciones que en un determinado momento se dan entre opciones religiosas y opciones políticas; entre legitimidades simbólicas y legitimidades sociales; entre diversos actores como el político y el religioso que buscan monopolizar su campo ( y por ende poseer el poder de nominación legítimo) para a partir de allí establecer nuevos y renovados vínculos entre ellos. La relación peronismos - catolicismos ha pasado por períodos de idilios, enfrentamientos, sospechas, condenas desde sus orígenes hasta la fecha . Pero, más allá de los diversos actores, perdura en el largo plazo un vínculo estrecho. El investigador debe tener en cuenta de las matrices que permiten esa relación histórica .

En este trabajo nos interesa analizar esos vínculos en los orígenes de la experiencia peronista mostrando las diversas ofertas católicas presentes en el mercado de bienes simbólicos y que tienen como objetivo central recristianizar la sociedad.

I. EL IMAGINARIO CATOLICO EN LA EPOCA

Comprender el imaginario católico en los cuarenta y el impacto que el mismo puede tener sobre los diversos actores sociales significa dar cuenta del aire de los tiempos al cual debe dar respuestas y propuestas.

Los sueños de una sociedad distinta a la vivida hasta ese entonces, ya no se hará solamente en los moldes liberales o socialistas o anarquistas sino que aparecen nuevas ideas -imagenes que dan sentido , pertenencia e identidad a los nuevos actores. El catolicismo, relegado en décadas anteriores a sectores y clases dominantes aparece ahora como uno de esos nuevos dadores de sentido y ya no solo para esos sectores sino para grupos medios y trabajadores.

La sociedad argentina, como en otras épocas anteriores y posteriores se entrega a una nueva invención de sus propias representaciones. Estas representaciones tienen un impacto diferenciado sobre los comportamientos y mentalidades de los distintos actores y actrices sociales. Como nos recuerda Baczko, todo poder se rodea de representaciones, símbolos, emblemas, etc., que lo legitiman, lo engrandecen, y que necesita para asegurar su protección.Pero estos imaginarios no actuan sobre espacios vacíos sino que lo hacen en pugna con otros sueños, memorias, esperanzas y utopías.

1. LA CRISIS DEL CONSENSO LIBERAL

La crisis social, política , cultural , religiosa y económica vividas con el crack del 30 y el surgimiento de nuevas experiencias políticas tanto a nivel mundial, latinoamericano como local muestran el quiebre del modelo liberal hegemónico . El consenso liberal construido predominantemente desde 1880 y que había suscitado apoyos, sueños, futuros, progresos, lealtades y sentidos no a solo en la elite dominante sino a amplios y vastos sectores sociales comenzaba a hacerse añicos.

Ese largo período, con consensos más amplios y más restringidos según épocas y procesos , con mayor o menor coerción y represión según tipo de protestas y propuestas ( en el cual indios, negros y trabajadores - entre otros- fueron las principales víctimas ) durante el cual el proyecto liberal había proporcionado un mito unificador y movilizador ( no solo a los nativos sino ( y sobretodo) a las grandes masas de inmigrantes), estaba llegando a su fin.

Este quiebre del modelo liberal arrastra consigo no solo un tipo de Estado o de proceso económico o de intercambio entre naciones sino al modelo ideológico , cultural y religioso a él asociado. La búsqueda de alternativas a la democracia liberal burguesa y a los movimientos sociales, políticos, religiosos y económicos por ella generada estarán en Argentina, en América Latina y en Europa a la orden del día. Se comienza a cuestionar la asociación entre democracia con liberalismo creando posibilidades a nuevas articulaciones : ser puede ser demócrata sin ser liberal ; se puede ser liberal sin ser demócrata. Sólo teniendo como telón de fondo esta profunda crisis de representatividad del imaginario liberal es que podemos comprender las nuevas ofertas simbólicas. El granero del mundo encuentra sus límites internos y externos.

2. REVITALIZACION DE UTOPIAS

El liberalismo no sólo se presenta como proyecto de vida y de concreciones sino también con proyección utópica, es decir mostrando al final del camino - si son seguidos sus postulados - una sociedad feliz e igualitaria. La desilusión con el modelo liberal y el combate de aquellos que se enfrentan al liberalismo, llevará también a construir otras utopías que se enfrenten a la liberal .

Las anticipaciones utópicas antihegemónicas obran como dadoras de esperanzas mostrando los cielos y paraísos a los cuales se llegará siguiendo tal o cual camino transformador y cuestionador. En tal sentido contribuyen a dar fuerza a aquellos y aquellas que , si bien viven en un presente duro y de sacrificio saben, que al final, ellos o sus descendientes, llegarán a la tierra prometida . Los Cielos, Paraísos e Infiernos están también presentes en los procesos sociales . Recompensas de la tradición judeo- cristiana ubicados en el más allá serán secularizados y tratados de vivir en el más acá tanto en movimientos religiosos como sociales . No se acaban las utopías sino que son resignificadas . Los sociólogos del fenómeno religioso han estudiado muy bien esta inversión simbólica entre el más allá y el más acá , donde la utilización de uno u otra dependerá de las circunstancias y del movimiento social que la lleve adelante.

Hill, M., Sociología de la Religión,Madrid: Cristiandad, 1976

Lo importante es analizar que la crisis de la utopía liberal pone en movimiento a otras utopías. Felix Weinberg ha logrado rescatar dos utopías argentinasa comienzos del siglo XX en Argentina ligadas a experiencias obreras , una anarquista y otra socialista . Ambas imaginan como será nuestro país cuando el socialismo y el anarquismo triunfen, proyectando sus concepciones y sueños hacia el futuro. A su vez el autor nos recuerda como tanto en el campo del socialismo como del anarquismo se censuraba duramente a quienes se dejaban arrastrar por los caminos de esas elucubraciones intelectuales aparentemente escapistas. Más aún se critica a aquellos que especulan sobre la futura sociedad socialista o buscan retirarse del mundo para fundar grupos habitados únicamente por elegidos .

Este mismo proceso es también vivido al interior del catolicismo argentino por grupos que pondrán también en marcha sus propias utopías . Frente a lo que se considera la crisis liberal no sólo se reactivan utopías socialistas y anarquistas sino también cristianas y católicas en particular. La nueva cristiandad o la nueva edad media son propuestas globales de superación del desorden liberal mientras que las comunidades utópicas son lugares apartados del mundo donde ya se viven los valores de la tierra prometida. experiencias utópicas como manifestación de la llegada del Reino de dios. En 1889 , por ejemplo , cuando la miseria se cernía sobre la masa obrera... dos ilustres damas... inauguran las Señoras de la sociedad de San Vicente de Paul que crean luego la Colonia Obrera de Nueva Pompeya. Ver:

Julián Alameda, Argentina Católica, BsAs: Benedictinos, 1935

En los 30 serán los militantes jóvenes de la Acción Católica quienes manifestarán el deseo de vivir ya la experiencia utópica rechazando al mundo liberal, especialmente en la participación de movimientos sociales, experiencias partidarias y vida comunitaria.

Desconocer o ignorar estas otras utopías anti o no liberales nos puede impedir analizar las diversas alternativas presentes en la sociedad argentina ante la crisis del consenso liberal.

3. NUEVAS RELACIONES ENTRE RELIGION Y POLITICA

El imaginario liberal había supuesto con respecto a la religión diversas posibilidades. O suponía su lenta e inexorable desaparición frente al avance de la ciencia , o buscaba confinar lo religioso al ámbito de lo privado y del templo o transformar el peso social de las instituciones cristianas (en especial el de la Iglesia Católica , mayoritaria en el país) en apoyo a las gestiones del Estado a través de la sumisión y apoyo a su gestión o creación de Iglesias Nacionales.

En este proceso es importante diferenciar - algo que los investigadores apresurados a veces olvidan - las diversas variantes que el liberalismo plantea en este período: desde un liberalismo intransigente a todo fenómeno religioso hasta aquellos que buscan conciliar con lo religioso instituido. Tenemos así posturas a-religiosas, anti-religiosas y religiosas . Se puede ser religioso y anti-cristiano o cristiano y anti-católico ; o católico y anti-clerical. Gran parte del anticlericalismo de fin de siglo XIX y del XX fue llevado adelante por cristianos o católicos convencidos de que su cristianismo o catolicismo era el verdadero y que la institución eclesial era intrínsicamente perversa anticlericalisme en France de 1815 a nos jours, Paris, 1976 .

Al mismo tiempo es importante remarcar que religión y política, tanto en Argentina como en el resto de las sociedades, han estado íntimamente relacionados. La manera, forma y sentido de esa relación es la que ha cambiado .El investigador debe ser capaz de dar cuenta de esas transformaciones donde tanto lo religioso como lo político, los actores religiosos como políticos van cambiando e interactuando continuamente . Por eso debemos estar atentos cuando algunos estudiosos analizan esta relación como anormalidad, desviación o presencia corporativa . Parten de un supuesto teórico que lo religioso debe ocupar el espacio de lo privado o cultural y que su actual presencia es reminiscencia de poderes pasados dado que vivimos en una sociedad científica y secularizada alejada de lo mágico y atrasado. Suponen que lo político no debe ligarse a lo religioso. Postura de investigador, de ideólogo o de miembro de la Iglesia? La oración del presidente: acto político o religioso? en:

A. Ciria,Partidos y poder en la Argentina Moderna (1930-1946), BsAs: De la Flor, 3era. ed., 1975

Además , en el caso argentino (que no se reduce a un grupo de la ciudad de Buenos aires...) , dado los años de dictaduras, proscripciones y dificultades de partidos políticos como en la cultura predominante a partir de los 30 , una parte significativa de hombres y mujeres actuando en los ámbitos públicos ( estatales y partidarios) han sido socializados en ambientes católicos. Es en los círculos de sociabilidad y más particularmente en esos laboratorios de ideas que son las asociaciones, círculos, movimientos , colegios, órdenes religiosas, redes de revistas, etcétera ligados al amplio y heterogéneo mundo católico donde se crean, renuevan y promueven paradigmas en materia de acción pública especialmente a nivel social y político. Esto también supone una otra concepción sobre el estado y su funcionamiento.

Merrien, Francois Xavier, Etat el politiques sociales. Contribution a une theorie neo-institutionnaliste , en Sociologie du Travail, nro, 3, Paris, 1990.

4. El surgimiento y consolidación del Estado Benefactor

Se trata de analizar las características de los distintos tipos de

estado en su desarrollo histórico y ver allí las diversas concepciones

- enfrentadas o no - que se dieron sobre la concepción del fenómeno religioso y su presencia en la sociedad. Esto supone además visualizar al estado como un actor importante con características propias que influyen en los procesos a través de sus políticas y de sus relaciones con los diferentes grupos sociales. Esto contrasta con aplicación de abstracciones conceptuales analíticas características de ciertas <teorías> estructural funcionalistas o neomarxistas

Estado que al dejar atrás su modelo de democracia restringida, debe ampliar la ciudadanía a otros actores sociales y con otros contenidos. Para ello necesitará de nuevas legitimidades y fuerzas e instituciones que lo acompañen . La institución católica y su doctrina social

El nuevo tipo de estado llamado de bienestar por los científicos sociales busca ahora sumar actores relevantes a su accionar. Aquí el catolicismo aparece como un dador de identidad nacional y cultural que legitima esta nueva dominación y permite entonces tomar distancia de la alianza liberal -agrícola-ganadera precedente. Se busca que la institución católica y los símbolos católicos se sumen a la nueva hegemonía . El crecimiento del estado -nación va acompañado del crecimiento de la institución eclesial donde los espacios específicos de ambos se van construyendo conflictivamente dado que el viejo paradigma que diferenciaba público y privado por un lado y el de no intervención estatal por otro (característicos del orden liberal) ha dejado de ser creíble y operativo.

Un autor, analizando otro país de A. Latina - y esto nos muestra como los procesos tienen tambien dimensiones más amplias- muestra que, a fin de reemplazar la hegemonía liberal es necesaria una simbiosis entre la iglesia y el estado benefactor. La simbiosis, para el autor, tiene dos vías : lo que la Iglesia aporta al Estado y lo que éste proporciona a aquella . En el primer carril , tenemos el apoyo a las propuestas reformistas como las únicas legítimas en la óptica cristiana... En el segundo carril encontramos las partidas específicas del presupuesto ... y la habitual participación de las autoridades de la iglesia en los actos de culto civil. La hipótesis indica también que el Estado concederá a la Iglesia diversas facilidades para que desarrolle su labor pastoral, a condición de que consolide la mentalidad de los sectores medios y evite la confrontación entre las clases sociales.

Este enfrentamiento al viejo orden liberal supone una ampliación de la ciudadanía a otros sectores sociales y crear una mayor legitimidad al desarrollo del propio estado. Se trata en este modelo de estado ya no de rechazar al catolicismo sino de incorporarlo a las gestiones reformadoras del Estado. Esto produce una nueva situación debido a que la jerarquía eclesial no se apoya en organismos propios para conseguir una presencia social, sino que de hecho ha delegado esa función en el estado. Por otro lado el estado y la iglesia católica pasan a formar parte de los grandes dadores de sentido .

Al mismo tiempo donde las relaciones entre estado benefactor -institución eclesial crecen y se expanden, la posibilidad para una pluralidad religiosa amplia, disminuye. Ahora es el catolicismo quien -desde posiciones de poder- combate a las nuevas expresiones religiosas institucionalizadas especialmente norteamericanas que luego del fin de la guerra en el 45 , se expanden por América Latina y el Caribe. Busca que sean toleradas las ligadas a grupos y comunidades inmigrantes siempre y cuando acepten su hegemonía en el campo religioso y cultural. El hispanismo, su lucha contra el modelo wasp - white anglo-sajón protestante, la amenaza comunista y la valorización de lo nacional entendido ahora como continuidad de la larga tradición en el continente de presencia católica y española son los elementos centrales El protestantismo es descalificado en términos de no representar la identidad nacional.

II. TIPO DE CATOLICISMO HEGEMONICO A PARTIR DE LOS 30

En otros trabajos hemos mostrado como lentamente se va haciendo hegemónica desde mediados de los 20 un tipo de catolicismo al que hemos llamado integral , catolicismo en toda la vida , donde lo religioso no se comprende alejado de lo social y la fidelidad al Papado en Roma y a los objetivos estratégicos de la institución guían el accionar cotidiano.

Ibid, Del liberalismo integral a la hegemonía militar en CEHILA, La iglesia en el cono sur, Salamanca:Sígueme,1994

Ibid, La iglesia en los regímenes populistas en América Latina (1930- 1959) en E. Dussel, edit. Resistencia y esperanza, San José: DEI,1995:

Si bien vienen construyéndose desde años atrás, es a partir del 30 cuando se consolida el modelo llamado - por los propios autores eclesiásticos- de Argentina católica

Alameda, Julian , Argentina Católica, BsAs: Padres Benedictinos, 1935 .El autor es un sacerdote salesiano que en sus 1031 páginas muestran como la Argentina se ha transformado en un país católico. Describe , por ejemplo, la influencia de las 113 parroquias de la ciudad de Buenos Aires en la época. . De un catolicismo a la defensiva, se pasa a otro a la ofensiva ; de un catolicismo de posición a otro de movimiento ; de un catolicismo de conciliación se pasa a otro de penetración donde el clero y los notables católicos comienzan a tener relaciones privilegiadas con el Estado y sus principales instituciones (entre ellas las FFAA)

F. Mallimaci, Catolicismo y militarismo en Argentina (1930-1983). De la Argentina liberal a la Argentina Católica en Revista de Ciencias sociales, Univ. Nacional de Quilmes, nro. 4, agosto 1996. .

A partir de la crisis del consenso liberal de esta época, el catolicismo dominante busca ser dador de identidad nacional y presentarse como factor de integración a fin de crear una nueva hegemonía enfrentada a la hasta ayer dominante . Proceso llevado adelante con fuertes resabios autoritarios dado su enfrentamiento a la matriz liberal como a la amenaza socialo-comunista y a su concepción del orden , control social y las jerarquías. Proceso llevado adelante también con una fuerte insistencia en la justicia y armonía social, el bien común, la igualdad y la sospecha a la vida democrática.

El catolicismo puede jugar así como nacionalismo de sustitución

Quattrocchi-Woisson, Diana, Los males de la memoria, BsAs : Emece, 1995 produciéndose una lenta pero tenaz catolización de la sociedad y el estado en Argentina. La presencia, impacto y reconocimiento del catolicismo deja de ser secundaria para convertirse en uno de los principales elementos de identidad cultural y simbólica de amplios sectores sociales, especialmente los populares.

En un lento pero abarcador proceso el movimiento católico y la institución eclesial buscan que identidad nacional sea comprendida como igual a identidad católica y viceversa . Al mismo tiempo Que. la sociedad se catoliciza, vastos sectores institucionalizados del catolicismo se militarizan y estatizan. Las FFAA y policiales, los agentes estatales (se destaca la Justicia, la Educación, Relaciones Exteriores) y la mayoría de los partidos políticos parlamentarios hacen suyo también la defensa de la sociedad católica produciéndose una simbiosis que ha perdurado -con matices - hasta la fecha.

Desconocer esta matriz ha llevado a tantos investigadores a ignorar a un actor tan importante como el movimiento católico y a esta identidad católica difusa impregnando la sociedad. Esto ha llevado a jugar a la historia complot (sólo aparece lo eclesial en algun momento de conflicto sin explicarse la génesis de esa posibilidad) o utilizar esquemas binarios ( liberales o socialistas progresistas frente a católicos tradicionalistas o conservadores ) o a reproducir el esquema de análisis histórico elaborado por la propia institución eclesial confundiendo así catolicismo o religioso con la propuesta hegemónica de alguno de los grupos internos eclesiales.

IV. LOS CATOLICISMOS EN LOS ORIGENES DE LA EXPERIENCIA PERONISTA

Siguiendo entonces con nuestro esquema de ánalisis y comprensión de los fenómenos sociales y en especial del religioso vemos como el catolicismo presenta diversas fascetas en 1946. Algunas son frutos de su devenir histórico; otras desarrolladas con mayor fuerza desde el golpe cívico-militar- religioso de 1943; otras nacen y se reproducen en la interacción con los nuevos actores sociales y políticos de la época.

Debemos recordar por otro lado que la institución trata de mostrar, especialmente en su cuerpo de especialistas, una imagen de homogeneidad. Como nos recuerda P. Bourdieu debemos analizar el conflicto religioso al interior de un campo con ofertas y demandas varias donde los actores tratan de monopolizarlo y poseer ser así el poder de nominación legítimo diciendo esto es verdadera religión, esto es verdadero catolicismo.

Por otro lado, los obispos - especialmente en esta época- raramente expresaban públicamente sus diferencias. Su homogeneidad no es unanimidad debiéndose buscar las divergencias en otros actores, como sacerdotes, religiosas, órdenes , congregaciones y movimientos cristianos. Se autocomprenden como los sostenedores y custodios de la unidad . Tratan de atenuar conflictos y las decisiones que toman buscan recoger la mayor cantidad de adhesiones a partir de grandes orientaciones.

Además, como hemos ya visto, tratándose de un catolicismo integral su presencia no se reducía al ámbito de la sacristía sino que buscaba penetrar a otros actores ( militar, obrero, partidario, estatal...) y en otras dimensiones: lo cultural, político, social, simbólico...

Los miembros de este movimiento católico ya no provenían como en las primeras décadas del siglo XX de familias de notables sino que habían sido formados en la propia institución y en sus movimientos . Son ahora militantes que han hecho una carrera y una experiencia de socialización al interior de la Iglesia Católica. Se destaca la Acción Católica en sus diversas ramas y expresiones donde a la inicial división de 1931 por edad y sexo (adultos y jóvenes, hombres y mujeres) se le suma la de los ambientes sociales (obreros, estudiantes, agricultores...)

Como hemos analizado a partir de numerosas entrevistas y documentos , el espíritu de estos hombres y mujeres es de entrega, fervor, cruzada, compromiso social, restauración... El antiliberalismo y el antisocialismo están a flor de piel... Más aún, varios de ellos sienten admiración y a veces fascinación por los que se juegan, los que luchan, los que la pelean dentro del campo socialista y comunista en nombre de ideales de solidaridad . Los consideran equivocados pero los prefieren a los pitucos liberales, a los individualistas burgueses lectores de La Prensa ...

Las movilizaciones obreras de 1945 y las elecciones de febrero de 1946 en Argentina son nuevamente fuente de conflictos como ayer lo fueron la guerra en España y la guerra mundial. No se trata ya de hechos externos sino de vivencias cotidianas. Si no se puede ser católico y liberal, es posible ser católico y nacionalista ? Es lo mismo ser católico nacionalista que nacionalista católico? Es posible ser católico y antinacionalista? Se puede ser católico y apoyar a opciones políticas liberales y socialistas? Se puede ser parte del movimiento católico y tener adhesiones públicas individuales contrarias a las del movimiento ?

Una constatación ya hecha en otros trabajos pero que me parece importante reiterar. No debemos confundir a los católicos nacionalistas con los nacionalistas católicos. Los primeros son una de las partes del catolicismo integral y del movimiento católico. Son primero católicos y luego nacionalistas. Son seguidores del Papa, de la institución y del conjunto de los principios de la doctrina social de la Iglesia. Son catholique dabord

Integrisme et catholicisme integral, Paris: Casterman, 1969

Eglise contre bourgeoisie, Paris: Casterman, 1977

Leglise cest un monde, Paris: Cerf, 1986 . Es decir, priorizan su adhesión católica a sus opciones partidarias. Los segundos son nacionalistas integrales y adhieren a ciertas cuestiones morales y principistas de la doctrina católica. Han socializado sus principios políticos y sociales en otras tradiciones, sean maurrasianas , fascistas , nazistas, monárquicas o hispanistas. Son politique dabord. Es decir, priorizan sus adhesiones políticas a su pertenencia al movimiento católico.

Es indudable que las conexiones, ligazones, mutaciones y combinaciones varias son posibles. Especialmente cuando se trata de denigrar, estigmatizar y caricaturizar al enemigo liberal y/o al comunismo intrínsecamente perverso. Pero en situaciones claves o conflictivas afloran las tradiciones y fidelidades construidas en el tiempo.

1. Católicos en el campo político partidario.

La polarización entre la Unión Democrática y el Partido Laborista también dividió al campo católico. El catolicismo de acción , característica central del catolicismo integral toma caminos varios en 1945-1946 :

Aquellos que se consideraban así mismo como católicos liberales y católicos sociales se agrupan en grupos ligados a la experiencia de la Democracia Cristiana ( son llamados Unión Demócrata Cristiana en Córdoba; Acción Social Democrática en Rosario ; Fraternidad, Esquiu, Estrada y Movimiento Social Democrático en Buenos Aires. La proclama de diciembre de 1945 titulada Declaración por la Justicia social de Augusto Durelli resume estas posiciones . Se reclaman del humanismo integral ligado al filósofo católico francés Jacques Maritain.

En una carta, llaman a votar por la Unión Democrática : No obstante esta inclusión (la de la enseñanza laica en la plataforma de la U.D.) nos consideramos en el deber de votar como lo haremos. Peor que una equivocada solución a cuestión determinada , es la perversidad integral del sistema .Y el sistema que propicia el Coronel Perón es el totalitarismo Y agrega: A través de él.. se ha encendido la lucha de clases... De nada vale invocar a Dios y a las encíclicas pontificias, si con ello se pretende instrumentar las conciencias y la Iglesia al servicio del Estado, como por otra parte, lo han procurado todos los despotismos

Sin embargo no debemos confundir a estos humanistas integrales con su utopía de nueva cristiandad (que se enfrentaban al liberalismo burgués, al comunismo y al estatismo totalitario como proclamaba Maritain ) surgidos del catolicismo integral de otros católicos defensores del capitalismo liberal . La revista Orden Cristiano , que como su nombre lo indica hace referencia a la necesidad de ordenar la sociedad frente al desorden provocado por el totalitarismo comunista y fascista a partir de los principios cristianos, es también otro de los voceros antiperonistas. Orden Cristianofue editada por Alberto Duhau desde 1941 a 1948. Sin embargo la postura de su autor de defender el capitalismo liberal hará que los demócratas cristianos tomen distancia de su prédica. Dirá su director el capitalismo liberal, cambiará tal vez de nombre, pero la división del trabajo, el mercado libre y abierto, la libre empresa y la ganancia, sus postulados básicos no serán jamás sustituidos, si no se quiere ahogar nuestra civilización y llevarla a la miseria, a la guerra y al caos. La Iglesia, la justicia social y la riqueza en Orden Cristiano, nro. 141, 1947. Otros autores de la misma revista planteaban la disyuntiva entre capitalismo o caos totalitario.

Como nos recuerda uno de los historiadores de los Demócratas Cristianos en la Argentina, si bien caminaron juntos durante el gobierno peronista, luego este grupo se separa formando la mayoría en los 60 la agrupación Unión Cristiana Democrática que apoyó decididamente a partir de 1976, el llamado Proceso de Reorganización Nacional y en particular la gestión del ministro José Martínez de Hoz

Otros católicos, también provenientes del catolicismo integral, se suman y apoyan al coronel Perón.

Recordemos que este comienza a hablar en sus discursos de que se inspira en la doctrina social de la Iglesia y que su propuesta es humanista y cristiana. Además, el laborismo proclama la candidatura de Perón-Quijano en el santuario de la Virgen de Luján. Los símbolos están cambiando vertiginosamente. Es ahora la Virgen de Luján quien protege y apoya al candidato laborista. La oposición denuncia esta maniobra al mismo tiempo que afirma su laicidad en los símbolos y en la propuesta educativa. Un nuevo universo simbólico se está gestando donde lo religioso católico adquiere un lugar central como legitimador, dador de identidad y factor de unidad espiritual. El tema de debate público ya no es si debe o no haber presencia sagrada junto al poder sino que lo sagrado se simboliza ahora en lo católico . Se disputa cual catolicismo dará sentido y quien lo controla.

El diario católico El Pueblo con el titular de Proclamose la candidatura laborista en Luján así lo relataba: a través de su discurso el candidato laborista expresó, entre otras afirmaciones , que la enseñanza religiosa inspiraba el verdadero sentimiento patriótico. Finalizado el acto el coronel (R) Perón y sus acompañantes se trasladaron a la basílica, orando al pie de la imagen de la Virgen de Luján

Ese mismo día aparece en el diario la noticia que la Unión Popular Cristiana aconseja a sus afiliados a votar la fórmula Perón- Quijano.Recordemos que en la Capital Federal , hay una lista de legisladores que apoyan a la fórmula Perón-Quijano con boleta propia a nombre de la Alianza Libertadora Nacionalista. Sus principales candidatos son , entre otros, Juan Queraltó, el sacerdote Leonardo Castellani, Carlos Ibarguren (interventor de la pcia de Córdoba durante el gobierno militar d Uriburu en los 30) y un antiguo dirigente de la rama juvenil de la Acción Católica,Basilio Serrano (funcionario de la intervención de Corrientes durante el gobierno militar surgido en 1943).

Otro grupo de católicos formados en la Acción Católica y en otros movimientos similares, se incorporaran directamente a la experiencia partidaria y estatal llevada adelante por el justicialismo. Su ser religioso significa presencia social y política en movimientos que no atenten contra sus creencias e identidad católica. A diferencia de los demócratas cristianos, no se incorporan a experiencias cristianas sino que se suman a aquellas de inspiración cristiana. Para ellos , el justicialismo , será tambien una manera de llevar adelante sus concepciones religiosas. Antonio Cafiero, Emilio Mignone, A. Juarez , entre otros, representan esta corriente.

2. Católicos en relación a grupos militares y estatales.

Otro grupo de católicos integrales apoyan el surgimiento del peronismo , sobretodo por lo que significa de orden, autoridad, jefe militar, preservación de la identidad argentina frente a lo extranjero considerado como judío, yanky, protestante... Numerosos capellanes militares ven surgir la Nueva Argentina anunciada años atrás por el católico Alejandro Bunge : Cruces y espadas, sotanas y banderas, flameando a los vientos de la gloria, nos lanzamos una vez más a la batalla

Pero no es en los capellanes militares donde debemos buscar una mentalidad católica con fuertes tintes integralistas jerárquicos. Es importante destacar la figura del sacerdote Julio Meinvielle quien desde la década de los 30 hasta el setenta representará una mentalidad católica muy cercana a grupos políticos y militares sin que ello haya significado participación directa en la administración del Estado.

Si bien mantiene excelentes relaciones con grupos nacionalistas y anticomunistas, su principal y en última instancia adhesión es a la institución eclesial. Por el ello tambien, continuamente, estará denunciado a los infiltrados progresistas en el catolicismo. Para el existe una concepción católica jerárquica de la economía, de la política, de la sociedad... que deben ser mantenidas por el Estado. Una definición precisa de su pensamiento en un libro editado y reeditado varias veces: Artificialismo, liberalismo, individualismo en Rousseau; fisicismo, estatismo en la Action Francaise. Uno y otro, de igual que el autonomismo kantiano, implican la adoración del hombre, con la exigua diferencia de que, si en una son aduladas sus tendencia individuales, en la otra se exaltan sus tendencias sociales... Por esto, SOLO EL CATOLICISMO que establece eficazmente la trascendencia de Dios sobre lo creado y la absoluta dependencia del hombre con respecto a su Creador, puede salvarnos del absurdo de estas concepciones.

Años más tarde, al denunciar a aquellos que buscan cambiar el catolicismo lo hace reafirmando la inmutabilidad de la regla de conducta que comporta la doctrina de la Iglesia... la consigna sagrada e inviolable de la Iglesia es conservar con fidelidad el depósito que le ha sido confiado . Acusa a Maritain y a sus seguidores en la Democracia Cristiana de invitar a la Iglesia a plegarse a la causa de la Revolución, que es el Progreso de la Humanidad...Implicitamente subordina la Iglesia a la humanidad... Maritain con su Nueva Cristiandad renueva la tentativa de conciliación de la Revolución con la Iglesia como en tiempos de Pio IX hacia lo mismo el liberalismo católico. El mundo moderno debe ser tachado de malo por la esencia perversa que lo constituía .

Estas posturas y enfrentamientos al interior del campo católico, hará que unos acusen a otros de progresistas y los otros a los unos de integristas. Esto sin embargo, no nos debe hacer olvidar la matriz común que ha gestado a estas diversas maneras de ser católicos .

3. Católicos seducidos por la composición social y cultural popular

Otro grupo presente en los orígenes de la experiencia peronista es aquel que visualiza al nuevo movimiento que surge en octubre del 45 como una experiencia popular (en el sentido amplio del término) , de trabajadores que buscan la armonía social sin ligazón con la violencia anterior de las organizaciones sindicales, ligado a una cultura argentina y donde las posibilidades de cristianizarlo son amplias.

Gente que surge de la matriz antiliberal y anticomunista como son los escritores Juan Carrizo, Manuel Galvez, Leopoldo Marechal, Gustavo Martinez Zuviría y Ernesto Palacio, juristas como Tomas Casares, constitucionalistas como Arturo Sampay, abogados como Nimio de Anquin, etcétera. Son algunos ejemplos de figuras que se suman a la naciente experiencia peronista desde sus particulares concepciones y expectativas de lo nuevo que surge y que con el devenir del tiempo irán también tomando diversos caminos.

El artículo de Delfina Bunge de Galvez en el diario El Pueblo comentando las jornadas del 17 de octubre es un ejemplo de esta mentalidad. Una emoción nueva en Buenos Aires se titula el único aporte que aparece en un diario nacional a favor de la manifestación obrera. Allí se hace referencia a esa muchedumbre de trabajadores reunidos en actitud de paz y con fines pacíficos... Esas turbas parecían cristianas sin saberlo. Y sabiéndolo, eran argentinas... Sí, Jesús debió efectuar su milagro (de la multiplicación de los panes) en favor de turbas semejantes a éstas , de desarrapados... (y de paso: es incomprensible este reproche que se les aplica: si son desarrapados, culpa será de los exiguos sueldos que no les dan para más) ... A nosotros nos toca no defraudar a un pueblo pacífico en sus esperanzas de buena acogida y de un mínimo siquiera de justicia social.

Una figura a destacar es la del sacerdote Hernán Benitez dado que llevará activamente su adhesión al nuevo movimiento ocupando un lugar privilegiado junto a Eva Duarte tanto en su vida personal como en sus actividades sociales.

Sacerdote jesuita de prestigio y reconocimiento institucional (predicaba las homilías de Semana Santa en la Catedral Metropolitana de Buenos Aires durante los cuarenta), cuando el laborismo gana las elecciones en febrero de 1946, será quien realice los primeros comentarios políticos en la revista Criterio, dado que su director, el sacerdote Gustavo Franceschi se abstiene de analizar.

Director de la revista de la Universidad de Buenos Aires de 1948 a 1955, expresa allí y en otros artículos sus reflexiones y comentarios sobre el rol del catolicismo, la Iglesia, el justicialismo... Su postura fue la de ligar la suerte de la clase obrera a la de la institución eclesial, de rechazar paternalismo y asistencialismo católicos, de combatir el capitalismo liberal a partir de la doctrina católica y el movimiento justicialista. Así como sus amigos eran los sacerdotes Leonardo Castellani, Juan Sepich, Wilkinson, se sentía enemigo irreconciliable de Manuel Ordoñez y su grupo demócrata cristiano. Afirma que los grandes movimientos espirituales deben cabalgar sobre las grandes empresas materiales. Historia Oral del catolicismo argentino , Forni- Mallimaci, mimeo. Más detalles sobre esta época a partir de estas experiencias en : Floreal Forni, Catolicismo y Peronismo , BsAs : Unidos, nro. 14,17 y 18, 1987-1988

Un libro resume sus posturas. Objeta al capitalismo, se critica a las clases dirigentes argentinas , se asume que la Iglesia Católica debe trabajar no para sino con el pueblo, se identifica como justicialista y lo dedica a mis amigos los obreros de mi barrio Presidente Perón ,del 17 de octubre, de Los Perales, de Villa Cartón... y bastiones obreros del Gran Buenos Aires

4. Católicos que acompañan en la vida cotidiana

Y por último , es importante destacar la red católica de sacerdotes, religiosas, religiosos, notables católicos, militantes de Acción Católica que de una u otra manera, participaron con su presencia, su palabra y sus gestos en dar legitimidad, legalidad y consenso a la subversión de los reclamos de los trabajadores que no estaban asociados a socialistas o comunistas.

Quizás el ejemplo más nítido - aunque no el único- haya sido la experiencia de Cipriano Reyes en el sindicato de la carne en Berisso. En su enfrentamiento a la conducción comunista del sindicato y en su necesidad de mayor reconocimiento e impacto no dudó en pedir colaboración a diversos sacerdotes de La Plata cercanos a las experiencias populares. En su libro sobre la experiencia del 17 de octubre no sólo rescata a un Jesús , primer anarquista.. que un día salió al encuentro de los menesterosos y con ellos organizó su apostolado de lucha emancipadora sino que muestra la relación directa con sacerdotes para llevar adelante sus huelgas y triunfos.

El Padre González, secretario del obispo de La Plata en 1944 y 45 y presidente del Sindicato de Obreros Católicos de la construcción de la misma ciudad, es quien participa de las asambleas de los obreros de la carne, lo acompaña ante el Jefe de Policía primero y luego ante el Interventor militar legitimando así un liderazgo obrero no comunista. El Padre González se asombraba al escuchar algunos aspectos de la explotación humana, del tratado y de la subestimación de los trabajadores de los frigoríficos. .. La presencia del P. González (junto a las autoridades ) representaba una garantía sobre nuestra verdad... Cuando el General Interventor les dice que la huelga está dirigida por comunistas, él le puede responder junto al sacerdote Eso no es cierto general! Los obreros de Berisso no estamos en huelga por ideas extrañas a nuestros sentimientos de argentinos sino por hambre...

CONCLUSIONES

Esta breve reseña nos permite entonces llegar a algunas conclusiones.

1. Debemos reconocer al catolicismo en general y al catolicismo integral en particular una presencia social, política, simbólica y religiosa diferenciada a lo largo de los años. La llegada del peronismo permitirá relacionar un imaginario católico antiliberal y antisocialista a una experiencia social de fuerte contenido obrero y popular. Esto sólo fue posible dada la crisis del consenso liberal y a la necesidad de nuevas legitimidades .Imaginario católico antiliberal disponible tanto para experiencias ligadas a grupos militares; a movimientos nacionales o a grupos anti- yanky.

2. El catolicismo no solo aporta cuadros y militantes a los orígenes del peronismo sino, fundamentalmente, una cultura católica de fuerte presencia nacional que logra integrar a una nueva hegemonía a sectores sociales hasta ayer excluidos de los derechos de ciudadanía y reconocimiento social. La burla o afrenta a los símbolos de autoridad que realizan los trabajadores libremente y que en ocasiones no tiene otro objetivo que desafiar la seguridad hegemónica, despojar al poder de su mistificación simbólica o incluso meramente vilipendiarlo a diferencia de década anteriores no se realizan ahora contra figuras o edificios católicos como si había sido en 1875, 1905 o 1919. La catolicidad difusa es parte de esa nueva cultura naciente de los trabajadores .

3. La diversidad al interior del catolicismo nos exige rigor metodológico y teórico para analizar procesos en el largo plazo, entender lógicas y matrices en sus continuidades y rupturas, relaciones al interior del campo religioso como con el resto de la sociedad en continuo conflicto y transformación. Las afinidades electivas de los actores no nos debe impedir ver sus identidades y objetivos de largo plazo. Esto evita el etiquetamiento que responde más a la ideología o concepción previa del analista que a la investigación científica .

face="Courier New" 4. El conflicto del catolicismo integral con la modernidad no es circunstancial o pasajero sino que responde a una matriz forjada en el siglo pasado y que bajo diversas posturas, nombres y movimientos expresa un desencantamiento del mundo burgués y una búsqueda de superación sea en una vuelta al pasado, sea en una restauración, sea en alianzas con actores sociales que hagan de su combate uno de sus objetivos, sea en proponer su superación sin aceptar sus conclusiones. No modernos, pre-modernos, antimodernos y hoy postmodernos son propuestas a las cuales este catolicismo de acción acude en su intento de deslegitimatizar al mundo moderno como ya lo reclamaba Pío IX con su Syllabus en 1864 . No es el único catolicismo pero es el que ha hegemonizado el espacio católico desde el proceso de romanización en el siglo pasado hasta el período que hemos analizado. Frente al mito del apoliticismo de la Iglesia Católica , recordemos que la fuga del mundo, tema espiritual clásico, no ha sido en esa época ni es actualmente una máxima romana.

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