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TALLER

MORFOLOGÍA MACROSCOPICA EN LA CLASIFICACION DE ARTEFACTOS LÍTICOS: INNOVACIONES Y PERSPECTIVAS

 

INSTITUTO DE ARQUEOLOGÍA Y MUSEO

Facultad de Ciencias Naturales e I.M.L. Universidad Nacional de Tucumán

Dirección: San Martín 1545 (4000) San Miguel de Tucumán. ARGENTINA.

Teléfono: 54-0381-4233962.

 

Resúmenes

TALLER
MORFOLOGÍA MACROSCOPICA EN LA CLASIFICACION DE ARTEFACTOS LÍTICOS: INNOVACIONES Y PERSPECTIVAS

COORDINADORES

Carlos Aschero
Jorge Martínez
Salomón Hocsman

COMENTARISTAS

Cristina Bayón
Cristina Bellelli
Teresa Civalero
Patricia Escola
Nora Flegenheimer
Nora Franco
Julieta Gómez Otero
Gabriela Guraieb

LISTADO DE PONENCIAS

EJE TEMÁTICO 1: ARTEFACTOS FORMATIZADOS

1- Viejas y nuevas categorías analíticas y niveles de clasificación en el análisis macroscópico de artefactos líticos tallados
Carlos A. Aschero y Salomón Hocsman

2- Resignificando los grupos tipológicos
Enrique Alejando Moreno

3- La clase técnica: propuesta de una nueva categoría analítica
Carlos A. Aschero y Salomón Hocsman

4- Discusión sobre atributos morfológicos para el estudio de artefactos de molienda en el borde occidental de la Subregión Pampa Húmeda
Juan David Avila

5- Procedimiento para el análisis tipológico y tecnológico de artefactos de molienda
María del Pilar Babot

6- Hacia una clasificación morfológico-funcional de artefactos de molienda
María del Pilar Babot

7- Designación técnico-morfológica de los artefactos de molienda
María del Pilar Babot

8- Consideraciones acerca de dos grupos tipológicos: los cuchillos de filo retocado y de filo natural
María Teresa Civalero

9- Nuevo atributo para el grupo tipológico raspador (M3.07)
Ana Gabriela Guráieb

10- El problema de los productos bipolares
María Isabel González y Mariana Vigna

11- Grupos tipológicos M3.09; M3.10; M3.11 y M3.12
Ana Gabriela Guráieb

12- El grupo tipológico de los bifaces y sus subgrupos
Salomón Hocsman y Carlos A. Aschero

13- El grupo tipológico de los filos bifaciales de arista sinuosa
Salomón Hocsman y Carlos A. Aschero

14- El problema de los guijarros partidos en contextos arqueológicos de la costa nordpatagónica
Diego Daniel Aguirre

15- Los grupos tipológicos de las gubias y los escoplos
Carlos A. Aschero

16- Palas y/o azadas líticas manufacturadas por lascado. Nuevo grupo tipológico (M3.33.00)
Susana Pérez

17- Palas y/o azadas líticas manufacturadas por lascado. Agregado/modificación de variables en las descripciones
Susana Pérez

18- El subgrupo tipológico de los esbozos de piezas bifaciales
Carlos A. Aschero y Salomón Hocsman

19- El grupo tipológico puntas de proyectil: propuesta para evitar su función ad hoc
Norma Ratto

20- Modificaciones en el grupo tipológico M3.24.00 Puntas de proyectil
Jorge G. Martínez

21- Sobre las longitudes relativas en limbos de puntas de proyectil
Carlos A. Aschero

22- Forma de la base en puntas de proyectil apedunculadas escotadas
Patricia S. Escola

23- Formas de la base: una variante más
Jorge G. Martínez y Salomón Hocsman

24- Propuesta de inclusión de atributos para el caso de las puntas de proyectil
Nora Viviana Franco y Mariana Carballido

25- Artefactos no-compuestos, compuestos y relaciones de complementariedad entre grupos tipológicos
Carlos A. Aschero

26- Ampliación de la categoría "grupo de los instrumentos compuestos"
Salomón Hocsman

27- El mantenimiento y el reciclaje de artefactos líticos
Julio César Avalos
28- Propuesta para la inclusión de atributos destinados a evaluar la vida útil de raspadores, raederas y cuchillos
Nora Viviana Franco

29- "Secuencia de formatización" en artefactos formatizados: definición y aplicaciones
Salomón Hocsman y Jorge G. Martínez

30- Artefactos bifaciales: errores de manufactura
Lizzie Pintar

31- Fracturas irregulares: otras causas
Jorge G. Martínez

32- Propuesta de modificación de la cuadrícula de localización
Salomón Hocsman

33- Orientación, segmentación e ilustración de artefactos de molienda
María del Pilar Babot

34- Designación e identificación de modos de acción en artefactos de molienda
María del Pilar Babot

35- Propuesta de clasificación geoarqueológica de fuentes de materias primas líticas
Salomón Hocsman y Sergio M. Georgieff

36- Tipología y tecnología lítica en el Nordeste argentino
Jorge Amilcar Rodríguez

37- Aplicación de la "Tipología" de Carlos Aschero al registro arqueológico del Sistema de Ventania, provincia de Buenos Aires
Fernando Oliva y Jorge Moirano

EJE TEMÁTICO 2: NÚCLEOS

38- El problema esta en el núcleo
Nora Flegenheimer y Cristina Bayón

39- ¿Un nódulo testeado es un núcleo?
Gabriela M. Armentano

40- Propuesta para la inclusión de atributos destinados a evaluar el grado de explotación y causas para el descarte/abandono de núcleos
Nora Viviana Franco

EJE TEMÁTICO 3: DESECHOS DE TALLA

41- Módulos de tamaño y longitud relativa para útiles y desechos de talla
Carlos A. Aschero

42- Ambigüedades en la clasificación de productos de talla por "Forma de Lasca"
Darío Hermo

43- El estudio de la variabilidad a través de los conjuntos de desechos líticos
G. Roxana Cattaneo

44- Adventicias y de desprendimiento térmico. ¿Tipos de lascas?
Cristina Bellelli y Mariana Carballido Calatayud

45- Desechos de talla: Considerando los subproductos de la talla bipolar
Patricia S. Escola

46- ¿Talones pseudo-filiformes?
Patricia S. Escola

47- Propuesta para la inclusión de atributos para desechos de talla
Nora Viviana Franco

EJE TEMÁTICO 4: FILOS NATURALES CON RASTROS COMPLEMENTARIOS

48- Operatividad de los filos naturales con rastros complementarios
Patricia S. Escola

49- Una propuesta para los rastros complementarios
María Gabriela Chaparro

50- Aportes del análisis funcional para la integración de variables de análisis de filos naturales, en las tipologías líticas
Alicia S. Castro

51- El problema de ciertas variables morfológicas como criterio clasificatorio en la definición de instrumentos: Perspectiva desde el análisis funcional de base microscópica
Myrian R. Alvarez y María Estela Mansur

52- Propuesta de modificación para el registro de los rastros complementarios que se relacionarían con el uso de los instrumentos
Andrea Toselli

RESUMENES

1- VIEJAS Y NUEVAS CATEGORÍAS ANALÍTICAS Y NIVELES DE CLASIFICACIÓN EN EL ANÁLISIS MACROSCOPICO DE ARTEFACTOS LÍTICOS TALLADOS

Carlos A. Aschero* y Salomón Hocsman**
* CONICET ** Becario CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

Se propone aquí la redefinición de una serie de categorías analíticas y la incorporación de otras nuevas para el análisis macroscópico de artefactos líticos tallados. Las mismas funcionan a modo de niveles sucesivos de clasificación, a saber:
1. Conjunto lítico, constituido por una muestra procedente de una excavación arqueológica, de una recolección de superficie o de un trabajo experimental, bajo ciertas condiciones de asociación.
2. Subconjunto lítico: la discriminación del conjunto lítico por variedad de roca y/o calidades de las materias primas utilizadas.
3. Clase tipológica, que agrupa aquellos artefactos cuyas características morfológicas permiten diferenciarlos en: I- Núcleos, II- Desechos de talla, III- Artefactos formatizados y IV- Artefactos (lascas u hojas) con filos, puntas o superficies con rastros complementarios.
4. Clase técnica, que distingue grados de trabajo invertido en la producción de artefactos de piedra tallada para las distintas clases antes mencionadas.
5. Serie técnica, que establece las diferencias entre los distintos procedimientos técnicos utilizados para dar forma a cada artefacto formatizado o serie de instrumentos. Sólo se la emplea para artefactos formatizados y lascas u hojas con rastros complementarios, es decir, para las clases tipológicas III y IV. Esta última, a los fines de su representación en la estructura tipológica del conjunto, se incluye dentro de las series "talla de extracción sin formatización" o bien "litos no formatizados sin talla de extracción con rastros complementarios".
6. Grupo tipológico, que diferencia los artefactos según su diseño. Esta categoría opera como un vía analítica independiente de la clase y serie técnica y, en algunos casos, requiere utilizar atributos empleados por aquellas para definir los diseños. El término diseño es considerado aquí como referido a la producción de ciertos tipos de artefactos, en relación a tres normas de observación: frontal (contorno, caras y bordes, simetría frontal), laterales (aristas, simetría latero-longitudinal o del perfil) y sagital (sección de filos y/o bordes activos o pasivos, simetría latero-transversal).
7. Subgrupo tipológico, que especifica los diseños de los grupos.

2- RESIGNIFICANDO LOS GRUPOS TIPOLÓGICOS

Enrique Alejandro Moreno
Escuela de Arqueología. Universidad Nacional de Catamarca.

El "ensayo para una clasificación morfológica de artefactos líticos" cuyo autor es Carlos Aschero ha significado un cambio radical en los análisis de los conjuntos líticos desde hace ya casi tres décadas. Sin embargo, creemos que ésta es una excelente oportunidad para replantear algunas de sus cuestiones esenciales en cuanto a la definición de los grupos tipológicos.
Como en la gran mayoría de las tipologías, se define a priori el tipo (denominado en este caso grupo tipológico), definiéndose como primer variable al enfrentarse con el objeto de estudio, antes de analizar cualquier otro ítem relevante del artefacto (léase medidas, ángulo, tipo de lascado por nombrar algunos). Creemos que esta es una desventaja, ya que se minimiza la cantidad de información que podemos extraerle al instrumento.
Nuestra primera propuesta radica en pensar en una redefinición de los grupos tipológicos, para lo cual tomaremos como caso de estudio a Tebenquiche Chico 1 (Departamento Antofagasta de la Sierra, Provincia de Catamarca), mostrando la manera en la cual podemos alcanzar una resignificación de los artefactos líticos en casos particulares de estudio.
Otra cuestión a discutir en el marco de estas jornadas, es la determinación de una funcionalidad primaria de los artefactos líticos al enmarcarlos dentro de un tipo estático. Al definir un grupo tipológico, le estamos asignando una función primaria a los artefactos, siendo ésta supuesta a partir de variables morfológicas macroscópicas que muchas veces nada tiene que ver con la real funcionalidad. Esta no es tanto una critica al "Ensayo..." de Aschero, sino más bien un aporte al crecimiento del análisis de los conjuntos líticos. Es por ello que nuestra segunda propuesta gira en torno de la necesidad de realizar análisis microscópicos funcionales con el objeto de aumentar nuestro conocimiento de nuestro problemas de análisis. Para ello mostraremos los avances significativos logrados en nuestro caso de estudio.

3- LA CLASE TÉCNICA: PROPUESTA DE UNA NUEVA CATEGORÍA ANALÍTICA

Carlos A. Aschero* y Salomón Hocsman**
* CONICET ** Becario CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

La clase técnica distingue grados de trabajo invertido en la producción de artefactos de piedra tallada para las distintas clases tipológicas. Esta inversión de trabajo se mide, en los productos finales, a través de la superposición de lascados que cubren total o parcialmente la superficie de una u otra cara del artefacto, entrecruzándose o no en el eje medio de la pieza. Esos lascados son efectos resultantes de distintas operaciones técnicas -las diversas modalidades de la talla por percusión o por presión- implementadas para rebajar el espesor de la forma-base elegida. Esto es: para alcanzar un espesor requerido por el diseño final, en un útil o instrumento, o para obtener un determinado producto de talla de la parte interna de la masa lítica original, en un núcleo. Por lo tanto, estas operaciones de rebaje -con su plus de trabajo invertido- pueden obedecer a la búsqueda de productos finales diferentes, sea que tratemos con artefactos formatizados o con núcleos. A su vez, los desechos de talla procedentes de estas tareas van a presentar características particulares que reflejan si se trata de una u otra de estas tareas de rebaje.
Este nivel tiene en cuenta, según las distintas clases tipológicas, la observación de las siguientes características:
- En núcleos: morfología de la plataforma de percusión y del frente de extracción, dirección de los lascados de extracción y módulo dimensional de las cicatrices o negativos de lascados de extracción.
- En desechos de talla y en artefactos con rastros complementarios: morfología del talón, morfología de la cara dorsal, morfología de la cara ventral y módulo dimensional.
- En artefactos formatizados: la cobertura total o parcial de los lascados, con o sin rebaje del espesor de la pieza, en cada una de sus caras. Complementariamente se observa el tipo de sección en norma sagital y lateral, el tamaño y el espesor relativo de las piezas dentro del conjunto.
En la propuesta original de uno de nosotros (Aschero 1975), se incluía a los núcleos y a los desechos de talla dentro de series técnicas específicas. Sin embargo, las diferencias en la inversión de trabajo durante el desbaste de núcleos a partir de distintos procedimientos técnicos -por ejemplo, al considerar núcleos poliédricos en relación a núcleos bifaciales o a núcleos de hojas y sus desechos resultantes- y el hecho de que las variables empleadas en la definición de las series técnicas no cubren los aspectos mencionados para una adecuada caracterización de núcleos y desechos de talla, se consideran razones suficientes como para excluir a ambas categorías de las series técnicas e incorporarlas en esta propuesta como clases técnicas. Los artefactos con rastros complementarios se incluyen en el análisis de las clases técnicas, al igual de los desechos de talla, para integrar la información del origen de la extracción de las formas-base, es decir, si proceden de tareas de extracción de lascas u hojas externas o internas.

4- DISCUSIÓN SOBRE ATRIBUTOS MORFOLÓGICOS PARA EL ESTUDIO DE ARTEFACTOS DE MOLIENDA EN EL BORDE OCCIDENTAL
DE LA SUBREGIÓN PAMPA HÚMEDA

Juan David Avila
CEAR. Facultad de Humanidades y Artes. UNR. Becario de CONICET.

Los estudios en la Región Pampeana sobre artefactos líticos están íntimamente relacionados (casi en su totalidad) con artefactos confeccionados por técnica de talla y funcionalmente formatizados para actividades de corte. Los elementos de molienda han sido poco considerados o en su defecto considerados secundariamente desde la clasificación general, a pesar de la valiosa información que estos podrían generar.
En esta presentación se discuten los análisis efectuados sobre elementos de molienda, provenientes de sitios localizados en el Borde Occidental de la Pampa Húmeda, como parte del Proyecto de investigación "El registro arqueológico del uso del espacio en ambientes ecotonales de la Región Pampeana", dirigido por F. Oliva y acreditado en la Universidad Nacional de Rosario.
Particularmente se propone examinar atributos morfológicos relacionados con elementos de molienda sobre la base del "Ensayo para una clasificación morfológica de artefactos líticos" (Aschero 1975, 1983); dada la necesidad de estudiar artefactos confeccionados por esta tecnología particular localizados en museos regionales y colecciones particulares del Borde Occidental de la Subregión Pampa Húmeda. Esto llevó a conformar una tabla de clasificación para su estudio, que se generó a partir de la unificación de criterios, tomando como ejes las propuestas llevadas a cabo por Aschero (1975, 1983) en primer lugar, y por Oliva y Moirano (2001) y Adams (1996). Además se tuvo en cuenta para la confección de la mencionada tabla la observación macroscópica de los materiales de tecnología de molienda, seleccionando una serie de atributos específicos (14) para el análisis.
La discusión en este Taller de los atributos propuestos y de la tecnología de molienda definida como: "...the combination of knowledge, ideas, behavior, and equipament to solve the problems of altering surfaces or substances" (Adams 1996: 2), abrirá nuevos caminos en la interpretación del registro arqueológico y de las investigaciones sobre los grupos humanos del pasado que utilizaron estas conductas tecnológicas.

5- PROCEDIMIENTO PARA EL ANÁLISIS TIPOLÓGICO Y TECNOLÓGICO DE ARTEFACTOS DE MOLIENDA

María del Pilar Babot
Becaria CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

Se propone la utilización de un procedimiento sistemático para el análisis tipológico y técnico de artefactos de molienda. Éste se basa en los desarrollos de Aschero (1975, 1983) y consta de cuatro etapas analíticas: a) segmentación del conjunto, b) orientación, ilustración y segmentación de cada artefacto, c) descripción de variables técnico-morfológicas y morfológico-funcionales y, d) clasificación y análisis.
La segmentación de la muestra implica el agrupamiento de los artefactos en a) conjuntos líticos (sensu Aschero y Hocsman 2003); b) subconjuntos por materia prima (ibid.) y, c) clases tipológicas (ibid.) -núcleos, desechos, artefactos formatizados y artefactos utilizados sin manufactura previa-.
Posteriormente, cada instrumento se orienta, ilustra y segmenta de acuerdo a criterios establecidos. La etapa siguiente comprende la descripción estandarizada de variables de índole morfológica que corresponden a caracteres o relaciones, posiciones y dimensiones relativas o absolutas en los artefactos. Dichas variables se agrupan en dimensionales, técnico-morfológicas y morfológico-funcionales. Otros atributos auxiliares se registran mediante variables de procedencia, de identificación, de estado, y de posición.
El análisis técnico-morfológico se basa en atributos que permiten hacer inferencias en relación con las distintas etapas de producción de los artefactos; éstos se dirigen a captar, principalmente, variantes en la selección y modificación de una determinada forma de la materia prima. En cambio, para el análisis morfológico-funcional, se describen variantes morfológicas que distinguen a las zonas activas, de prensión o soporte entre sí, teniendo en cuenta que son el producto de una elección funcional, por lo que conducen a definir grupos tipológicos y modos de acción (Aschero 1975).
Los datos de cada artefacto se sistematizan para proceder a su clasificación dentro de categorías técnico-morfológicas y morfológico-funcionales. Posteriormente, la información de toda la muestra artefactual se sintetiza mediante la confección de listas tipológicas y el análisis de la estructura del conjunto resultante, de acuerdo con la propuesta de Aschero (1975).
La descripción completa de los artefactos se registra en una ficha descriptiva con dos secciones. En la primera sección (1), dedicada a la descripción sumaria de la pieza, la ficha está dividida en dos campos: 1.a) registro de variables auxiliares y descripción sumaria general, y 1.b) descripción sumaria complementaria, clasificaciones morfológico-funcional y técnico-morfológica de los artefactos, y descripción general con fines museográficos. La segunda sección (2) está dedicada a la descripción segmentaria de la pieza y a la clasificación de cada zona activa. En ella se presentan cuatro campos destinados a la descripción de: 2.a) caras, 2.b) bordes, 2.c) oquedades y 2.d) rasgos morfológicos complementarios.
6- HACIA UNA CLASIFICACIÓN MORFOLÓGICO-FUNCIONAL DE
ARTEFACTOS DE MOLIENDA

María del Pilar Babot. Becaria CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

La clasificación morfológico-funcional de los artefactos de molienda puede realizarse en tres niveles. En un orden de especificidad creciente, éstos son: a) por referencia a su posición en el sistema artefactual -el conjunto de artefactos utilizados simultáneamente- y al grado de definición como moledores, b) en grupos tipológicos, tomando en cuenta los atributos más directamente relacionados con la funcionalidad de la pieza, y c) en tipos morfológicos, de acuerdo con variables tecnológicas y funcionales que permiten observar la variabilidad dentro de los grupos y subgrupos.
Los artefactos de molienda pueden definirse como aquellos utensilios usados de a pares para quebrantar o reducir sustancias intermedias, ecofactuales, a un tamaño más pequeño que el original. De este modo, sus características esenciales son: a) requieren para funcionar de, por lo menos, dos partes, las cuales se complementan mutuamente; b) el fin de su utilización no es reducir su propio tamaño, sino el de otras sustancias que no son artefactos; y c) estas sustancias deben ubicarse entre las dos partes artefactuales para poder ser procesadas.
Pueden presentarse como utensilios manufacturados o como litos modificados por uso; esto es, no manufacturados pero portando evidencias de utilización. Los mismos se designan como artefactos de molienda no manufacturados con rastros complementarios.
En el primer nivel de clasificación se diferencia entre 1) Artefactos de molienda formatizados o no manufacturados con rastros complementarios y 2) Artefactos indefinidos formatizados o no manufacturados con rastros complementarios. Los artefactos inconclusos también pueden distinguirse con el mismo criterio: 1) Preformas de artefactos de molienda y 2) Preformas de artefactos indefinidos. A su vez, dentro de cada una de estas tres categorías generales, se diferencian: pasivos o inferiores, activos o superiores y, de posición indeterminada.
La clase 1) y las preformas de artefactos de molienda engloban los siguientes grupos tipológicos o sus preformas: a) Mortero, b) Molino de mano o moledera, c) Base o solera de maray, d) Artefacto de molienda pasivo o inferior no diferenciado, e) Mano de mortero, f) Mano de molino o de moledera, g) Maray y, h) Artefacto de molienda activo o superior no diferenciado. Dentro de estos ocho grupos pueden diferenciarse subgrupos tipológicos y tipos morfológicos.
Las categorías morfológico-funcionales deben determinarse en cada superficie activa de un artefacto, poniéndolas en relación con las caras que cumplen funciones de prensión y soporte. Esto se lleva a cabo a partir de los valores asignados en una instancia analítica anterior, a un conjunto de variables que se indican para cada nivel de clasificación.
La designación del artefacto completo tiene en cuenta la denominación de todas las superficies activas contenidas, la ocurrencia de reciclaje, y la naturaleza del artefacto según el número y función de las superficies activas (simple, doble, múltiple y compuesto).

7- DESIGNACIÓN TÉCNICO-MORFOLÓGICA DE LOS ARTEFACTOS DE MOLIENDA

María del Pilar Babot
Becaria CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

La designación técnico-morfológica de los artefactos de molienda se realiza teniendo en cuenta atributos que permiten definir a los instrumentos desde ambos aspectos no funcionales, y sin referencia a los grupos tipológicos. Dicha denominación se basa en los valores asignados a las siguientes variables:

" Forma general de la pieza
" Clasificación según el número y función de las caras
" Tipo de manufactura -en referencia a la inversión de trabajo-
" Técnicas y Procedimientos tecnológicos empleados en la manufactura -serie técnica-
" Presencia de rastros de uso

La serie técnica de cada artefacto o la secuencia particular de técnicas empleadas en su manufactura
(Aschero 1975, 1983) establece las particularidades de los procedimientos técnicos utilizados para modelar a cada artefacto formatizado o serie de instrumentos (Aschero y Hocsman 2003). La misma, constituye un resumen de lo indicado para la secuencia de formatización (sensu Hocsman y Martínez 2003) de cada parte analizada. Este último concepto tiene en cuenta: a) las técnicas y procedimientos tecnológicos empleados en la manufactura, b) la posición de las mismas en la pieza, y c) su situación en la parte segmentada descripta.
8- CONSIDERACIONES ACERCA DE DOS GRUPOS TIPOLÓGICOS:
LOS CUCHILLOS DE FILO RETOCADO Y DE FILO NATURAL

María Teresa Civalero
CONICET/INAPL

El objetivo de esta presentación es discutir los problemas surgidos a partir de la definición de dos grupos tipológicos que Aschero considera en su trabajo "Ensayo para una clasificación morfológica de artefactos líticos" (1975): el grupo de los cuchillos de filo retocado y el grupo de los cuchillos de filo natural.
El término cuchillo es uno de los ítems más utilizados en mis análisis de los conjuntos líticos de el noroeste de la provincia de Santa Cruz. Este término también es utilizado por la mayoría de los investigadores argentinos definiendo un filo retocado marginalmente en forma unifacial, menos frecuentemente bifacial y con un ángulo agudo/rasante.
El grupo de los cuchillos de filo retocado de la tipología de Aschero es un instrumento que reúne las características arriba mencionadas pero con la condición que su bisel sea simétrico en donde los filos marginales bifaciales son los más típicos.
El otro grupo en cuestión, los cuchillos de filo natural, si bien agrupan a los instrumentos de filo natural (de arista regular), también lo hacen con instrumentos de bisel asimétrico y una serie técnica definida por retoque marginal o lascas con rastros complementarios.
Ambos grupos, si bien parecidos en la mayoría de sus características técnico-morfológicas, difieren en algunas que son fundamentales para la definición del grupo tipológico y lleva a confusión.
Mi propuesta es discutir este tema (que lleva a considerar otros items como serie técnica, filos naturales con rastros complementarios entre varios) y consensuar modificaciones -bien sea la unificación de los grupos, cambio de nombre - que nos resulten operativas para comparar instrumental lítico de nuestro país y del exterior.

9- NUEVO ATRIBUTO PARA EL GRUPO TIPOLÓGICO RASPADOR (M3.07)

Ana Gabriela Guráieb
Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano - UBA

Justificación:
El proceso de reactivación de filos de raspador, por lo general filos frontales, da como resultado -entre otros atributos- la presencia de puntas que se localizan en uno o ambos extremos de la cuerda del filo. Estas puntas, que pueden ser más o menos destacadas, son a menudo ingresadas complementariamente como otro grupo tipológico: punta burilante. Si bien pueden haber funcionado como tal en algunos casos, estas puntas son el subproducto de una actividad de mantenimiento concreta.
Por otra parte, la mayoría de las veces carecen de los rastros complementarios que deben presentar las puntas burilantes. Por otra parte, son un buen indicador de cuáles materias primas o variedades dentro de una materia prima son privilegiadas con un uso más intensivo.

Dado que:
" Las formas geométricas del filo que están tabuladas no comprenden claramente la morfología que generan estas puntas;
" que incluirlas como otro grupo tipológico complementario genera ruido la mayoría de las veces,

Propuesta
Se propone alguna modificación a convenir con los participantes en el anexo de 1983 que de cuenta de estas situaciones de uso de las piezas. Puede ser exclusivamente para este grupo tipológico o más general.

Nota:
Otros atributos a tomar en cuenta, -que tienen que ver con el enmangue de raspadores- son: abrasiones o pulidos en las aristas dorsales de la pieza, muescas o filos más cóncavos laterales con presencia de rastros complementarios intensos de distinto tipo, etc.

10- EL PROBLEMA DE LOS PRODUCTOS BIPOLARES

María Isabel González y Mariana Vigna
Sección Arqueología - ICA - Facultad de Filosofía y Letras - UBA

El problema que planteamos discutir es el de ubicar en la tipología los productos bipolares. En el caso de la propuesta tipológica y tecno-morfológica de Aschero (1975 y 1983), los bipolares no aparecen como grupo tipológico sino dentro de la serie técnica. Dentro de ella hay una categoría de talla bipolar o de talla bipolar y retoque marginal; también hay una categoría para la designación morfológica del núcleo. La dificultad de aplicar esta tipología reside en que en algunos casos no sabemos si los bipolares son núcleos o instrumentos. Esta dificultad ha sido sorteada en las investigaciones a través del empleo de distintas denominaciones: productos bipolares, lascas bipolares, fragmentos alargados angostos de sección triangular y masas centrales. En particular con respecto a los instrumentos, un planteo es si pueden ser considerados como instrumentos formatizados por retoque bipolar, es decir, formas-base bipolares formatizadas por retoque. Con respecto a los productos bipolares, las formas pueden ser variadas, generalmente son lascas planas de sección triangular y de forma cuadrangular, alargadas, laminares, columnares, angostas, anchas, cortas y delgadas.
En particular, se pretende plantear la discusión en base a las lascas del conjunto estudiado en la Depresión del río Salado que denominamos "microlitos potencialmente funcionales" (sensu Flenniken 1991), lascas que fueron reconocidas en la muestra inicial de LG1 (González de Bonaveri y Horovitz 1991) como una de las categorías de los productos bipolares. Para explicar su presencia se propuso como primera hipótesis que fueron artefactos compuestos y enmangados (ver además Flegenheimer et al. 1995). En este caso, la acepción microlito no se relaciona con la terminología usada para el Mesolítico europeo sino que es tomado en su sentido literal como "piedra pequeña", cuyas características son: lascas cortas y delgadas que al menos presentan un borde, no necesariamente el lateral, que es afilado. La evidencia actualmente disponible es que este tipo de artefactos enmangados fueron recuperados en las excavaciones del sitio Hoko River, en el estado de Washington, lo que condujo a Flenniken a establecer que la delgadez de las lascas tiene que ver con su necesidad de ser artefactos compuestos. Asimismo, las lascas cortas y delgadas que encontró sin enmangue, parecen corresponder al mismo tipo de empleo, lo que hace altamente probable su uso enmangado, al menos desde un punto de vista morfológico. Si bien, en la localidad La Guillerma se han reconocido en los sitios LG1 y en LG5 al menos 7 de estas lascas cortas y planas con filo, la presencia de estos productos bipolares plantea interesantes implicancias que deberán ser testeadas a través de estudios funcionales de base microscópica.
Por otro lado, interesa discutir sobre la presencia de instrumentos retocados sobre productos bipolares tanto sean masas centrales o lascas laminares.
11- GRUPOS TIPOLÓGICOS M3.09; M3.10; M3.11 Y M3.12

Ana Gabriela Guráieb
Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano - UBA

Justificación
Para Aschero (1975:48), un grupo tipológico (en esos años un tipo) no es producto de una generalización descriptiva sino más bien, de una especificación descriptiva. Lo define como "la síntesis de un determinado número de atributos morfológicos, relevantes desde el punto de vista técnico y funcional, que se repiten en dos o más piezas del conjunto". En su tipología hay grupos tipológicos definidos por características funcionales (raspador, perforador, cuchillo) con subgrupos definidos morfológicamente (lateral, frontal, en punta roma etc), y también hay otras categorías definidas por una sumatoria de características morfológicas y técnicas. Ejemplo: artefacto mediano pequeño, sección asimétrica con retoque en bisel abrupto u oblicuo. (el más conocido RBO - M3.11). También están definidas las láminas retocadas (M3.10), a las que seguramente ingresé erróneamente más de una vez por no saber si el retoque puede ser marginal o tienen que ser limaces; o las piezas laminares con retoques perimetrales (M3.12) y las raederas (M3.09), que comparten la serie técnica con los RBO pero no el módulo, y que pueden ser muy parecidas a los demás grupos tipológicos mencionados. Finalmente, se utilizan con mayor frecuencia raedera y RBO.

Propuesta
En aras de una mayor comparabilidad entre conjuntos, de un "aligeramiento" de la tipología que le permita seguir siendo eficiente, propongo que se revise la "especificidad descriptiva" que da origen a estos grupos tipológicos, que se elimine alguno si no es operativo, o que se fundan entre sí, si así se decide o bien que se mantengan sobre la base de una buena justificación.
Considero que esta tarea es importante porque todos sabemos que la herramienta clasificatoria que utilizamos condiciona nuestros resultados. Una clasificación muy desagregada aumenta, por ejemplo, los índices de riqueza y homogeneidad de nuestras muestras. ¿Pero ese aumento refleja una variabilidad real o está sesgada por la herramienta que utilizamos?.
12- EL GRUPO TIPOLÓGICO DE LOS BIFACES Y SUS SUBGRUPOS

Salomón Hocsman* y Carlos A. Aschero**
* Becario CONICET ** CONICET - Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

Estrictamente hablando, el concepto de biface implica cualquier instrumento trabajado en ambas caras. Aunque es cierto que esta noción tiene su fundamento en características técnicas -además de su carácter bifacial, los lascados cubriendo sus caras-, hay otras variables, de carácter morfológico-funcional, que son esenciales para su clasificación como tales, como, por ejemplo, la conformación del borde y de la arista:
Descripción: Instrumentos bifaciales con lascados profundos y extendidos o parcialmente extendidos; de filo normal con borde regular y/o irregular y arista sinuosa regular y/o irregular en normas frontal y lateral, respectivamente; filo perimetral; sección transversal biconvexa o plano-convexa; y secciones simétricas o asimétricas en norma sagital, lateral y frontal.
Cabe destacar que, si bien se ha asociado recurrentemente a los bifaces con piezas de tamaño considerable, son tomados aquí como un grupo de artefactos que presentan, independientemente del tamaño y peso, características morfológicas recurrentes.
A continuación se desarrollan las particularidades técnico-morfológicas y morfológico-funcionales que definen a los subgrupos que integran el grupo tipológico bifaces:
- El subgrupo tipológico de los bifaces en sentido estricto
Descripción: Piezas con lascados profundos y extendidos o parcialmente extendidos; filo perimetral; sección transversal biconvexa o plano-convexa.
- El subgrupo tipológico de los bifaces parciales
Descripción: Piezas con lascados marginales y parcialmente extendidos o marginales; filo perimetral, extendido o largo; sección transversal biconvexa o plano-convexa.
- El subgrupo tipológico de los núcleos bifaciales
Este subgrupo se inserta en el grupo tipológico de los núcleos de lascas, de acuerdo a los nuevos listados tipológicos.
Descripción: Piezas bifaciales con lascados profundos y extendidos o parcialmente extendidos; de filo normal con borde regular y/o irregular y arista sinuosa irregular; filo perimetral o extendido; sección transversal biconvexa, plano-convexa, triangular o romboidal; y sección simétrica o asimétrica en norma sagital, lateral y frontal.

13- EL GRUPO TIPOLÓGICO DE LOS FILOS BIFACIALES DE ARISTA SINUOSA

Salomón Hocsman* y Carlos A. Aschero**
* Becario CONICET ** CONICET - Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

La categoría de filo bifacial de arista sinuosa se aplica a aquellas piezas con filos simples o bien en artefactos compuestos que posean filos bifaciales, aún bifaces y bifaces parciales al ser segmentados en sus filos componentes, cuya extensión no involucre todo el perímetro y que no puedan ser adscriptos a ningún otro grupo tipológico de la propuesta de Aschero (1983).
Descripción: Filos bifaciales con lascados profundos y/o marginales y extendidos, parcialmente extendidos o marginales; de filo normal con borde regular y/o irregular y arista sinuosa regular y/o irregular; filo largo, corto o restringido; sección simétrica o asimétrica en norma lateral.
Se destaca que estos filos pueden presentarse tanto en artefactos con adelgazamiento bifacial o reducción bifacial como en artefactos bifaciales marginales.
Una parte de estos filos podría haber funcionado, por ejemplo, como dorsos, o bien en situaciones de enmangue.
14- EL PROBLEMA DE LOS GUIJARROS PARTIDOS EN CONTEXTOS ARQUEOLÓGICOS DE LA COSTA NORDPATAGÓNICA

Diego Daniel Aguirre
Museo Histórico Municipal de Patagones

Desde un trabajo desarrollado en el marco de la ecología evolutiva y con la aplicación de la tipología de Aschero (1975 y 1983), los guijarros partidos se presentaron como un ítem de gran recurrencia en los contextos arqueológicos identificados en los trabajos de campo, pero que, para la determinación de la variabilidad arqueológica presente en cada muestra, se presentan difusos para su clasificación, de acuerdo a la tipología utilizada.
Dicha dificultad reside en que, por un lado, por definición, son artefactos, en el sentido de que se tratan de litos modificados por uso (Aschero 1975 y 1983), pero es difícil definir a que grupo artefactual específico pertenecen. Además ¿Son un único grupo artefactual?.
No son ecofactos. Entonces, ¿son todos litos no diferenciados por uso, litos manufacturados por lascados o núcleos?. ¿Cuál debe ser su más adecuada consideración tipológica?.
Dentro de la categoría de litos no diferenciados por uso, estaríamos asumiendo que no diferenciamos la forma ni la función como nódulos de prueba de la materia prima lítica.
Podrían agruparse en la categoría litos manufacturados por lascados, más allá de que el lascado haya sido uno solo para partir a dichos guijarros, pero también podrían ser pensados como núcleos (con lascados aislados), particularmente en los casos que presentan algún negativo extra en alguna parte de la corteza de alguno de esos hemiguijarros.
Si este último planteo fuese el correcto y definitivo, sensibiliza los dígitos obtenibles de la riqueza artefactual, en tanto medida de la diversidad arqueológica, y, por extensión, los análisis resultantes de la variabilidad arqueológica de una muestra en que dichos ítems se presentan, puesto que, lo que a simple vista parece ser una misma categoría, de acuerdo a su forma y probable función, entonces, pasaría a considerarse como dos categorías diferenciadas: litos modificados por lascados (aquellos hemiguijarros que, presentando atributos de percusión en su cara ventral, no presentan ningún negativo extra en la corteza y que podrían pensarse con una función exclusiva de prueba de la materia prima) y núcleos (con lascados aislados), puesto que presentan los atributos de percusión en la cara ventral de ese hemiguijarro y por lo menos otro negativo de lascado extra en su corteza, en este último caso con la función posterior de servir como nódulo para la extracción de una lasca.

15- LOS GRUPOS TIPOLÓGICOS DE LAS GUBIAS Y LOS ESCOPLOS

Carlos A. Aschero
CONICET - Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

En conjuntos líticos de Patagonia centro-meridional y de la Puna sur argentina se ha observado la presencia de piezas que presentan como características:

" Un filo corto o restringido, frontal (transversal al eje longitudinal).
" Una marcada concavidad en la delineación de la arista, vista en norma sagital.
" Una delineación recta del filo (forma secundaria del filo activo), vista en norma frontal.
" Bisel doble o simple simétrico.
" Microastilladuras y/o microlascados continuos, discontinuos y/o alternos sobre ambas caras.
" Tamaños medianos a grandes. Módulos medianos.

A estas piezas les llamamos gubias por la estrecha similitud morfológica con las gubias usadas por ebanistas y xilógrafos actuales.

Otras piezas muy semejantes a los que denominamos raspadores pero con filos cortos o restringidos, rectos (forma secundaria, en norma frontal) o rectos convergentes axiales -siempre en posición frontal y con una delineación rectilínea de la arista activa- son las que ahora denominamos escoplos. Las características generales del grupo son las siguientes:

" Un filo corto o restringido, frontal (transversal al eje longitudinal).
" Una delineación rectilínea de la arista, vista en norma sagital.
" Una delineación recta o recta convergente (convergencia axial) del filo activo, visto en norma frontal.
" Bisel simple asimétrico.
" Microastilladuras y/o microlascados continuos, discontinuos y/o alternos, predominantes en la cara biselada.
" Tamaños medianos pequeños a grandes. Módulos medianos o laminares.

El orden en la lista tipológica de las gubias es no.19 y el de los escoplos no.31.
16- PALAS Y/O AZADAS LÍTICAS MANUFACTURADAS POR LASCADO
NUEVO GRUPO TIPOLÓGICO (M3.33.00)

Susana Pérez
INAPL y Proyecto Arqueológico Antofagasta de la Sierra

Al realizar el análisis técnico-morfológico de las palas y/o azadas líticas correspondientes a la evidencia arqueológica recuperada del sitio Casa Chávez Montículos (Montículos 1 y 4) de Antofagasta de la Sierra (Pcia. de Catamarca), encaré los análisis siguiendo los lineamientos propuestos por Aschero (1975, revisiones 1983 y 1987). Dichos lineamientos fueron adecuados, según el caso, de acuerdo con las características particulares del material en estudio. Para el registro de las características observadas confeccioné una ficha la cual se basó en la ficha propuesta por Aschero.
De acuerdo con las características técnicas generales, se trata de instrumentos formatizados por lascados de retalla y retoque bifacial marginal, manufacturados por percusión directa.
Al iniciar el análisis correspondiente, encontré que las palas y/o azadas líticas manufacturadas por lascado no estaban incluidas en los grupos tipológicos contemplados por Aschero, ya que el código M4.10.00 se refiere a azadas-palas manufacturadas por picado, abrasión, pulido. Por lo tanto, procedí a incorporar un nuevo grupo tipológico (M3.33.00) y los subgrupos tipológicos que respondieran a las necesidades del estudio de este tipo de instrumentos.
Cabe consignar que lo propuesto para debatir en este Taller fue incluido en mi tesis de licenciatura la cual trató sobre "Experimentación y análisis de microdesgaste de palas y/o azadas líticas de Antofagasta de la Sierra (Pcia. de Catamarca)", FFYL, UBA.
17- PALAS Y/O AZADAS LÍTICAS MANUFACTURADAS POR LASCADO.
AGREGADO/MODIFICACIÓN DE VARIABLES EN LAS DESCRIPCIONES

Susana Pérez
INAPL y Proyecto Arqueológico Antofagasta de la Sierra

Al realizar el análisis técnico-morfológico de las palas y/o azadas líticas correspondientes a la evidencia arqueológica recuperada del sitio Casa Chávez Montículos (Montículos 1 y 4) de Antofagasta de la Sierra (Pcia. de Catamarca), encaré los análisis siguiendo los lineamientos propuestos por Aschero (1975, revisiones 1983 y 1987). Dichos lineamientos fueron adecuados, según el caso, de acuerdo con las características particulares del material en estudio. Para el registro de las características observadas confeccioné una ficha la cual se basa en la ficha propuesta por Aschero.
Al encarar los análisis correspondientes, en lo que se refiere a la inclusión de las variables o estados de atributos de los artefactos de referencia, realicé agregados y modificaciones de algunas categorías implicadas en variables específicas, ya que este tipo de instrumental y la materia prima en la cual fueron manufacturados, basalto variedad X (ó Vc 8 según propuesta de nueva denominación de Aschero et al. 2001, Arqueología 12, en prensa), poseen ciertas características que los hacen muy particulares. De otro modo, se estaría forzando su inclusión en los ítems considerados por Aschero.
Los agregados y modificaciones de las variables o estados de atributos para las descripciones se refieren, por ejemplo a: alteraciones en la superficie de la roca, descripción de las fracturas principales, específicamente a las descripciones referidas a: sección transversal, forma geométrica y forma de la superficie.
Cabe consignar que lo propuesto para debatir en este Taller fue incluido en mi tesis de licenciatura la cual trató sobre "Experimentación y análisis de microdesgaste de palas y/o azadas líticas de Antofagasta de la Sierra (Pcia. de Catamarca)", FFYL, UBA.
18- EL SUBGRUPO TIPOLÓGICO DE LOS ESBOZOS DE PIEZAS BIFACIALES

Carlos A. Aschero* y Salomón Hocsman**
* CONICET ** Becario CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

Dentro del grupo tipológico de los artefactos de formatización sumaria se encuentra el subgrupo de los esbozos de piezas bifaciales. En esta presentación se describen sus atributos:
Descripción: Piezas bifaciales con lascados profundos y/o marginales y extendidos y/o parcialmente extendidos; de filo normal con borde irregular y arista sinuosa irregular; de filos extendidos; sección transversal irregular y secciones asimétricas en norma sagital, lateral y frontal.
Observaciones: este subgrupo tipológico se caracteriza por presentar lascados aislados y/o grupos de lascados aislados en ambas caras, por lo que se observan importantes porciones de la forma-base, ya sean facetas naturales con corteza o bien las caras ventral y/o dorsal de lascas. Se define, asimismo, por un contorno irregular.

19- EL GRUPO TIPOLOGICO PUNTAS DE PROYECTIL: PROPUESTA
PARA EVITAR SU FUNCION AD HOC

Norma Ratto
Museo Etnográfico Juan B. Ambrosetti (FFyL-UBA)

El rótulo tipológico de ?puntas de proyectil' está profundamente acuñado en la comunidad arqueológica, y en especial en la Argentina. Esta es una característica tanto de tipologías tecno-morfológicas como tecno-morfo-funcionales. Con ello se le está asignando al instrumento: (a) una función ad hoc; (b) una misma categoría de propulsado o no propulsados, y (c) que fue sometido a esfuerzos de carga o impacto realizando una trayectoria de vuelo antes de su penetración al blanco. Esto es producto de no evaluar la importancia de diferenciar entre sistemas técnicos con o sin almacenamiento de energía, arrojadizo o empuñado en mano; en donde estos instrumentos tan sólo son un componente del sistema integral.
En trabajos previos se optó por denominarlas con el nombre genérico de cabezales líticos. Esto no obedeció a un simple cambio terminológico. Por el contrario, tuvo como finalidad evitar una asignación funcional ad hoc, encarando el desafío de desarrollar un modelo arqueológico para tal fin. Recientemente y adoptando un criterio similar al nuestro, W. Andrefsky Jr. prefiere denominarlas bajo el rótulo general de ?bifaces enmangados', dado que el término hace referencia a su forma y no necesariamente implica una función.
La asignación genérica de cabezal lítico, biface enmangado o punta lítica permite crear una categoría sin carga funcional previa que puede ser subdividido con posterioridad a la realización de un análisis funcional en: (a) punta de proyectil, y (b) punta de mano. Tal diferenciación no es una exquisitez tipológica, ya que le brinda al arqueólogo una información fundamental sobre aspectos tales como:
a) el alcance y eficacia de tiro con relación a las presas,
b) la distancia cazador presa en el momento de la cacería,
c) la etología, tamaño y edad de las presas,
d) el uso de los espacios -topografía- más apropiados para alcanzar el potencial del sistema técnico utilizado,
e) formación de sitios con relación a las características anatómica de la presa, y
f) el momento del ciclo anual más propicio para la realización de la cacería, entre otros aspectos.
Dentro del contexto explicitado presentaremos nuestra experiencia en el análisis de los cabezales líticos recuperados en la región puneña de Chaschuil (Depto. Tinogasta, Catamarca).

20- MODIFICACIONES EN EL GRUPO TIPOLÓGICO M3.24.00 PUNTAS DE PROYECTIL

Jorge G. Martínez
Becario CONICET - Instituto de Arqueología y Museo. FCN e IML. UNT

Se proponen aquí algunas modificaciones y agregados al Grupo Tipológico M3.24.00 Puntas de Proyectil (Aschero 1983) y sus códigos de inventario. Los cambios propuestos tienden a hacer que este grupo sea más abarcativo en cuanto a la inclusión de un mayor número de casos particulares de puntas de proyectil. Paralelamente, esta propuesta otorgaría una mayor especificidad a nivel de subgrupo en la adscripción de piezas completas y fragmentos, lo cual mejora la evaluación integral de un conjunto dado.
En este sentido, se plantea la alternativa de que en algunos casos pueden admitirse combinaciones a nivel de subgrupo, tendientes a conferir mayor precisión en la descripción e interpretación de ciertos casos, principalmente ante la presencia de fracturas.
21- SOBRE LAS LONGITUDES RELATIVAS EN LIMBOS DE PUNTAS DE PROYECTIL

Carlos A. Aschero
CONICET - Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

Las diferencias entre las distintas relaciones longitud/ancho del limbo, en contornos triangulares, cordiformes, lanceolados u otros, definibles mediante analogías con figuras geométricas, pueden tabularse en:
- Formas cortas: cuando la longitud es igual o menor que el ancho máximo del limbo.
- Formas medianas: cuando la longitud es mayor que el ancho máximo del limbo, hasta dos veces ese valor.
- Formas largas: cuando la longitud es mayor que el doble del valor del ancho máximo.

En el caso de limbos con espolones o aletas expandidas muy prominentes, el valor del ancho máximo se tomara en la cuerda de la base del limbo o en la raíz del pedúnculo -para las formas triangulares apedunculadas o pedunculadas, respectivamente- o en el ancho máximo medido sin contar la longitud del espolón -para las formas lanceoladas, cordiformes u otras-.

22- FORMA DE LA BASE EN PUNTAS DE PROYECTIL APEDUNCULADAS ESCOTADAS

Patricia S. Escola
CONICET - UNCA

Las puntas de proyectil triangulares apedunculadas escotadas constituyen instrumentos de recurrente aparición en contextos del Noroeste argentino con posterioridad a ca. 1750 AP. Una de sus características morfo-tipológicas relevantes es la presencia de una base concavilínea profunda a la que hace referencia la denominación tradicional de "escotadas". Cabe destacar en estos proyectiles que la profundidad de esta concavidad, dada por la longitud de las aletas y el ángulo de amplitud de la base, adquiere valores de entre 3 y 8 mm comprendiendo así cerca de un tercio y más de la longitud total de la pieza.
Ahora bien, teniendo estas características en mente si se analizan los estados de atributos correspondientes a "Forma de la base del limbo o pedúnculo en puntas de proyectil u otras piezas de bases formatizadas" (Aschero 1983) ninguno de ellos las refleja específicamente ni siquiera la forma "concavilínea simple". Sin embargo, en el "Ensayo..." de 1975, en "Caracteres morfológicos referentes al limbo" (Forma de la Base) está contemplada la forma cóncava profunda o "escotada". En este sentido, esta ponencia tiene por objetivo sugerir la reincorporación del estado de atributo "concavilínea profunda" a los fines de atender a casos como el de las puntas de proyectil apedunculadas escotadas u otros casos similares.
23- FORMAS DE LA BASE: UNA VARIANTE MÁS

Jorge G. Martínez y Salomón Hocsman
Becarios CONICET - Instituto de Arqueología y Museo. FCN e IML. UNT

Dentro de la Descripción Sumaria de artefactos (Aschero 1983), y en cuanto a la "Forma de la base del limbo o pedúnculo en puntas de proyectil u otras piezas de base formatizada", se propone hacer un agregado en cuanto a las formas ya establecidas. Se trata de la forma "Escotada en V".
Esta nueva variable basal, podría agregarse dentro de las formas del grupo C, correspondientes en general a las Concavilíneas.

24- PROPUESTA DE INCLUSIÓN DE ATRIBUTOS PARA EL CASO
DE LAS PUNTAS DE PROYECTIL

Nora Viviana Franco* y Mariana Carballido**
* CONICET - Universidad de Buenos Aires / ** CONICET - INAPL

La clasificación de Aschero tiene en cuenta una serie de atributos para el caso de las puntas de proyectil. Proponemos aquí evaluar la inclusión de algunas medidas que, a nuestro entender, permitirían evaluar semejanzas y diferencias en la forma de enmangue, y la existencia de reactivado y/o reciclado. Específicamente, nos referimos a:
# espesor del cuello o raíz: cabe aclarar que no nos queda del todo claro si esta medida está contemplada en la tipología de Aschero (ver "Descripción de puntas de proyectil", p. 29, fig. 8)
# extensión del espesor del cuello o raíz sobre el limbo de la pieza. Este atributo puede dar cuenta de diferencias en la forma de enmangue de los ejemplares.
# ángulo de ambos bordes del limbo de la punta de proyectil. Esta medida está destinada a evaluar la posibilidad de que las puntas de proyectil sean utilizadas como otro tipo de instrumento (como por ejemplo, cuchillos).

25- ARTEFACTOS NO-COMPUESTOS, COMPUESTOS Y RELACIONES DE COMPLEMENTARIEDAD ENTRE GRUPOS TIPOLÓGICOS

Carlos A. Aschero
CONICET - Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

Cuando dos o más grupos tipológicos distintos están representados en una misma pieza, a uno de ellos lo llamábamos básico y al (a los) otro (s) complementario(s). Se propone que la designación de filos "basicos" sea dejada de lado para evitar que se pudiera entender un "peso" distinto de ciertos diseños de filos o puntas frente a otros presentes en una misma pieza. Sin embargo, la distinción entre artefactos con filos complementarios, esto es "compuestos" y no-compuestos (con filos o puntas de un único grupo tipológico) debe ser mantenida para: (a) dar cuenta del plus de trabajo presente en los compuestos; (b) facilitar los conteos del total de filos y puntas; (c) visualizar la proporción de filos y/o puntas de un mismo y/o de distintos grupos tipológicos por pieza, en cada conjunto, y (d) establecer relaciones de complementariedad entre esos distintos diseños, en la repetición de una misma asociación en distintas piezas.
Retendremos entonces el uso del concepto "filo, punta o plataforma complementaria" para designar los casos en que hay más de un grupo tipológico representado en los filos, puntas o plataformas de una misma pieza. En la descripción de la pieza son "complementarios" aquellos que corresponden al segundo y subsecuentes registros de una descripción tipológica completa de la pieza. Estos pueden representarse en la estructura tipológica de la muestra de la manera siguiente:

Filo, punta o plataforma del grupo tipológico X y subgrupo X1 [según orden de la
1er. registro
lista tipológica] + Filo, punta...complementario del grupo tipológico XX y
2do.registro
subgrupo XX1 [idem] + Filo, punta... complementario [idem]…
3er.registro

Ejemplo 1: Raspador de filo corto frontal + Cuchillo de filo retocado lateral + Punta burilante angular.
Ejemplo 2: Raspador de filo restringido angular y corto frontal + Raedera lateral doble + Punta burilante angular.
Ejemplo 3: Cuchillo de filo retocado lateral.

A partir del segundo filo, punta o plataforma de percusión ingresada se contará a este y a los subsiguientes como complementarios. Su ingreso sigue simplemente el orden establecido en la Lista de grupos y subgrupos tipológicos. En el ejemplo 1 Raspador tiene el numero de orden 7, Cuchillo de filo retocado el 13 y Punta burilante el 21. Veamos un conteo general sobre estos tres ejemplos:

Filos o Puntas del primer grupo ingresado (N= total de filos o puntas) Filos o Puntas complementarios por grupo tipológico (N= total de filos o puntas)
Artefactos no-compuestos (N=1) Cuchillo filo retocado (N=1) -----------
Artefactos compuestos (N=2) Raspador (N=3)
Raedera (N=2)
Cuchillo filo retocado (N=1)
Punta burilante (N=2)

El número total de filos y puntas complementarios [NFPC] mas el número total de filos y puntas de los artefactos del 1er.registro, compuestos y no-compuestos - incluyendo ambos casos los filos dobles o múltiples de un mismo grupo tipológico -, conforman el total de filos y puntas formatizados [TFPF]. Este total excluye al grupo de los artefactos con filos o puntas naturales con rastros complementarios e incluye al de los cuchillos de filo natural con dorso formatizado (filo + dorso, como valor "1").
Otra medida es la que puede expresarse como Porcentaje de artefactos con filos o puntas complementarias [Ifpc] utilizando el valor N del primero, multiplicado por 100 y dividido por el total de artefactos formatizados de la muestra. Es decir:

NFPC x 100 / TAF = I fpc (%).

Otra medida es la proporción de filos/puntas por artefactos no compuestos que indica cuantos filos/puntas formatizados hay por artefacto no compuesto, expresada como una razón 1: X. En nuestro ejemplo: 1: 1. Asimismo, se expresa la proporción de filos/puntas por artefactos compuestos que en nuestro anterior ejemplo resulta de sumar el total de las N del primer y segundo (o ss.) registro(s) dividido por el N de artefactos compuestos. Esto es: 8/2 = 1: 4.

Una relación de complementariedad se establece entre filos y/o puntas de distintos grupos tipológicos, de una misma pieza, cuando hay una recurrencia en la presencia de esos mismos filos o puntas entre dos o mas piezas de un mismo conjunto lítico.
26- AMPLIACIÓN DE LA CATEGORÍA "GRUPO DE LOS INSTRUMENTOS COMPUESTOS"

Salomón Hocsman
Becario CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

De acuerdo a Aschero (1975), los instrumentos compuestos comprenden "... dos o más especimenes morfológicos pertenecientes a grupos diferentes, en una misma unidad...".
Se destaca que esta noción, de acuerdo a lo observado por este autor en sitios de la Patagonia Meridional, refería básicamente a la combinación de grupos tipológicos de artefactos formatizados tallados. Ahora bien, del análisis de instrumentos recuperados en sitios adscribibles a ocupaciones de cazadores-recolectores-pescadores de la margen entrerriana del Paraná, surge la necesidad de ampliar los alcances de esta categoría.
En efecto, los artefactos formatizados no sólo refieren a filos y/o puntas tallados, sino también a superficies activas, registrándose casos de combinación de filos y superficies activas (por ejemplo, surcos o acanaladuras producto de abrasión), y de superficies activas exclusivamente, sin mediar evidencias de superposición que indiquen reciclaje, es decir, habrían funcionado simultáneamente.
Como punto colateral se propone poner a discusión si un instrumento con dos o tres filos adscribibles a subgrupos tipológicos diferentes de un grupo tipológico dado es un artefacto doble, triple o bien un instrumento compuesto.

27- EL MANTENIMIENTO Y EL RECICLAJE DE ARTEFACTOS LÍTICOS

Julio César Avalos
Proyecto Arqueológico Altiplano Sur (Instituto Interdisciplinario Tilcara)

Identificar a la tecnología lítica como una tecnología que se basa en la reducción, tiene varias implicancias en las unidades que se crean para investigar tanto la tecnología como la variabilidad morfológica que se origina. Aunque la variabilidad artefactual puede ser continua en naturaleza, los arqueólogos buscan explicar las causas que subyacen a esa variabilidad.
Entre los factores que generan variaciones en los artefactos de piedra, el mantenimiento y el reciclaje posiblemente sean los que han recibido mayor atención en los últimos años. Una línea de evidencia proviene del reconocimiento que las formas de los artefactos de piedra son inestables una vez que han sido confeccionadas. De esta manera, la morfología final que representa un artefacto depende del momento en que fue descartado definitivamente dentro del proceso de reducción y no necesariamente los productos finales deseados por los talladores y/o usuarios de instrumentos.
Mientras que el mantenimiento o reparo no implica cambios en la función de los artefactos, sino restaurarlo a una condición operable, el reciclaje puede modificar parcial o totalmente el artefacto para adecuarlo a una nueva actividad. Cualquiera de éstas actividades aplicada a los artefactos líticos supone una modificación secundaria de los bordes, de modo que el retoque sirve como el indicador primario de estos fenómenos. La aplicación de retoques en estas actividades tiene varias consecuencias en los artefactos: modifica la forma de los filos, su sección y la forma de los lascados, disminuye el tamaño o volumen de los artefactos e incrementan los ángulos de los filos.
A partir del análisis de los materiales líticos del sitio Jatún Ciénego (Sud Lípez, Dto. Potosí Bolivia); (un sitio con evidencias de ocupación recurrente a lo largo del tiempo), se evalúa el modo en que los artefactos han sido retocados continuamente y en reiteradas ocasiones incorporando y modificando las relaciones de atributos morfológicos y/o métricos de los artefactos. Si bien la "Tipología de Aschero" proporciona algunos atributos que permiten reconocer estas actividades en los artefactos líticos, principalmente la presencia de negativos frescos sobre superficies con pátina o el reconocimiento de lascas de reactivación, nuestro trabajo pretende aislar o relacionar algunos atributos de la tipología o incluso incorporar otros que nos permitieran identificar artefactos que han sido modificados por el mantenimiento y/o el reciclaje.

28- PROPUESTA PARA LA INCLUSIÓN DE ATRIBUTOS DESTINADOS A EVALUAR LA VIDA ÚTIL DE RASPADORES, RAEDERAS Y CUCHILLOS

Nora Viviana Franco
CONICET - Universidad de Buenos Aires

Distintos autores han abordado los cambios en la morfología de los instrumentos a lo largo de su vida útil. La clasificación de Aschero contiene atributos que pueden ser utilizados para evaluar la misma, como por ejemplo, la diferencia entre el ángulo medido y el inicial de los filos. Sin embargo, considero útil emplear tantas líneas de evidencia como sea posible. Por este motivo, propongo aquí la inclusión de los siguientes atributos:
# cantidad de series de lascados presentes en el filo retocado: 1, 2 ó más series de lascados. En la tipología de Aschero, esta variable está contemplada de manera implícita en la "forma y dirección de los lascados de formatización" (Nº 39).
# presencia/ausencia de reactivación: infiero ésta a partir de la existencia de más de una serie de lascados. Considero que hay reactivación cuando se observan al menos dos series de lascados, y cuando la segunda serie de lascados eliminó parte del filo formatizado por la primera serie. Es difícil de aplicar, ya que la reactivación puede no dejar huellas del filo previo y ser difícil de distinguir arqueológicamente. Se trata, por lo tanto, de valores mínimos.
# inclinación del eje morfológico con respecto al de lascado: propongo relevar su existencia, con el objetivo de evaluar si existen variaciones que puedan atribuirse a reactivación (cf. Dibble 1987).
En el caso particular de los raspadores y teniendo en cuenta la forma en que en general se utilizan, enmangan y reactivan, propongo agregar en todos los casos, a las medidas por eje técnico, las medidas por el eje morfológico, ya que entiendo éstas dan mejor cuenta de posibles reactivaciones en los mismos (cf. Franco 1994).

29- "SECUENCIA DE FORMATIZACIÓN" EN ARTEFACTOS FORMATIZADOS:
DEFINICIÓN Y APLICACIONES

Salomón Hocsman y Jorge G. Martínez
Becarios CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

Se propone la inclusión de una nueva variable para el análisis de artefactos formatizados tallados, denominada "secuencia de formatización", que se basa en el análisis del o los filos o puntas que componen un instrumento dado, por borde y por cara.
Su utilización permite un análisis detallado de la formatización de un instrumento, al dividirlo en sus partes componentes, pudiéndose registrar, por ejemplo, gestos técnicos del o los artesanos.
Específicamente, esta variable resulta de la consideración de la anchura de los lascados sobre el borde más la profundidad de los lascados desde el borde (Aschero 1975, 1983), por cada borde y cara formatizados.
De esta forma, en el caso del limbo de una punta de proyectil, por ejemplo, deberían describirse 4 subsecuencias, correspondientes a dos caras y dos bordes, para posteriormente conjugar dichas subsecuencias en la secuencia de formatización general.
En el caso de filos o puntas reciclados, se definen, por un lado, los eventos de formatización directamente relacionados con la confección del nuevo filo o punta, es decir, sin sumar la formatización del filo o punta reciclado y, por el otro lado, los de este último. Igual consideración se realiza para los bifaces.

30- ARTEFACTOS BIFACIALES: ERRORES DE MANUFACTURA

Lizzie Pintar
Profesora Asociada. Austin Community College. Austin, Texas, EEUU

Esta ponencia se dirige a destacar la importancia de variables no consideradas en la Tipología de Aschero (1983) que reflejarían las intenciones y decisiones del tallador durante la tarea de manufactura. La trayectoria que ha seguido cada artefacto bifacial es diferente según el tipo de materia prima disponible, el tamaño del soporte, y las diferentes estrategias de abastecimiento utilizadas; sin embargo, durante el proceso de reducción, adelgazamiento y retoque, los procedimientos técnicos utilizados han creado problemas de varios tipos que han resultado en errores de manufactura, los cuales habrían obligado al tallador a superar el problema, ó a cesar su trabajo y desechar el artefacto.
Se proponen incluir en la Tipología variables que surgen de:
1- Gestos técnicos (sea por el tipo de percutor usado, el ángulo de percusión, la distancia del punto de percusión con respecto al borde del artefacto, o la forma de sostener el artefacto durante la percusión) que han causado:
" la extracción de lascas con terminaciones en charnela, "step" o sobrepasadas evidentes en los negativos de lascados visibles en las dos caras del artefacto. Se podría agregar una cuarta posición en "Serie Técnica" donde se considera la terminación de los negativos de lascados: normal, charnela, "step", sobrepasado;
" nudos o domos que resultan de acumulaciones de negativos de lascados con terminaciones en "step" en una o ambas caras del biface. Se podría agregar en "Forma y dirección de los lascados de formatización";
" un golpe de lascado que "mordió" parte del borde. Este se podría agregar al ítem anterior.
2- Características inherentes a la materia prima misma, por ejemplo, fracturas o domos que resultan de inclusiones de fenocristales muy grandes (más grandes que los comúnmente presentes en ese tipo de materia prima).
Dada la ubicuidad de artefactos bifaciales en sitios arqueológicos y el hecho que los bifaces tienen la potencialidad de transformarse en algo más, es imperativo que consideremos las variables subrayadas anteriormente. Esto nos permitiría abordar el análisis lítico desde el punto de vista de procedimientos que fueron tanto efectivos (aquellas puntas de proyectil acabadas) como infectivos (aquellos bifaces ya sea enteros o fracturados que fueron descartados -- siendo estos últimos la gran mayoría de los casos). De los errores se aprende (tanto ellos como nosotros).

31- FRACTURAS IRREGULARES: OTRAS CAUSAS

Jorge G. Martínez
Becario CONICET - Instituto de Arqueología y Museo. FCN e IML. UNT

En cuanto a la Descripción de Fracturas Principales (Aschero 1983), específicamente en el ítem "Posición de la fractura en relación al eje de orientación de la pieza", se proponen aquí algunas modificaciones en las variables 6A, 6B y 6C referidas a fracturas irregulares. En estos casos sólo entran en consideración aquellas fracturas generadas por acción térmica, por lo cual se propone agregar una variante a cada una de ellas en donde la irregularidad de la fractura tenga otra génesis. Igual consideración se extiende a la variable 7 del ítem "Forma geométrica de la fractura".

32- PROPUESTA DE MODIFICACIÓN DE LA CUADRÍCULA DE LOCALIZACIÓN

Salomón Hocsman
Becario CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

De acuerdo a Aschero (1983), la cuadrícula de localización se utiliza para determinar la posición de la parte descripta del artefacto formatizado -cada una de las partes segmentadas- en relación a la cara y sector del borde que ocupa. Así, por medio de una serie de designaciones codificadas se indica la localización en cuadrícula de la parte descripta.
En esta presentación se propone modificar las designaciones de los sectores frontales distal y proximal, ante la existencia en conjuntos líticos analizados de la Puna argentina de artefactos con filos frontales transversales u oblicuos que por su longitud y características requieren una mayor precisión en la ubicación de la formatización, considerando inclusive las porciones U, V y W.
Así, el sector frontal distal, denominado 7, se divide en dos sectores iguales: 7, o sector frontal distal izquierdo, y 9, o sector frontal distal derecho. Por su parte, el sector frontal proximal, señalado como 8, se discrimina en dos sectores iguales: 8, o sector frontal proximal izquierdo, y 0, o sector frontal proximal derecho. Cada uno de los sectores así conformados puede ser dividido, a su vez, en las porciones U, V y W.
En casos de convergencia, la notación para el sector frontal distal se propone como (79), mientras que para el sector frontal proximal sería (80).

33- ORIENTACIÓN, SEGMENTACIÓN E ILUSTRACIÓN DE ARTEFACTOS DE MOLIENDA

María del Pilar Babot
Becaria CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

La orientación, segmentación e ilustración constituyen tres pasos previos a la descripción de los artefactos. La tipología de Aschero (1975) provee de una normativa en ese sentido para las piezas de piedra tallada, pero no contempla el caso de los instrumentos de molienda. A este fin, se propone el empleo de una orientación convencional para la descripción estandarizada de los mismos. Ésta se efectúa por referencia al eje morfológico, de alargamiento de una forma, o mayor de la pieza. El mismo corresponde al eje de simetría longitudinal cuando ésta existe (Lamming-Emperaire 1967). Adicionalmente, y con ciertas excepciones, se consideran para la orientación los extremos más cercano y lejano a las manos o el cuerpo del operador.
La ilustración de los artefactos de molienda tiene en cuenta los criterios de orientación y se refiere a la vez, a la superficie activa de los mismos. De este modo, todas las piezas se dibujan en norma frontal -exhibiendo alguna de sus caras-. Al diseño principal pueden ser añadidas la sección longitudinal y la sección transversal. Pueden incorporarse, asimismo, vistas externas de la pieza, en norma lateral o norma sagital.
La segmentación de los artefactos se efectúa sobre la base de la identificación de caras, bordes, oquedades y rasgos morfológicos complementarios, independientemente de que presenten o no manufactura. Esto difiere de lo dispuesto para los artefactos líticos tallados, para los que se sigue la propuesta de Brézillon (1973) de dos caras principales.
Según su funcionalidad o papel en la pieza, las partes segmentadas se califican como: activas, de prensión, de apoyo o neutras. En la descripción posterior, las mismas se indican mediante las variables de posición.
34- DESIGNACIÓN E IDENTIFICACIÓN DE MODOS DE ACCIÓN
EN ARTEFACTOS DE MOLIENDA

María del Pilar Babot
Becaria CONICET. Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

Los modos de acción refieren a los movimientos posibles del instrumento durante el uso, mediante los cuales se lleva a cabo una función primaria dada con el fin de obtener el efecto buscado. Dichos movimientos pueden inferirse a partir de los patrones de rastros de uso generados durante la manipulación de los artefactos, y de la evaluación de ciertos aspectos morfológicos seleccionados por los productores para el desarrollo aceptable de la tarea -el procesamiento de sustancias intermedias, en este caso-. Los aspectos morfológicos antes mencionados, son las características morfológico-funcionales y técnico-morfológicas diagnósticas, las cuales tienen que ver directamente con las posibilidades funcionales de los artefactos, ya sean éstas atributos naturales o el producto de la manufactura.
Los modos de acción deben ser diferenciados de las técnicas de manufactura utilizadas en el proceso de producción de los artefactos. Los mismos se indican en nuestra propuesta, para cada superficie activa, a partir de los valores asignados a las siguientes variables en una instancia analítica anterior: a) posición de la cara, b) forma de la cara -contorno-, c) sección de la oquedad -sección perpendicular a la profundidad de la oquedad, y d) rastros de uso y situación en la parte de la pieza.
Pueden diferenciarse los siguientes modos de acción posibles en artefactos de molienda:
1) Movimiento de presión.
1.1) vertical o puntual: 1.1.a) hacia abajo, 1.1.b) en vaivén, 1.1.c) por rotación, 1.1.d) semirotativa o alternativa semirotativa
1.2.) deslizante o con desplazamiento: 1.2.a) por traslación circular, 1.2.b) alternativa -curvilínea semicircular o rectilínea-
2) Movimiento de percusión
3) Movimiento aleatorio
En todos los casos mencionados, la forma de contacto entre el utensilio y las sustancias en procesamiento es una superficie.

35- PROPUESTA DE CLASIFICACIÓN GEOARQUEOLÓGICA DE FUENTES DE
MATERIAS PRIMAS LÍTICAS

Salomón Hocsman * y Sergio M. Georgieff **
* Becario CONICET - Instituto de Arqueología y Museo. FCN e IML, UNT
** CONICET - Instituto de Estratigrafía y Sedimentología Global ( IESGLO). FCN e IML, UNT

La clasificación de las fuentes de materias primas líticas es una herramienta que aporta información acerca de la forma en que los grupos humanos del pasado realizaban el aprovisionamiento de materiales para la confección de artefactos líticos. Una propuesta de este tipo implica una estrecha interrelación entre conocimientos de las características físicas de los materiales (mineralógicos, petrográficos y morfométricos) y los estudios arqueológicos sobre la forma en que era aprovechado cada tipo de material. De esta manera, se hace necesario un estudio interdisciplinario al momento de unificar las nomenclaturas utilizadas en Arqueología y en las Ciencias de la Tierra para denominar a las fuentes de aprovisionamiento y los diferentes materiales que se obtienen de ellas.
Por esto, la propuesta desarrollada tiende a seguir una línea en la que la base esté constituida por nomenclatura geológica que permita incorporar los conceptos y atributos derivados de la práctica arqueológica, sin que esto modifique el significado básico de los términos para las Ciencias de la Tierra.
De esta forma, a partir de la diferenciación de Nami (1992) en fuentes primarias y secundarias, se clasifica a las canteras y fuentes potenciales de acuerdo a su disposición en el terreno. Luego, se tiene en cuenta si el material ha sido transportado o no, y se las clasifica, por último, de acuerdo con sus características morfométricas.

36- TIPOLOGIA Y TECNOLOGIA LITICA EN EL NORDESTE ARGENTINO

Jorge Amilcar Rodríguez
Conicet y Gabinete de Investigaciones Antropológicas de Corrientes

En esta ponencia se abordará básicamente la Tipología Lítica que estamos aplicando para la clasificación de los artefactos líticos tallados. También se analizarán algunos aspectos de la tecnología lítica tallada de las distintas entidades culturales del Nordeste argentino.
En la cuenca del río Uruguay Medio (el río y sus afluentes) y en el Alto Paraná se han detectado numerosos sitios de diversas entidades precerámicas y ceramolíticas. Esta región les aportó diversidad y abundancia de materia prima. Generalmente la podían obtener en los mismos asentamientos.
Para la clasificación de los artefactos líticos aplicamos un enfoque taxonómico (definición de Tipos) y un enfoque analítico (análisis de atributos en base a un conjunto de variables establecidas). Este último análisis permite detectar básicamente las propiedades morfológicas y funcionales de los artefactos.
Estos análisis de artefactos me han aportado datos y evidencias que posibilitó definir y caracterizar la tecnología lítica de diversas entidades culturales y poder establecer sus semejanzas y/o diferencias con otras de las tierras bajas de Sudamérica (ej, Sur de Brasil).
Otro tema que me interesa abordar como conclusión es la antigüedad y su persistencia por varios milenios de industrias líticas con una tecnología y morfología rústica (cruda) en diversas entidades del Sudeste de Sudamérica.

37- APLICACIÓN DE LA "TIPOLOGÍA" DE CARLOS ASCHERO AL REGISTRO ARQUEOLÓGICO DEL SISTEMA DE VENTANIA,
PROVINCIA DE BUENOS AIRES

Fernando Oliva* y Jorge Moirano**
* Facultad de Ciencias Naturales y Museo, UNLP / CEAR / Facultad de Humanidades y Artes, UNR.
* Facultad de Ciencias Naturales y Museo. Becario UNLP / CEAR

Desde el inicio de nuestras investigaciones arqueológicas en el Sistema de Ventania en la década del ´80, uno de los temas centrales fue la clasificacíón tecno-morfológica de los artefactos líticos. En este sentido la propuesta de C. Aschero resultó el marco de referencia sobre la cual se sostuvo nuestra investigación en estos años.
De las diferentes propuestas para caracterizar las tecnologías aborígenes presentadas durante esos años, algunas sirvieron en gran parte para aclarar ciertos aspectos en relación a nuestros avances metodológicos, mientras que en otros casos su aplicación no resultó significativa en el contexto de nuestras investigaciones. En primer lugar, el trabajo de Aschero (1975) representó el sostén teórico-metodológico de nuestra perspectiva, mientras que la actualización del año 1983 aportó sin dudas una visualización más acabada de la propuesta anterior. Posteriores a estas presentaciones, y asociadas a la utilización cada vez más frecuente de las computadoras, surgieron las propuestas "computarizadas" TILCO y DELCO (Guraieb y García 1985-1987; García et al. 1985-1987). Una propuesta posterior que quiso capitalizar estos antecedentes, aunque sin lograr una aceptación amplia entre los investigadores, fue la de Orquera y Piana (1986). En aquellos años además, se acentúa la discusión con respecto a la cantidad de variables empleadas, proponiéndose distintas alternativas en relación con los problemas particulares que se investigaba.
Entre los principales inconvenientes que surgieron se destaca el elevado número de variables y la dificultad para la interpretación de muchas de ellas en nuestro problema de investigación particular, p. ej. variabilidad de formas de puntas, entre otros. Sin duda las materias primas con las que fueron confeccionados los artefactos del Sistema de Ventania condicioaron y condicionan la aplicabilidad de la propuesta original.
Además, dada la variabilidad de tipos de registros en nuestra área de investigación -i.e. sitios cantera-taller, campamentos base, entre otros- se propusieron ciertas modificaciones (algunas se expusieron en Oliva y Moirano 2001), tales como medidas métricas en relación al tamaño de los filos en artefactos formatizados, nuevas variables en el tratamiento de elementos de molienda (ver Ávila en esta reunión), y hasta se combinaron aspectos de las propuestas de Aschero con criterios métricos propios para ciertas abordar características analizadas en núcleos.
38- EL PROBLEMA ESTA EN EL NUCLEO

Nora Flegenheimer* y Cristina Bayón**
*CONICET-Area Arqueol. y Antropol. Mun. Necochea / ** Depto. Humanidades, UNS.

En el marco de este taller proponemos discutir aspectos tecnológicos de los núcleos. La tipología de Carlos Aschero fue un hito clave en el desarrollo de los estudios líticos en Argentina porque unificó la modalidad descriptiva y facilitó la comunicabilidad de la información tecnológica. Desde su aparición (1975 y 1983) se han sucedido diversos enfoques en el estudio de los artefactos de piedra, y especialmente, fue importante el auge que, a partir de los ´80, tuvieron los trabajos sobre la organización tecnológica y la experimentación. La aplicación de estas perspectivas mostró que percibir la producción de artefactos como un proceso secuencial es una herramienta conceptual poderosa para comprender las decisiones tomadas por los artesanos del pasado.
En este sentido está claro que el análisis tanto de los desechos como de los núcleos pasan a ser claves. Proponemos considerar en nuestras clasificaciones estos aspectos dinámicos de la tecnología lítica y para ello debemos buscar atributos descriptivos útiles. Sugerimos incluir en las normas dos aspectos que consideramos básicos para la interpretación del proceso de reducción. El primero es si los núcleos están preparados o no porque ello implica el diseño de todo un proceso de talla (1). Esto es particularmente importante para discutir aspectos organizativos (relacionado al hecho de que sean, por ejemplo, tecnologías conservadas o expeditivas). El segundo es si los núcleos se descartan cuando están agotados o no (2). Este aspecto enfoca el momento final del proceso secuencial, es decir el abandono (por ejemplo, relacionado a la existencia de almacenaje o descarte por agotamiento).
En cuanto a 1, la bibliografía internacional hace hincapié en ciertas tecnologías particulares de núcleos preparados, entre las de uso más extendido: Levallois, de hojas, bifaciales, tecnologías que también han sido reconocidas en Argentina. Sin embargo, los núcleos preparados exceden los de estos 3 tipos. Esta clasificación surge de evaluar el proceso de talla en cada caso y de los estudios que permitan identificar modalidades tecnológicas. Por ello, esta caracterización es una ponderación de cómo se obtuvieron las formas base en cada núcleo.
En cuanto a 2, una característica a considerar en el conjunto lítico es la relación entre el tamaño de las lascas, las formas base de los instrumentos y los negativos de las últimas extracciones. También resulta útil el registro de posibles motivos de abandono del núcleo: la existencia de charnelas, ángulos obtusos, problemas en la materia prima. El tamaño de los núcleos complementado con el peso nos ha resultado útil para caracterizar distintas situaciones de transporte y almacenaje.
Consideramos que el taller debe ser el ámbito para consensuar una nueva clasificación, en este caso para los núcleos, que, teniendo en cuenta conceptos y perspectivas elaboradas con posterioridad, mantenga el rol de "lenguaje comunicacional" que consiguieron por mérito propio "las normas Aschero".

39- ¿UN NÓDULO TESTEADO ES UN NÚCLEO?

Gabriela M. Armentano
Dpto. de Arqueología. Facultad de Ciencias Sociales (UNCPBA), Olavarría.

El presente trabajo pone a consideración del taller la posibilidad de sumar a la clasificación de núcleos la categoría de rodado o nódulo testeado. Dicha categoría presenta algunas variantes con respecto a la definición de núcleos propuesta por Aschero (1975) y ciertamente es diferente de la categoría de núcleos con lascados aislados.
Al aplicar la definición de núcleo (Aschero 1975: 9) a los conjuntos líticos analizados en el curso inferior del río Colorado, el criterio de extracción de lascas "aprovechables" no se adapta a algunos casos de rodados con evidencias de haber sido tallados. El reducido tamaño y las evidencias de falla de las materias primas de muchos ellos, hace difícil establecer que los subproductos obtenidos hayan sido potenciales formas base. Por esta razón, se consideró incorrecto designar a tales rodados como núcleos, dado que de los mismos no se obtuvieron productos utilizables, ni se continuaron extrayendo lascas.
Los materiales que dieron origen a estas observaciones provienen de sitios donde la forma de ocurrencia de las materias primas es predominantemente la de rodado pequeño y la técnica de reducción bipolar. La particular forma de presentación de estas materias primas produce pocas evidencias externas de la calidad de la roca, lo que refuerza la posibilidad de testeo de las mismas.
Esta categoría de rodados o nódulos testeados fue aplicada con el objeto de permitir una mejor caracterización de los conjuntos y se considera que puede ser útil además, para otras áreas de estudio con evidencias similares.

40- PROPUESTA PARA LA INCLUSIÓN DE ATRIBUTOS DESTINADOS A EVALUAR EL GRADO DE EXPLOTACIÓN Y CAUSAS PARA EL DESCARTE/ABANDONO DE NÚCLEOS

Nora Viviana Franco
CONICET - Universidad de Buenos Aires

Los núcleos constituyen una vía de acceso importante para comprender las estrategias utilizadas por las poblaciones en el pasado. Por este motivo, considero de utilidad agregar los siguientes atributos a los ya considerados en la tipología morfológica de Aschero:

# cantidad mínima de extracciones
# longitud de las últimas extracciones, medidas de acuerdo con el eje tecnológico. Esta medida se utiliza para evaluar si existe un rango de tamaños de extracciones a partir del cual los núcleos son abandonados.
# ancho de las últimas extracciones, medidas por eje tecnológico.
# terminación de las extracciones, distinguiéndose entre agudas, quebradas y en charnela. El objetivo es analizar si puede haber alguna relación con causas de abandono.
# ángulo de la plataforma de percusión a partir de la cual se realizaron las últimas extracciones (valor absoluto). Este atributo será muy útil para evaluar las causas de abandono del mismo.
# causas probables de abandono, inferidas sobre la base de la presencia de impurezas, charnelas, agotamiento, etc.

Por otra parte, y ya no relacionado con el grado de explotación de los núcleos, sugiero incluir como atributo la clase de plataforma de percusión de las últimas extracciones. La comparación de las plataformas de percusión existentes en los núcleos con las de las lascas, podrá ser utilizada para evaluar el transporte de formas base hacia otros sectores del espacio.

41- MÓDULOS DE TAMAÑO Y LONGITUD RELATIVA PARA ÚTILES Y
DESECHOS DE TALLA

Carlos A. Aschero
CONICET - Instituto de Arqueología y Museo, FCN e IML, UNT

Se considera que es conveniente mantener separados las designaciones para útiles y desechos de talla y, a su vez, las mediciones hechas sobre el eje de lascado o eje técnico de la forma-base (lascas u hojas) de las realizadas sobre el eje morfológico. Para el caso de útiles y desechos de talla medidos sobre el eje de lascado los tamaños relativos se refieren a características litométricas y las referidas a las longitudes relativas o alargamiento de las piezas, se refieren a características litotécnicas (Bagolini 1971). Las primeras miden el tamaño en relación al rectángulo que inscribe a la pieza orientada según el eje de lascado. Las segundas miden el alargamiento de la pieza mediante la relación largo-ancho, bajo esa misma orientación.
Estas mediciones operaran con piezas preferentemente enteras. Pero hay casos en que es aconsejable presentar gráficos de mediciones que combinen -discriminándolas- piezas enteras y fragmentadas. Por ejemplo, para los raspadores de filo corto frontal de la Patagonia centro-meridional, realizados sobre hojas y lascas laminares, donde la comparación puede ofrecer una buena información sobre la relación entre fractura transversal y enmangue.
En el caso de utilizarse mediciones de piezas orientadas por ejes morfológicos (puntas de proyectil, bifaces, por ejemplo) estas tendrán solo validez comparativa dentro de cada grupo tipológico.
Las orientaciones sobre ejes de lascado sirven para comparar tamaños seleccionados (o remanentes luego de su uso) y módulos de longitud de útiles vs. desechos de talla. El siguiente cuadro tabula esas relaciones y equipara designaciones.
TAMAÑOS MODULOS DE LONGITUD
Útiles Desechos de talla Útiles Desechos de talla
Muy pequeños Hipermicrolascas o hipermicrolaminas Cortos Corto anchísimo
Corto muy ancho
Corto ancho
Pequeños Microlascas
Microláminas Medianos Mediano normal
Mediano alargado
Medianos pequeños Lascas / laminas pequeñas Laminares Laminares normales
Laminar angosto
Laminar muy angosto
Medianos grandes Lascas / laminas normales - -
Grandes Lascas / laminas grandes - -
Muy grandes Lascas / laminas muy grandes - -
Grandísimos Lascas / laminas grandísimas - -
(Ver valores discriminantes en grafico modificado de Bagolini, en Aschero 1983)

42- AMBIGÜEDADES EN LA CLASIFICACIÓN DE PRODUCTOS DE TALLA
POR "FORMA DE LASCA"

Darío Hermo
División de Arqueología del Museo de La Plata. FCNyM - UNLP / Conicet

La clasificación morfológica de "Formas de Lascas" puede resultar problemática si las categorías propuestas por Aschero (primaria, secundaria, angulares, de arista, en cresta, plana, etc.) son tratadas como excluyentes, siguiendo la manera en fueron presentadas en el "Ensayo para una clasificación morfológica de artefactos líticos" o, como se conoce informalmente en el ambiente académico nacional, "el Aschero".
Sin embargo, a partir del trabajo con algunos conjuntos de desechos provenientes de la Meseta Central Santacruceña, se ha podido evaluar esta propuesta, a la cual le hemos introducido algunos cambios para que la misma continúe siendo operativa a un espectro más amplio de situaciones arqueológicas, ya que no son las categorías morfológicas de la clasificación son las que estarían fallando, sino la condición de excluyentes que se les asignó a las mismas, pudiendo causar un registro erróneo o ambiguo. La principal dificultad que se ha notado es la coexistencia de dos criterios diferentes para la descripción de la "forma de lasca": presencia de corteza por un lado y las "formas que adoptan las aristas de lascado", por otro.
Según "el Aschero", el registro de datos para la categoría Tipo de Lasca se efectúa en una columna, debiendo el analista completar con la categoría adecuada, escogiendo cuál es la característica que a sus ojos o al tipo de análisis en cuestión corresponda. A la vez que se escoge la categoría descriptiva de relevancia, se está abandonando otras que podrían resultar de interés para otro tipo de análisis. Es decir una lasca angular con algún porcentaje de corteza, quedaría incluida en el grupo de las lascas secundarias, o bien en el de las angulares; pero sin registrar ambas características. Similares observaciones son válidas para la variable "Forma del talón".
De esta manera se estaría ocultando la variabilidad dentro de los conjuntos tecnológicos al agrupar dentro de ciertas categorías elementos que no son unívocos y, con este planteo como supuesto de base, se complejiza el análisis, obligando al analista a retomar los conjuntos para relevar las características omitidas anteriormente.
Retomando la idea que "culpa" de todos estos cargos a la técnica de registro, la propuesta que se hace es la de incorporar estas categorías no excluyentes en la planilla pertinente para formar nuevas (con respecto a "el Aschero") categorías múltiples que consideren todas las categorías en cuestión (acordes a los dos criterios mencionados). A su vez, esta aplicación puede resultar más efectiva para el analista ya que permitiría incorporarlas en una misma observación del material y desagruparlas fácilmente para los diferentes análisis, dado que la determinación de exclusividad o no de las "formas" afecta el procedimiento analítico en los cuatro pasos detallados por Aschero (segmentación, descripción técnico-morfológica, descripción morfológico-funcional y la sistematización y presentación estadística del conjunto).
43- EL ESTUDIO DE LA VARIABILIDAD A TRAVÉS DE LOS CONJUNTOS
DE DESECHOS LÍTICOS

G. Roxana Cattaneo
CONICET/UNLP. Facultad de Cs. Naturales y Museo. Museo de La Plata- División Arqueología

Para estudiar la variabilidad en la organización tecnológica creemos que debemos discutir las evidencias a distintos niveles, especialmente para evitar los problemas interpretativos surgidos de las diferencias en la funcionalidad de eventos ocupacionales o de los procesos de formación de sitio. Entendemos que el estudio de los procesos de manufactura de instrumentos puede orientarnos sobre aspectos fundamentales de la producción tecnológica.
Los productos de esa reducción lítica, generalmente abundantes, son considerados capaces de registrar las clases y cantidades de manufacturas que fueron llevados a cabo en un lugar (Shott 1996). Las propuestas tradicionales, utilizan las categorías primaria y secundaria para clasificar los desechos de talla, de acuerdo al porcentaje de corteza. Otra propuesta es el programa DELCO que utilizaron Gabriela Guraieb, Cristina Bellelli, Hugo Nami y Alejandro García ( Guraieb y García 1985-87; Bellelli 1991) .
La diversidad de tipologías vigentes utilizadas para su estudio, en Argentina y especialmente en los países anglosajones, sobre cómo analizar los procesos de reducción lítica (diferenciando etapas o considerando el proceso como continuo (ver especialmente Nami (1985) y Nami y Bellelli (1994) entre otros) han demostrado que existen varias necesidades por cubrir:
1. un set mínimo de atributos en cada desecho lo suficientemente objetivo como para no ser malinterpretado por el/los analista/s.
2. la combinación de una aproximación formal que permita analizar conjuntos de desechos como una unidad, tomando en cuenta solo atributos de carácter ordinal.
3. y un enfoque que priorice el estudio del proceso continuo de manufactura de artefactos.
Estudios preliminares de conjuntos experimentales y arqueológicos han propuesto modelos que utilizan funciones matemáticas que permiten el estudio de conjuntos de desechos como parte de un continuo ("Non Typological Approach" -Ingbar et al. 1989 Ahler 1989; Shott 1994; Larson 1994 -). Nosotros proponemos discutir el uso de sólo ciertos atributos de la clasificación morfo-tecnológica de Aschero (1975-83), los cuales junto con otros atributos formales nos permiten acceder a una vía rápida y extremadamente confiable de análisis de desechos de talla.
44- ADVENTICIAS Y DE DESPRENDIMIENTO TÉRMICO. ¿TIPOS DE LASCAS?

Cristina Bellelli y Mariana Carballido Calatayud
CONICET - Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano. Buenos Aires.

Varios años de análisis de desechos de talla y otros tantos de realización de remontajes líticos nos han ayudado a identificar, en los conjuntos de desechos de varios sitios, "lascas" adventicias y de desprendimiento térmico.
Aschero (1975) define a las lascas, en sentido amplio, como "la totalidad de los productos menores obtenidos por fractura intencional de una forma base". Si tomamos esta definición las adventicias podrían ser o no lascas ya que, como sabemos por trabajos experimentales, muchas veces la reducción de los bulbos es una operación intencional pero en otras oportunidades, sobre todo cuando se trabaja con percutores duros, las "lascas" adventicias no son un resultado buscado sino un simple accidente. Sin embargo su identificación en conjuntos de desechos, combinada con otros elementos, puede brindar información tecnológica interesante.
Algo similar ocurre con los "desechos" de desprendimiento térmico. Con este nombre hacemos referencia a los negativos de los hoyuelos producidos por alteraciones térmicas. En este caso no hay elementos para pensar que son productos intencionales por lo que no podrían denominarse "lascas" ni tampoco son producto de actividades extractivas como la talla por lo que tampoco serían desechos de talla en sentido estricto. Sin embargo, consideramos que su reconocimiento puede brindar información contextual y de procesos de formación del registro arqueológico básicas para la interpretación.
Nuestra propuesta, entonces, es la de discutir en el marco del Taller la posibilidad y la forma de inclusión de estas dos categorías en el análisis de desechos de talla en un sentido amplio.

45- DESECHOS DE TALLA: CONSIDERANDO LOS SUBPRODUCTOS
DE LA TALLA BIPOLAR

Patricia S. Escola
CONICET - UNCA

La presencia de la talla bipolar en los contextos arqueológicos líticos de nuestro país ha sido reconocida en diferentes regiones y vinculada tanto a sociedades cazadoras-recolectoras como productoras de alimentos. Su tratamiento en cuanto a identificación, terminología y funcionamiento no posee aún un consenso generalizado, situación que se ve reflejada en la propuesta tipológica de Aschero.
En el trabajo de este autor la reducción bipolar es considerada como una forma de talla. En este sentido, aparece en la designación morfológica del núcleo (núcleo bipolar) y en la serie técnica de los instrumentos (presencia o ausencia de talla bipolar). Sin embargo, los subproductos de la talla bipolar no son tomados en cuenta en el análisis de los desechos de talla. Esta ponencia pretende plantear la discusión acerca del tratamiento de los desechos de la talla bipolar en la propuesta tecno-morfológica de Aschero.
Se puede señalar que la talla bipolar, dejando de lado en esta oportunidad al núcleo o masa central bipolar, genera cierta cantidad de lascas y desechos indiferenciados con particulares características (pe. machacado o astillado en los extremos proximal y/o distal de las piezas, extracciones columnares, lascas planas o de sección triangular, etc.). Asimismo, estos desechos bipolares suelen vincularse estrechamente al procesamiento de determinadas materias primas razón por la cual su identificación y cuantificación como categoría independiente se vuelve necesaria a la hora de discutir cuestiones de la organización tecnológica lítica. De este modo, para el atributo Origen de las extracciones o Tipo de lasca, se propone la utilización de la categoría "producto bipolar" (PB) para aquellas lascas obtenidas como resultado de la talla bipolar. Del mismo modo, para el atributo "Estado de Desecho" incluido en la propuesto del DELCO (incorporación a la tipología de Aschero a discutir en la Mesa 3), se propone la utilización de las categorías "producto bipolar entero" (PBENT), "producto bipolar fracturado" (PBFR) y "desecho bipolar indiferenciado" (PBIND).

46- ¿TALONES PSEUDO-FILIFORMES?

Patricia S. Escola
CONICET - UNCA

Esta ponencia tiene por objeto discutir la identificación, terminología respectiva e incorporación como estado de atributo de una nueva forma de talón entre los desechos de talla denominada provisoriamente como "pseudo-filiforme". Esta denominación incluye a un grupo de talones vinculados, exclusivamente hasta el momento, a desechos de una materia prima específica como es la Vulcanita 8, utilizada para la confección de palas y/o azadas. Tal como se podrá observar en el material presentado, a diferencia de los talones filiformes que presentan una plataforma delgada, en los pseudo-filiformes la plataforma se reduce prácticamente a un filo levemente cóncavo en su porción central. Una posibilidad para estas piezas enteras podría haber sido consignar la ausencia de talón, sin embargo, dado que se observaban características recurrentes y con importante frecuencia de aparición, se decidió consignar su presencia como un nuevo estado de atributo.
Debo destacar que, en un principio, atribuí las particularidades observadas a las propiedades estructurales de la roca. No descarto la influencia de este elemento, sin embargo, en base a la experiencia de replicación de las palas y/o azadas, me atrevo a conferir la generación de talones pseudo-filiformes a procedimientos particulares de talla. Si bien se trabaja por percusión directa, al tener que sostener la pieza de canto, el golpe se aplica de manera perpendicular al borde, obteniendo como resultado desechos cortos y anchos, casi sin bulbo y con talones de la forma mencionada.
La presentación de material de referencia tiene por objeto no solo mostrar las particularidades del talón pseudo-filiforme para discutir su naturaleza como tal sino también permitir evaluar su existencia en conjuntos de desechos de diferentes regiones.

47- PROPUESTA PARA LA INCLUSIÓN DE ATRIBUTOS PARA DESECHOS DE TALLA

Nora Viviana Franco
CONICET - Universidad de Buenos Aires

Los desechos de talla constituyen una vía de análisis poco explotada aún. Entre otros, puede proporcionar información acerca del grado de estandarización de los productos obtenidos, o acerca de las actividades de talla que han predominado en la muestra.
Por este motivo, considero importante agregar los siguientes atributos:
# En el caso de lascas enteras, y con tamaños mayores a 20 mm, medidas individuales de su longitud, ancho y espesor por eje tecnológico. Considero que el utilizar medidas individuales es más útil para evaluar su estandarización que el empleo del Bagolini.
# Estado de la pieza: en este caso, sugiero que en el caso de piezas fragmentadas, se indique si se trata de un fragmento proximal, medial, distal, longitudinal o indiferenciados (Sullivan y Rozen 1985). Esta diferenciación es útil para calcular el número mínimo de desechos presentes en la muestra. En el caso de las fracturas longitudinales, sugiero además indicar la existencia de "split fractures" (Crabtree 1972), que se consideran más comunes en las etapas iniciales de reducción de núcleos (Rozen 1984 en Prentiss y Romanski 1989). Por otra parte, sugiero evaluar si conviene incluir la lateralidad de los desechos.
# En la forma de superficie de los talones, sugiero agregar a los mencionados por Aschero, los estallados (Bradbury y Carr 1995).
# Sugiero indicar el porcentaje de corteza presente en cara dorsal, separando entre ausente (carec de corteza), 25% (cubre entre el 0,1 y 25% de la cara), 50% (cobertura entre el 25,1% y el 50% de la cara), 75% (cubre entre el 50,1 y el 75% de la pieza) y 100% (cobertura entre el 75,1 y 100% de la cara).
# En el caso de las hojas, en caso de estar fragmentadas, incluir las medidas de su ancho y espesor por eje tecnológico y morfológico, a efectos de evaluar si existe homogeneidad en los productos obtenidos.
# Dentro de los desechos indiferenciados, sugiero indicar si específicamente se han identificado los denominados informalmente "chunks".
# Por último, para los artefactos en general, considero de utilidad agregar en el caso del atributo Nº 25, "Alteraciones en la superficie de la roca", y en los casos en que corresponda (por ejemplo: pátina, abrasión) si los mismos están presentes sobre una o sobre las dos caras de la pieza. El agregado de este atributo permitirá evaluar la existencia de superficies de estabilidad.

48- OPERATIVIDAD DE LOS FILOS NATURALES CON RASTROS COMPLEMENTARIOS

Patricia S. Escola
CONICET - UNCA

El propósito de esta ponencia es plantear la discusión acerca de la operatividad del grupo tipológico conocido como Filos Naturales con Rastros Complementarios. Dicho grupo tipológico, si bien no posee filos activos confeccionados por lascados, es considerado en términos generales un instrumento con la misma entidad que un raspador o una raedera. Por su parte, de acuerdo con la revisión de 1983 del trabajo de Aschero, los rastros complementarios incluyen distintos patrones de desgaste, visibles sin uso de lupas binoculares o microscopios, que afectan filos, superficies o puntas activas sean formatizadas o no. Se aclara que su origen puede estar en el uso del útil, en la preparación de plataformas para el retoque o extracción, en las presiones ejercidas sobre los bordes durante la prehensión del útil o bien, en un sinnúmero de efectos producidos en procesos post-depositación.
Ahora bien, si este grupo tipológico es identificado y cuantificado entre los instrumentos, los rastros complementarios deberían restringirse exclusivamente a aquellos producidos por el uso del útil. En este sentido, el punto clave a discutir es el siguiente : es posible distinguir macroscópicamente de manera no ambigua entre los rastros producidos por el uso y aquellos generados como consecuencia de procesos post-depositacionales ? Esta problemática se complejiza aún más si tomamos en consideración los diferentes tipos de materias primas en que se producen estos rastros, por ejemplo obsidiana versus cuarcita, y su identificación macroscópica.
En síntesis, con esta ponencia se pretende discutir con los analistas líticos cómo maneja cada uno de ellos los problemas planteados para alcanzar un consenso acerca de la definición, utilización y operatividad del grupo tipológico filos naturales con rastros complementarios.

49- UNA PROPUESTA PARA LOS RASTROS COMPLEMENTARIOS

María Gabriela Chaparro
CONICET/UNCPBA Departamento de Arqueología. Facultad de Ciencias Sociales. Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires. Olavarría.

El presente trabajo tiene como objetivo compartir la experiencia de analizar los "Filos naturales con Rastros Complementarios" definidos por el "Ensayo para una clasificación morfológica de artefactos líticos" (Aschero 1975, 1983). Específicamente se busca contribuir a la discusión acerca de la pertinencia o no de los distintos tipos de rastros complementarios sobre los filos naturales (M3.26).
Siguiendo este ensayo, los rastros complementarios se agrupan en 7 subgrupos y abarcan distintos patrones de desgaste de variados orígenes, desde huellas de uso hasta marcas producidas por procesos postdepositacionales. A través del análisis de los materiales provenientes de diversos sitios de superficie tardíos de las quebradas de Gualfín y Tacuil (Salta) y estratigráficos de la cueva 5, Inca Cueva (Jujuy) se propone realizar algunas modificaciones a esos subgrupos. Se observaron dos cuestiones, a pesar del tamaño pequeño de la muestra, por un lado una alta recurrencia de unos pocos tipos de rastros complementarios y por otro lado, en materias primas como la cuarcita, no se logran diferenciar la variedad de rastros descriptos por Aschero.
Este trabajo intenta ilustrar como se adaptó la tipología a un área de estudio particular para la cual se reformularon en los siguientes subgrupos y las categorías:
Subgrupo A: Microlascados, (A1)- Regulares y (A2)- Aislados
Subgrupo B: (B1)- Melladuras, (B2)- Muescas, (B3)- Fracturas
Subgrupo C: Astilladuras
Subgrupo D: Redondeados, (D1)- Arista Pulida y (D2)- Arista Abradida
Subgrupo E: No diferenciado

50- APORTES DEL ANÁLISIS FUNCIONAL PARA LA INTEGRACIÓN DE VARIABLES DE ANÁLISIS DE FILOS NATURALES, EN LAS TIPOLOGÍAS LÍTICAS

Alicia S. Castro
Departamento Científico de Arqueología. Facultad de Ciencias Naturales y Museo. UNLP-UNPA-UACO

El análisis funcional aplicado a conjuntos artefactuales líticos, ha demostrado poseer un gran potencial no solo para la definición diagnóstica de las actividades desarrolladas por los instrumentos, las sustancias trabajadas, las formas de enmangue y uso, sino también para adjudicar significados a variables de la morfología lítica, como producto de un diseño integral. Esto impone reconocer la importancia de considerarlas en forma particularizada, a la hora de realizar análisis de conjuntos líticos y clasificaciones tipológicas. Este es el caso de los filos naturales.
Ejemplos derivados del análisis funcional de conjuntos artefactuales como el Casapedrense de la Cueva 2 de Los Toldos (Patagonia argentina) y de Cumbe (Perú), darían cuenta de ello.
Los filos naturales están considerados en este trabajo como aquellos filos producidos por los bordes de lascas u otros productos, obtenidos por talla, o retalla, de morfología regular, rectilíneos, cóncavos o levemente convexos, ya sea cortos, largos o perimetrales y ángulos variables del rango agudo a semiabrupto, por supuesto no formatizados, pero pueden poseer retoques sumarios aislados. Por lo general los análisis tipológicos soslayan el análisis particularizado de los filos naturales ya sea porque son característicos de piezas sin formatización, caso de las lascas y láminas, o porque son parte en piezas formatizadas que quedan relegadas por el análisis de los filos formatizados. A lo sumo, en algunos casos se los puede considerar como filos potencialmente funcionales de manera general. Pero experiencias funcionales, como las ya mencionadas en un párrafo anterior, han demostrado que filos naturales, con particularidades recurrentes como un mismo ángulo y largo determinado, así como su posición morfológica en el cuerpo de la pieza, en sectores relativos a una adecuada prensión, han sido utilizados y en consecuencia poseen un valor diagnóstico importante para la reclasificación tipológica del artefacto. Esto exige su análisis pormenorizado, de la misma manera que se realiza sobre filos retocados en los procesos de análisis y clasificación tipológica.

51- EL PROBLEMA DE CIERTAS VARIABLES MORFOLOGICAS COMO CRITERIO CLASIFICATORIO EN LA DEFINICION DE INSTRUMENTOS:
PERSPECTIVA DESDE EL ANALISIS FUNCIONAL DE BASE MICROSCÓPICA

Myrian R. Alvarez y María Estela Mansur
Centro Austral de Investigaciones Científicas - CONICET

Durante las últimas décadas el desarrollo del análisis funcional de base microscópica ha permitido acumular considerable experiencia e información con respecto a la validez de ciertas variables tradicionalmente utilizadas como criterio descriptivo en el análisis de conjuntos líticos. Dado que dichas variables son el punto de partida para la definición de grupos tipológicos, su cuestionamiento incide directamente en la delimitación de esos grupos y por lo tanto en la estructura del conjunto artefactual.
Desde nuestra perspectiva el análisis tecno-morfológico y el análisis funcional no constituyen líneas de trabajo alternativas sino complementarias. Por ello para su articulación resulta fundamental que los criterios de análisis sean compatibles. Nuestro propósito es presentar los criterios surgidos del análisis funcional de base microscópica que nos han llevado a la redefinición de algunas categorías morfotécnicas. Indudablemente la revisión del Ensayo de C. Aschero, que es el marco de referencia en la clasificación de materiales líticos en Argentina, resulta el ámbito óptimo para su discusión.
Uno de los principales problemas en la clasificación y confección de listas tipológicas es el de los filos naturales. Resulta evidente que su identificación es de suma importancia para dilucidar las estrategias tecnológicas y decisiones económica de las sociedades en el pasado. Sin embargo, en la clasificación actual, la representación de los filos naturales en los conjuntos instrumentales (cuchillos de filo natural, lascas y puntas con rastros complementarios) queda enmascarada por la utilización de criterios dirigidos en su definición.
Otro es el de los rastros complementarios que, tal como queda expresado en la revisión del ´83, pueden ser el resultado de diferentes factores donde el uso es uno de ellos. Su formación durante la utilización de la pieza depende de una serie de variables que se combinan entre sí: materia prima, forma del filo, ángulo del filo, sección longitudinal, largo filo, cinemática, dureza y tipo de material trabajado, presión aplicada etc. Además, entre las lascas con filos naturales potencialmente utilizables, muchas de las que efectivamente han sido usadas no presentan rastros complementarios.
Todo esto genera estructuras tipológicas ficticias -producidas por la inclusión de filos naturales no utilizados (con rastros complementarios) y por la exclusión de lascas utilizadas que no presentan rastros macroscópicos-, que impiden una adecuada evaluación de las estrategias tecnológicas. Por lo tanto, se propone discutir criterios funcionales que permitan el abordaje de este problema y considerar su viabilidad en la presente revisión.

52- PROPUESTA DE MODIFICACIÓN PARA EL REGISTRO DE LOS RASTROS COMPLEMENTARIOS QUE SE RELACIONARÍAN CON EL USO DE LOS INSTRUMENTOS

Andrea Toselli
Becaria predoctoral Programa I3P del CSIC-Lab. de Arqueología-Inst. Milà i Fontanals- CSIC Barcelona

Dentro de lo que se han llamado "rastros complementarios" estarían comprendidas toda una serie de alteraciones o cambios causados por diferentes factores que actuarían en momentos diferentes de la dinámica de los conjuntos líticos arqueológicos: durante el proceso de manufactura, durante su uso, su abandono y descarte y, finalmente durante la recuperación y manipulación por parte de nosotros, los arqueólogos. Cualquiera de estos procesos -antrópicos y naturales- que haya actuado con la suficiente intensidad durante un tiempo dado es capaz de dejar huellas en los artefactos que pueden ser observadas a nivel macroscópico como microscópico. Las huellas debidas a la utilización nos interesan particularmente en la tipología, porque es uno de los criterios propuestos, derivados de la experimentación, para realizar la clasificación en grupos tipológicos. Lamentablemente, sólo una parte de estas huellas son visibles macroscópicamente y la interpretación funcional que de su observación podemos hipotetizar solo puede contrastarse a través del análisis completo de estas huellas, lo que implica la observación microscópica.
Los trabajos experimentales sobre huellas de uso en los que se han integrado estudios a nivel macro y microscópico han demostrado la tendencia a que cuando los instrumentos han sido utilizados para trabajar materiales relativamente duros (huesos, valvas, astas, maderas duras o estacionadas, etc.), cuando se han incluido sustancias abrasivas (p.e. en el tratamiento de la piel) y/o cuando han sido usados durante un largo tiempo, es muy frecuente que el desgaste sufrido por los mismos se manifieste a nivel macroscópico. Entonces, debemos ser concientes de que las posibles alteraciones de uso ante las que nos podríamos hallar son detectables a nivel macro gracias a alguna/as de estas condiciones y, por lo tanto, se estarían escapando a nuestro análisis todos los otros potenciales instrumentos (consideramos instrumentos a todo artefacto que presente huellas de uso) con alteraciones de uso más sutiles que no serían detectables si no es a partir de un análisis más exhaustivo, incluyendo en éste la observación microscópica. Pese a estos problemas de sesgo, propongo el registro sistemático de atributos visibles macroscópicamente, siguiendo los criterios más generalmente utilizados en análisis de huellas de uso, tanto para los filos o puntas naturales como para todos los artefactos formatizados: 1-melladuras: presencia, cantidad relativa, distribución, localización según caras del filo y en toda la pieza. Éstas serán las huellas de uso más factibles de ser observadas macroscópicamente; 2-desgaste (pulido): redondeamiento o enromado de los filos o las puntas y cambios en el brillo de los mismos (observando toda la pieza). Es difícil de detectar macroscópicamente; la excepción serían, por ejemplo, los instrumentos vinculados a la siega de cereales; 3-estrías: presencia y orientación (observando toda la pieza). En el único tipo de roca en que hemos podido observar esta huella macroscópicamente es en la obsidiana y cristales. En todos los casos en que se registre la presencia de estas alteraciones puede formularse la hipótesis de un posible uso del instrumento, hipótesis que solo puede ser contrastada y resuelta con mayores precisiones en lo que respecta al material trabajado y la cinemática con un estudio que implique la observación microscópica.


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