CONGRESO VIRTUAL 2000

Título de la ponencia:

Arte Rupestre: Modelos proyectos y perspectivas

Nombre: Muñoz Guillermo

Título Profesional: Filosofía y Letras

Institución de pertenencia: GIPRI COLOMBIA

País de origen: Colombia

Resumen:

Los procesos de estudio e interpretación de los lenguajes presentes en las manifestaciones rupestres se han venido refinando no sólo con los aportes de las ciencias básicas, sino que se han transformado con los estudios regionales sistemáticos. Los resultados de registro y documentación sistemática de amplias regiones permitirán tener al futuro matrices complejas y fuentes documentales nuevas para confrontar esta información con los documentos derivados de otras fuentes documentales. De esta manera el estudio estético presente en las representaciones rupestres dejara de ser simplemente analógico para adentrarse en las características del poblamiento, de acceso a recursos... en la determinación en otra esfera de las sociedades complejas..... Las perspectivas asumidas permitirán hacia el futuro estudiar arte rupestre comparado.GMC Email:

gipri@col1.telecom.com.co

arteyrupestre@egroups.com

Modelos proyectos y pespectivas

1.1 Orígenes del tema

Quien se interese en tematizar el origen de los problemas metodológicos en la historia del pensamiento humano debe detenerse en las disputas y en las investigaciones que en la modernidad generaron esta preocupación7 y reflexionar sobre los efectos que estos temas produjeron hacia el presente en los ambientes en los cuales se desarrollan actualmente estas discusiones8. Para ingresar en esta discusión deberá buscar los fundamentos complejos de estas disputas en la historia racional del hombre Quien desee igualmente hacer un trabajo metodológico en cualquier área del saber no podrá esquivar el fundamento histórico9 de estas argumentaciones, pues en su devenir han impregnado la totalidad de los contornos de la investigación contemporánea. El Discurso del Método y el Novum Organon, son sin duda los primeros esfuerzos por determinar con precisión el modo como deben dirigirse los pensamientos para así poder diferenciar lo verdadero de lo falso10. El trabajo de Descartes y Bacon son fundamento de las actividades teórico – prácticas actuales, siempre y cuando una investigación pretenda, generar orden en un trabajo, discutir criterios, determinar qué es fundamental, disponer eventos, ubicar objetos, discutir las categorías y organizar y evaluar la objetividad científica de éste o aquel proceso de búsqueda y conocimiento. No es solamente un asunto gnoselógico y es esencialmente un asunto frente a la objetividad.

Fue Descartes quien determinó la necesidad de hacer una topología del mundo externo con un lenguaje que no fuera ambiguo, con el lenguaje de la matemática. Con esta perspectiva Descartes pensó que era indispensable usar las líneas11 y algunas distancias, con las cuales fuera posible determinar el lugar de los objetos. Así, se construyeron como consecuencia las coordenadas (x,y) y con un lenguaje estrictamente humano se pudo, desde esta época, producir sistemas de descripción universales una nueva estructura de objetivación y con ella una propuesta moderna de objetividad La cartografía usada para la ubicación en el espacio geográfico es una proyección de esta estructura fundamental. Los procedimientos de la geometría analítica, no sólo facilitan la ubicación de los objetos en el espacio geográfico, sino que construyen ecuaciones y funciones sobre sus contornos. De esta forma, es posible averiguar el área, el volumen y establecer relaciones con otros objetos. La observación, la enumeración, el carácter exhaustivo de las listas, el iniciar de lo simple a lo complejo, son además del conjunto de reglas12 que debe imponerse el pensamiento, algunas de las pautas que Descartes considera esenciales en la nueva construcción de la objetividad. La objetividad es la extensión y el pensamiento se encuentra adecuado para precisar tal condición del mundo: el mundo es extenso y el pensamiento puede dibujar en el espacio geométrico estas características, esta objetividad13.

Del mismo modo, Bacon con similar temperamento considera esencial hacer una crítica a las tradicionales formas de percibir. En sus capítulos dedicados a los “ídolas” presenta sus pensamientos sobre lo que ya no es un buen método de trabajo, si se pretende adelantar en ciencia y hacer un mundo nuevo14, un mundo práctico. Las descripciones en la Nueva Atlántida muestran de manera novelada como la ciencia debe proceder y el tipo de utopías sociales que ésta proyecta. Lo sustancial es que la estructura metodológica de Bacon, se deriva de la discusión con la tradición escolástica, debate que este autor considera esencial, si se quiere adquirir la capacidad para percibir la nueva realidad que se desprende del estudio de la naturaleza. La inducción en Bacon no es otra cosa que la búsqueda de las singularidades del mundo encontradas en el mundo mismo15 y no en los universales que habían sido formulados por Aristóteles impulsados por la escolástica.

El Novum Organon es un nuevo método que contiene dos temas fundamentales. El primero hace referencia a sus prevenciones y críticas a la tradición Aristotélico-Tomista y el segundo expone los procedimientos que él considera son el fundamento para el logro de nuevos conocimientos sobre el mundo natural. Con Bacon se aprende que cualquier trabajo metodológico debe hacer una crítica de los temas y procedimientos anteriores para ubicar en los trabajos precedentes las inconsistencias y los problemas inadvertidos por años. Es este autor quien por vez primera pone en tela de juicio las estructuras idolas, la ideología que ha venido impidiendo el desarrollo del conocimiento, al dejar siempre escondida la realidad en la confusión y en el atraso.

En cada uno de estos argumentos de la historia del pensamiento moderno se percibe la novedosa perspectiva, que caracterizan la conducta de la investigación del futuro frente al mundo medieval y sus antiguos y ya desgastados sistemas científicos. En cada uno de estos trabajos, se puede encontrar una particular desconfianza con el pensamiento tradicional, y lo que es más interesante y útil, desde el punto de vista contemporáneo, una particular desconfianza con el pensamiento mismo y con sus lenguajes. Lo que se inició como un asunto de discusión sobre la naturaleza, se fue depurando hasta llegar a un estudio del pensamiento y del lenguaje humano.

Descartes advierte que el procedimiento que él escoge, no debe reconocerse mas que como la vía privada, íntima, la solución que el mismo ha dado a sus propias dudas. El haber seleccionado el procedimiento matemático es una vía posible, aquella que permite la coherencia derivada de la ausencia de ambigüedad, proyecto íntimo de la matemática, pero no la única, y éste es un camino que dejó por fuera otros ámbitos. Las formas producidas ahora en la geometría analítica, las relaciones elaboradas por las reglas de las operaciones definidas en el lenguaje matemático, los ejercicios derivados de éstas, son ahora proyectados en la naturaleza, la cual encuentra en este procedimiento un nuevo orden para la descripción y la documentación. Es posible ahora describir con una función el área de un objeto, es posible dibujar con criterios claros sus límites. Si estas reglas16 se usan universalmente es posible repetir cierto tipo de experiencias, construir en forma idéntica los objetos y hacer réplicas de estos. Si el mundo fue construido en el lenguaje de la matemática, las investigaciones de la geometría analítica son la imitación y con ello la reproducción de la objetividad. Hasta aquí se percibe un ambiente optimista que cree firmemente en la objetividad del método y en las posibilidades de éste.

En cada una de las etapas que siguen, se pueden apreciar diversos acentos, ya sea en el esfuerzo por imponer el proyecto moderno, ya sea por perpetuar la tradición escolástica17. Algunos de ellos consideran esencial la observación minuciosa, pero lentamente se enredan en ésta y en sus infinitas posibilidades y no logran generalizar18. Otros continúan expresando confianza en principios que no requieren de la experiencia y con esta tradición pretenden prolongar la antigua barbarie29 premoderna. La tradicional disputa entre el empirismo y el racionalismo europeo debe ser superada pues cada grupo no sólo es, desde su posición dogmático, sino que la ciencia se encuentra en la total confusión30 y lo que es mas grave, en cada uno de estos dogmatismos, se niega la verdadera condición del pensamiento humano como el fundamento de la experiencia. Todo conocimiento comienza con los sentidos, pero no se fundamenta en estos. El pensamiento científico se convierte con esta perspectiva kantiana en la estructura jurídica, con la cual se seleccionan y discriminan las experiencias. Es con esta teoría metodológica contemporánea, de la cual se desprenden las diversas búsquedas, aquellas que se exponen en las diferentes disciplinas y objetos de investigación, aunque su desarrollo por muchos años fue casi exclusivo patrimonio de las ciencias básicas.

Es esencial entonces constituir un conjunto de nuevos principios con los cuales se regulen las experiencias y con estos, se puedan discriminar y organizar los hallazgos21. De esta forma, se sintetizan las dos corrientes anteriores y se ubican dentro de las experiencias humanas. Así, por ejemplo un investigador se interesa por un tema específico y organiza con sus conocimientos un conjunto de estrategias y procedimientos para encontrar respuesta a cierto tipo singular de preguntas. Con estos aprioris se dirige a la naturaleza para observar. Sin la dinámica de estas dos condiciones es imposible la experiencia.

Después de Kant ya no se trata de una observación desprevenida, sino que al contrario es una observación regulada, un escrutinio minucioso efectuado desde una perspectiva consciente y previamente conocida y aceptada. En realidad se trata de la humanización de la experiencia y de la contextualización de la misma, es decir, que todos los contenidos serán ahora puestos como criterios del hombre, objetos del hombre y estos en relación a sus necesidades22.

Los desarrollos de esta perspectiva fueron discutidos e impulsados con distintos acentos por los intelectuales alemanes en el siglo XIX, XX como las proyecciones del idealismo alemán, cuyo fin es mostrar el aspecto activo, productivo y fundamentador del pensamiento humano. Lo esencial de este grupo de académicos fue continuar con el descubrimiento cartesiano en cuando allí se exponía con precisión el modo activo, productivo del pensamiento23. Frente a la tradición, el idealismo alemán desarrolló con absoluta precisión el modo como la razón construye la objetividad obligada por las condiciones materiales, es decir por el modo como los hombres en cada etapa se organizan social y económicamente. Todo lo anterior permitió incluir en la objetividad de cualquier investigación nuevos parámetros y cualidades antes desconocidas. La Fenomenología del Espíritu de Hegel no es otra cosa que la investigación de las formas que ha usado el hombre para determinar, con su lenguaje lo que es la naturaleza. Lo esencial es que la reconstrucción de las determinaciones, es al mismo tiempo la historia del pensamiento humano y la objetividad de este. Nuevamente, en otro nivel de aproximación se pudo entender que es el hombre quien objetiva la naturaleza poniendo en ella sus sistemas de representar. Ya no era suficiente con los temas advertidos por Kant y solucionados por el entendimiento bajo la condición de no superar los limites de la experiencia, bajo los parámetros del entendimiento.

Con Hegel se estudian, se ubican y se jerarquizan las diversas maneras como el hombre ha venido determinado la naturaleza. Esta reconstrucción permite al tiempo hacer una historia del pensamiento humano, una historia del lenguaje humano y una historia de los fundamentos de la experiencia y de la cultura. La fenomenología es la ciencia de la experiencia de la conciencia pero también una historia de las determinaciones, es decir del modo como los hombres han determinado una misma entidad externa como objeto, en distintas direcciones. De esta manera, el método no se puede reducir a un simple camino cómodo de designación y tampoco al supuesto que exista un método exclusivo, sino al proceso intimo de cada objeto, a su estructura esencial. Los métodos ahora históricos, serán abordados en su contexto y con ellos se podrá observar el modo como las distintas épocas han determinando sus experiencias y su realidad y objetividad. Mas allá de los límites de la experiencia no existe nada. Pero si existen, mas allá de una época precisa, las anteriores, es decir la cultura producida por otros hombres con diversas formas de conocer, estructuras disímiles de objetividad, producto de las experiencias históricas, las cuales posee cada hombre, ahora convertidas en lenguaje para las generaciones que le siguen24. Lo anterior quiere decir que se continúa con el espíritu del proyecto kantiano ahora incorporando la historia del lenguaje humano y las antinomias que este ha devenido no como contradicciones sino como parte del proceso.

La visión dialéctica del conocimiento hace histórico entonces el postulado kantiano y de esta forma llama la atención sobre la necesidad de entender que un objeto es una síntesis compleja de determinaciones. Existen muchas mas cosas en juego en el contenido de un objeto más allá de su simple presencia ante los ojos. Estamos aquí frente a la dialéctica de los concreto25.

El proceso metodológico no termina aquí y es indispensable estudiar un nuevo aspecto que hace referencia al tipo de relaciones concretas que construye el hombre con la naturaleza (formas de producción, acceso a recursos) y a las articulaciones sociales que éste ha construido en un espacio geográfico preciso en una época determinada. El método en este caso amplía una nueva relación que incluye a las anteriores y ubica todas las determinaciones anteriores como construcciones humanas en estratos y planos, aún en el caso que el hombre mismo no se de cuenta.

Pero el método no puede captar intuitivamente la riqueza compleja de estas históricas concreciones de modo inmediato. Es indispensable iniciar el trabajo de investigación por lo abstracto. Es necesario dar todos los rodeos y recoger todos los datos de un modo desarticulado. Sólo con una amplia y rigurosa capacidad de síntesis se podrán ir articulando en el pensamiento y en procesos – en aproximaciones sucesivas- las diversas cualidades de un objeto, para dar cuenta en el pensamiento de su sentido y función. Este último proceso metodológico es asunto del futuro.

Es por ahora indispensable reconocer que en algunos objetos de conocimiento y de investigación el trabajo se reduce a la documentación sistemática de su hallazgo26. Sólo en el futuro se podrán articular las diversas fuentes de conocimiento y expresar de modo crítico el sentido y función de tales investigaciones. Las limitaciones actuales no impiden que los estudios de los investigadores observen el horizonte desde el cual deben asumirse las investigaciones en el futuro. El objeto de toda esta exposición es poner de relieve la necesidad de fundamentación que requieren los estudios del arte y particularmente del arte rupestre. No basta con el desarrollo de cientos de analogías derivadas del sentido común. Es esencial que se reflexione sobre todas las cualidades que están en juego, una de las cuales es la derivada de las discusiones epistemologías que casi siempre son aplazadas por los investigadores, aspecto este que normalmente produce un trabajo de ingenuidad premoderna.

Los métodos contemporáneos continúan teniendo este tipo de estructura utópica. Las discusiones entre escuelas filosóficas continúan generando diversos temas y orientaciones en las disciplinas científicas27. Pero ahora las disciplinas científicas también han venido contribuyendo a ampliar y determinar con mayor grado de resolución diversos espacios, con los cuales se definen los objetos de cada una de las disciplinas. Los refinamientos producidos en ciencias básicas, el aporte de las discusiones y los desarrollos epistemológicos28 han llevado nuevamente a la comunidad de investigadores del arte rupestre del paleolítico a la revisión de sus postulados frente al común modo de determinar las etapas y las consecuencias de sus hallazgos. El investigador Jean Clottes,29 al reseñar las investigaciones actuales en el paleolítico ha informado publica e internacionalmente30 que es indispensable revisar nuevamente los supuestos y tener menos ingenuidad y mas prudencia en el manejo de los datos, los cuales al parecer deberán ser articulados en otra forma. Los conocimientos sobre el sentido y función del arte del período glacial han sido revisados y muy pocas de las teorías se sostienen actualmente. Al lado de estos procesos críticos, se han venido ubicando nuevas zonas31 y estas han afirmado la dificultad de prolongar las teorías supuestamente seguras de comienzos de siglo.

La investigación del arte y particularmente del arte rupestre ha pasado por algunas de estas etapas aquí descritas, y sus desarrollos no homogéneos se pueden observar en las diferencias de enfoque y en las discusiones históricas, como en el uso de tecnologías diversas. Los trabajos de Khün(1965), Ucko(1967), Odak(1991), Murphy(1990), Bednarick, entre otros, permiten ver el modo como desde el siglo pasado se han venido discutiendo distintos caminos para explicar el sentido y función de las manifestaciones rupestres. Después de superar las épocas del tanteo los diversos equipos parecen conformarse por años en un trabajo de documentación rigurosa y de descripción de alto grado de resolución, esperando que otras fuentes documentales puedan articularse, con nuevos elementos. Los aspectos dialécticos advertidos, la arqueología procesual, la lingüística, abren camino en los países desarrollados para expresar en el arte rupestre nuevas articulaciones. Pero en general el acuerdo internacional parece coincidir con el interés por construir una amplia estructura documental, derivada de los trabajos de cada región y continente, con el proyecto de construir lentamente y hacia el futuro una imagen menos distorsionada que aquella que se produjo en los primeros procesos de investigación en los comienzos de siglo. Al lado de estos aspectos el trabajo de conservación constituye igualmente una tendencia internacional.

En nuestro medio por ahora es esencial imaginar un método lo mas preciso posible que describa los hallazgos y estos sean reseñados con procedimientos modernos, superando así nuestras tradiciones y limitaciones histórico culturales.

. El método en Arte Rupestre

Breve Historia:

Solo hasta comienzos de siglo el tema rupestre encuentra la acogida real en la academia científica. Con la declaración de Emile Cartailhac sobre su escepticismo anterior32 puede el arte rupestre ser incorporado en las preguntas y temas de la comunidad científica. De año en año se acumulan los sitios rupestres en todo el mundo, pero esencialmente estos descubrimientos son resaltados y promovidos en las cuevas europeas. Cientos de descripciones se hacen de los sitios y cada denuncio se llena de detalles con relación a la belleza, a la majestuosidad del sitio, de las galerías, a la calidad de los trazos, a la extraordinaria conservación de los pigmentos, a las formas y a la extraña y alarmante edad de tales representaciones, pero muy poco sobre el sentido y función de las representaciones, muy poco en contenido científico. Usualmente estos informes están impregnados innecesariamente por los juicios y prejuicios de la época ( Khün, 1965).

Una etapa esencial de este proceso la constituye el prejuicio premoderno frente al arte rupestre del periodo glacial como la reproducción de algunos aspectos de la realidad observada por los autores de estas obras. Cuando se revisan ahora con cuidado los textos de divulgación se puede apreciar que en ellos siempre se produce un tipo de información reiterativa sobre la presencia de ciertos trazos que incomodan a los investigadores, pues estos no coinciden con sus preconcepciones. "Macarrones", "tectiformes", son términos usados para describir las figuras, que no corresponden a ningún objeto conocido33. Se trata en casi todos los casos de formas que contrastan con las figuras de animales34, cuya tendencia hace que los investigadores se sobresalten frente a estas ininteligibles rayas. Con ciertas hipótesis ahora muy discutidas los investigadores de comienzos de siglo les ubicaron en los comienzos del sistema de re-presentación rupestre, es decir en las etapas más arcaicas del arte, dejando así sentados los primeros intentos de periodización. Sin embargo, cuando en otras zonas se descubren otras cuevas que se sitúan en épocas más recientes, nuevamente vuelven a aparecer estos eventos problemáticos de rayas y trazos simplificados e incomprensibles.

La interpretación de la época no permitió advertir la inconsistencia de las teorías y periodizaciones y mucho menos la precariedad de los argumentos que estos sistemas explicativos contenían. Hábilmente se ubicó este tipo de nuevas estructuras "tectiformes" en la llamada decadencia del período clásico. Así que por años se imaginó que estas formas de representación llegaron a la cúspide pasando por un proceso de intentos de representar algo sin la capacidad técnica, que fue adquiriéndose y que produjo el refinamiento de las formas conocidas de los animales representados en volumen y en movimiento. Una etapa preparatoria, que no podía reproducir los animales en su casi condición fotográfica dio paso a una etapa que reproducía con calidad innegable los atributos de los animales, para caer nuevamente en una etapa posterior de trazos nuevamente precarios e inconsistentes.

Así, los interpretes de estos hallazgos acomodaron los eventos a las teorías que preconcebían, dejando en la historia de la investigación el recuerdo de cómo un método, un aspecto teórico puede deformar la realidad de un documento y desconocer las evidencias al pasarlas por alto.

Simultáneamente a esta manera de exponer los posibles períodos del arte, se expusieron los temas que explicaban la necesidad de representar animales. Se decía que estos eran indispensables pues eran el alimento, que existía una relación competitiva con ellos. Al mismo tiempo, se diseño la temática relativa a la magia y la ritualidad. Por muchos años se expuso la tesis que defendía el modo como los hombres del período glacial pintaban en las cavernas los animales de sus apetitos y con estas representaciones exorcizaban sus cualidades y atrapaban en esta figuración las opciones de la cacería. Cualquier hallazgo era puesto en la estructura y aquellos que no coincidían se dejaban de lado. Los leones, los rinocerontes, las aves, al igual que los trazos indescifrables fueron entonces escondidos.

En los últimos diez años se han venido revisando los temas tradicionales obligados por los hallazgos en Chauvet y en Cosquer. Esencialmente se trata de un conjunto de galerías que contienen figuras de animales, pero algunos de ellos no parecen coincidir con las ideas convencionales expuestas por Breuil, Leroi-Gourham. Búhos, focas, leones insectos son representados en detalle y son en estos yacimientos rupestres el centro de las representaciones. En los últimos años se hacen preguntas mas contemporáneas como aquellas que interrogan por el tipo de pensamientos que debieron estar a la base de estas representaciones. Un ejemplo lo constituye el investigador Murphy (1990) quien se detiene en la pintura de un caballo y pregunta por qué pintaban un caballo?

Algunos de estos temas producidos en los comienzos de siglo generaron cientos de prejuicios que perjudicaron la investigación en otras direcciones y generaron criterios que descalificaban la necesidad de estudiar estas manifestaciones en otros continentes y países. Se suponía que el arte rupestre americano o pertenecía al período más arcaico o estaba ubicado en las etapas de la decadencia, es decir en la etapa donde los hombres habían perdido las habilidades de hacer aquellas bellas pinturas que habían hecho en Europa y que no podían ahora hacer en América. Se necesitó que el proceso investigativo se ampliara y que los académicos pudieran mostrar como existían en América desarrollos diversos para que las tesis, advertidas anteriormente fueran revaluadas. Los estudios de paleoindio, las nuevas investigaciones sobre las etnias al tiempo que los trabajos realizados en Europa fueron mostrando que la hipótesis general del difusionismo cultural era demasiado amplia para explicar ciertos y particulares desarrollos en áreas especificas.

Pero aunque en el territorio de las investigaciones arqueológicas se producía una mayor prudencia en la interpretación en las investigaciones y teorizaciones, en la teoría del arte se conservaron por años las implicaciones y las temáticas advertidas anteriormente.

Las discusiones mas importantes se inician en la literatura especializada con las obras de Ucko-Rosenfeld(1967) y Khün (1965). En el primer caso se reseñan las teorías y se muestras sus limitaciones, al verse derivadas de hipótesis generales y del abuso de los paralelos etnográficos. En el segundo, caso se observa el modo como las teorías filosóficas y el ambiente intelectual europeo ha determinado curiosamente el modo como las interpretaciones se han venido produciendo por su influencia. En el trabajo del Arte del período Glacial (Khun,1965), y en el Arte paleolítico (Ukco-Rosenfeld, 1967) se puede observar como las discusiones culturales y con ellas las disputas filosóficas han impregnado la forma como se abordan los temas en las disciplinas y con estas, el modo como el arte y el arte rupestre se ha distorsionado como resultado de intereses no siempre racionales. Según Ucko existen mas de cien posibles razones por las cuales algunos grupos humanos se dedicaron a hacer pinturas en las cavernas. Frente a este llamado a la cordura la historia de la investigación tuvo que pasar por múltiples de intentos y aproximaciones, derivadas en algunos caso por el azar y la casualidad.

El estudio del arte rupestre se inicia con la curiosa y desconcertante presencia de pequeñas piezas en marfil que ocasionalmente aparecían en las galerías de objetos viejos y exóticos35. El proceso de investigación se inicia con objetos de carácter mobiliar en los cuales aparecen representados formas de animales. Así que la investigación comienza por una de las manifestaciones humanas más difíciles de precisar, pues es imposible reconstruir arqueológicamente su contexto, y en algunos casos saber siquiera en que sitio de Europa fue hallado. Se trataba en realidad de piezas sueltas de coleccionista normalmente adquiridas en almacenes de curiosidades. Algunos consideraron que se trataba de antiguos objetos de etapas anteriores a las griegas, pero en ningún caso, se imaginaron que fueran más antiguas y mucho menos de períodos tan remotos, pues estos no existían en la cabeza de los investigadores.

Así que el objeto en cuanto tal interrumpió la comodidad de las teorías sobre la historia y la prehistoria al generar por sobre todo conflictos con la fauna presente en la naturaleza y el contraste de esta con la fauna que aparecía en las piezas de marfil. Hasta la supuesta capacidad de pintar naturalmente los animales es cuestionada por los investigadores actuales.

Aunque el texto de Ucko es efectuado en la primera década de los años cincuenta, allí se pone de manifiesto en carácter no naturalista de los trazos presentes en las pinturas europeas del paleolítico superior. En realidad no aparece el paisaje y los animales no se encuentran en posiciones correctas en el sentido de la proporción y algunas figuras se encuentran cabeza arriba, y no tienen la misma escala. Todo lo anterior hace pensar a Ucko que se trata de una interpretación hecha por los pintores y no un mero trabajo "fotográfico" como siempre se ha promovido.

Durante muchos años los investigadores han venido informando sobre la presencia de sitios y copiando algunas de sus particularidades. Con el uso de la tecnología se han podido registrar con mayor precisión algunos de estos hallazgos. Pero lo común es que el investigador se interese por fragmentar los murales y usar con cierta perversión algunos de los trazos con el fin de obligar a que sus ejemplos sean coherentes con sus teorías, tal y como sucedía en el pasado de la historia de la investigación. Este procedimiento perverso ha sido criticado intensamente en las reuniones internacionales y se ha invitado a los colegas a hacer el mayor número de registros rigurosos, con el fin de evitar que los grupos y personas aficionadas y sin ninguna tradición puedan exponer irrespetuosamente sus ideas para generar como usualmente sucede con la arqueología ficción (Schobinger, )36.

En la actualidad son muy pocas las versiones que se apresuran a dar las posibles explicaciones sobre el sentido y función y la tendencia honrada de los investigadores es dedicada al trabajo documental sistemático. El proyecto internacional de arte rupestre de la Federación internacional de organizaciones de arte rupestre (IFRAO) es tener conciencia de que los originales son mucho mas importantes que las posibles versiones de los investigadores, que en la mayoría de los casos por querer tener su documento generan trabajos de registro invasivo, que deteriora los sitios.

A pesar de esta tendencia existen sin embargo grupos de trabajo internacional que se interesan en las posibles conexiones que el arte rupestre puede tener con las tradiciones de los grupos étnicos de una región o de un territorio. Pero igualmente se evitan en lo posible apresurar teorías como se hacia en el pasado. Publicaciones de diferente orden37 y con perspectivas diversas, han venido educando a los investigadores generando una profesión especializada que pretende unificar sistemas de trabajo, los cuales se discuten actualmente.

Modelo metodológico

La construcción de un modelo metodológico por lo tanto no es solamente un asunto técnico resultado del aporte de las ciencias básicas y de los desarrollos cibernéticos. Tampoco es simplemente un procedimiento ordenado de sistematización de la información sobre un tema determinado. El proceso metodológico debe incluir sin duda lo anterior, pero además, debe ser un organismo teórico que incorpore y de cuenta de las inconsistencias de investigaciones anteriores, muestre los límites de los métodos convencionales, y permita ver el modo como estos antecedentes lo determinan. Lo metodológico debe discriminar todas las cualidades que están en juego y develarlas en lo posible.

Una de estas cualidades es la historia, pues la reflexión sobre el pasado permite relativizar los supuestos de la tradición y mostrar en toda su simplicidad los nuevos criterios producto de un desarrollo reflexivo continuo, que transforma el objeto, lo hace mas complejo. Esta reflexión incluye las transformaciones del sistema de percibir, es decir las variaciones en las nociones, representaciones y conceptos del investigador.

No solamente cuenta la historia de la investigación del objeto en sus límites estrechos para una zona, región, departamento e incluso país. Es necesario reconocer la influencia de las categorías, de las perspectivas, los términos y los temas producidos en la historia del arte y del arte rupestre a nivel internacional, por ejemplo, en Europa, para el estudio del paleolítico superior y con ello la presencia de categorías y sistemas de explicación que se adhieren al tema como factores en nuestro medio, sin sospechar que son hipótesis generales, que sin ser universales (discusiones ajenas), han impedido tener una comprensión plena del sentido singular de las manifestaciones estéticas en procesos singulares en Colombia.

En relación con el arte rupestre nacional es necesario mostrar los procesos con los cuales este modelo metodológico, que aquí se expone, se fue construyendo como resultado de la dinámica producida al confrontar los antecedentes de investigación y con estos la producción de una síntesis de evaluación de los procedimientos tradicionales y la valoración cuando es del caso, de los logros de las investigaciones clásicas. Con este propósito desde 1981 en el Primer Seminario de las Culturas del Altiplano1 se presentó una primera versión de la historia de la investigación en arte rupestre en Colombia, con el objetivo de mostrar el modo como se ha construido este objeto, es decir la manera como las diversas etapas histórico culturales en Colombia han ido afrontando el estudio de la cultura y en particular del arte rupestre. Las discusiones nacionales presentes en las reflexiones históricas, antropológicas, al igual que las políticas educativas, constituyen el espacio en el cual se ha venido desarrollando el acento o el descuido en éste o aquel tema de investigación.

El proceso de exposición en este informe pretende ordenar por temas las diversas opciones de un estudio en arte rupestre. El orden de exposición de rocas tipo, escogidas en diversas regiones será desarrollado mostrando de lo simple a lo complejo, los fundamentos de cada etapa y los progresos en cada una de estas, los cuales incluyen los denuncios ocasionales, las descripciones precarias hasta los trabajos que tienen la pretensión de ampliar investigaciones y mostrar el desarrollo de nuevos rumbos de investigación en un tipo los trabajos sistemáticos y regionales. Así pues, orígenes, desarrollo, investigaciones y conservación, componen cuatro grandes fases o etapas La exposición del material trabajado deberá presentar los documentos que han sido ya «registrados» por investigadores anteriores, quienes han dado una versión sobre los sitios y sobre los trazos presentes en los murales. De esta manera, se cumple con un estudio que tiene en cuenta la historia, los antecedentes de investigación y que se detiene a pensar en los criterios usados en estas etapas. El propósito es mostrar críticamente las deficiencias y las limitaciones de estos trabajos denominados clásicos en arte rupestre. Como una segunda etapa, se debe exponer aquellas zonas y sus respectivas rocas producto de trabajos de campo que muestran la riqueza en diferentes sectores y los hallazgos. Con estas rocas y zonas, se pretende informar a la comunidad científica de algunos procedimientos nuevos en el estudio y análisis de los sistemas de registro (ficha de roca 1976-1990-2000) e igualmente hacer posible que se observe el proceso de cambios y temas inalterados, que ha usado GIPRI en los procesos de descripción y estudio de yacimientos rupestres. El objetivo es que la comunidad científica pueda cotejar los procesos de cambio que ha venido estructurando y desarrollando este equipo de investigación en los últimos 20 años.

Una tercera etapa de exposición corresponde a los trabajos de registro sistemático de zonas rupestres, a una nueva y reciente metodología que ha creído conveniente dejar de lado el registro ocasional de una roca o rocas (rocas supuestamente representativas) para dedicarse expresamente a trabajar sistemáticamente y con minuciosidad en un municipio, una amplia área determinada, en una región y con ella hacer preguntas muy precisas (temas de investigación) sobre las concentraciones rupestres y sus correlaciones con otros hallazgos (afiladores, metates, fragmentos cerámicos, documentos arqueológicos de otras fuentes documentales) y abrir así las opciones que permitan cotejar los hallazgos rupestres con otros desarrollos producidos en las investigaciones arqueológicas y etnohistóricas. Este trabajo sistemático de registro regional se hace con exigencias y con espacios de trabajo muy amplios, con financiaciones a largo plazo, con el apoyo en materiales, equipos y con un grupo de trabajo estable que en no menos de 5 años pueda dedicarse al tema y a una zona para producir periódicamente informes técnicos, al igual que desarrollar nuevas tesis y estrategias para agilizar y mejorar las etapas de trabajo. Una fase final de trabajo del estudio regional hace referencia a los estudios del bioclima, del paleoclima y de los deterioros sufridos por la intemperie. Una nueva ficha de alteraciones y factores de alteración debe estar siempre incluida en los reportes serios de arte rupestre.

Finalmente una propuesta de trabajo de registro de las alteraciones permitirá tener una estructura documental completa sobre el estado en que se encuentran actualmente las zonas y las rocas con sus pigmentos y sus trazos. Este modelo será discutido en Australia en la reunión de IFRAO del año 2000.

No basta con tener un trabajo descriptivo que discrimine con delicadeza y reseñe con alta resolución los aspectos más singulares de una roca y con ella represente los detalles de cada uno de los eventos rupestres presentes. Es indispensable tener en cuenta que el original es sin duda la fuente primordial. No es suficiente con desarrollar estrategias de registro y documentación lo más sutiles, es fundamental cuidar el original y crear estrategias diversas para que sean conservados los sitios rupestres. Resulta irresponsable el investigador que no se detiene a reseñar las alteraciones y los procesos de deterioro que viven los sitios rupestres y se ocupe como tradicionalmente se hace en copiar los «dibujos» para intentar relacionarlos con su “etnia respectiva” o para desarrollar “teorías estéticas”. El relieve, el clima, la ubicación geográfica, son ahora estructuras, que articuladas con los sitios rupestres, permiten reconstruir en fases y aproximaciones sucesivas el contexto de estos eventos. Sin estos estudios es un simple aspecto abstracto.

Con esta nueva manera de trabajar, se organiza un criterio metodológico menos casual y mas cercano al posible camino de explicación del sentido y función del arte rupestre en Colombia. La ficha de campo, la ficha de roca, la ficha de zona, la ficha de eventos rupestres asociados (afiladores, metates, morteros) y los datos producidos por la recolección superficial de muestras cerámicas, de líticos, constituye un conjunto de cualidades documentales básicas para que el país pueda iniciar la reconstrucción de este patrimonio inmueble y en distintas etapas y fases de investigación pueda darse cuenta del mundo estético y cultural producido por las comunidades precolombinas. Cuando una amplia zona sea cartografiada, sin dejar de lado los aspectos «no representativos» y se pueda cotejar esta información con fuentes diversas de otros trabajos en la región, se podrá decir algo serio sobre arte rupestre.

Una fase posterior deberá crear las políticas que impulsen desde las universidades y desde los centros culturales las etapas de diseminación y divulgación de los procedimientos de manejo de las regiones que deberán ser cuidadas. Es indispensable contemplar que es necesario educar en la provincia a los habitantes para impedir la destrucción de los sitios.

Después de 30 años de investigación el equipo de GIPRI ha podido estabilizar algunas perspectivas teórico metodológicas, con las cuales pretende orientar y unificar criterios para investigar y asesorar a otros grupos nacionales sobre el estudio, y conservación de cientos de zonas rupestres que tiene el país. Los hallazgos de 36 murales en Chiribiquete (Castaño, 1998), las 155 rocas de la zona sur de la Sabana de Bogotá, las 800 rocas de El Colegio en 25 veredas de un total de 44(GIPRI, 1998), las pictografías de Sutatausa y su articulación con los textiles, los hallazgos del grupo colombo francés (fig. 1), el desarrollo de las investigaciones habituales en el altiplano Cundiboyacense y la organización de un modelo metodológico para el estudio y registro regional sistemático del arte rupestre, son al igual que las perspectivas metodológicas en los estudios etnohistóricos y de tradición oral, avances significativos que se ponen a consideración de la comunidad internacional de investigadores.

Siempre ha sido una preocupación reflexionar sobre la historia de la investigación en arte y en arte rupestre, no sólo en el marco estrecho de las condiciones del país, sino frente a los vaivenes a los cuales ha estado expuesto este tema, al proceso categorial y las perspectivas y fundamentos desde los cuales se ha estudiado este fenómeno tan complejo. Hace algunos años, igual que otros grupos, se pensaba que era suficiente con la descripción organizada de los eventos presentes en los petroglifos y en las pictografías. Hoy ya no es posible imaginar un trabajo de tipologías sin advertir que en ellas debe existir un fundamento mas allá de las fáciles analogías formales. Es indispensable dar un rodeo y sustantivar los trazos con su contexto histórico y cultural5. Éste hace referencia inicialmente al estudio riguroso de una zona, a su descripción cartográfica, a la reconstrucción de su paisaje y a factores que a primera vista parecerían ser asunto de otras disciplinas. Todas las evidencias arqueológicas deberán coleccionarse en un primer nivel de modo desarticulado, pero poco a poco con el uso de fuentes diversas se proyectará una visión orgánica del proceso. No basta con asumir una metodología que auxilie el trámite de la investigación y salve el estudio desde un punto de vista. Es indispensable que el grupo de investigación asuma una perspectiva compleja y observe la presencia y las cualidades de distintos procesos: que articule todos los posibles puntos de vista y con ellos pueda presentar una imagen menos apresurada y mas reflexiva del arte rupestre colombiano. En este proceso no sólo se transforman las primeras impresiones , sino que los investigadores adquieren menos ingenuidad en el manejo categorial y en la determinación de lo significativo y de lo relevante.

Atentos a los desarrollos de las discusiones internacionales, a todos sus matices, presentes en las recomendaciones para su estudio y cuidado, el equipo de GIPRI ha pasado por diversas etapas , siempre con el objetivo de poder dar justamente una respuesta racional al sentido y función de las representaciones rupestres. Los procesos de registro sistemático de zonas han obligado a ampliar el número de fichas de registro y documentación: de zona, de talleres de herramientas (eventos rupestres asociados), de factores de alteración y deterioros. Todas estas derivaciones con el objetivo de acceder con mas precisión a los aspectos conexos con el arte rupestre de una región estudiada. Este último proceso de reactualización de la ficha de registro se realiza en la actualidad dentro de la beca de investigación bajo el título de Modelo Metodológico para Recuperar y Catalogar el Patrimonio Rupestre Inmueble Colombiano, dentro del programa de GIPRI denominado Plan Nacional de Documentación y Conservación de Arte rupestre Colombiano. Algunos de los aspectos aquí enunciados provienen de los desarrollos teórico–prácticos producidos por la cátedra de arte rupestre y por las experiencias logradas en las investigaciones de GIPRI en 1996-1999.

7.Cierta desconfianza por el conocimiento producido en la época moderna, producto de nuevas relaciones, facilitó la construcción de un conjunto de criterios determinados como método.

8.La investigación de Heidegger, Kofler, Kosik, desde distintas perspectivas muestran que la esencia de la ciencia e incluso de la técnica proviene de los fundamentos modernos. La época de la imagen del mundo, y la secularización de la naturaleza, son algunos de los temas que permiten exponer estas consideraciones.

9.La Sociología del Renacimiento de Alfred Von Martin expone como la sociedad moderna frente a la comunidad medieval cambió todos los ámbitos de la vida y organizó las relaciones de los hombres, ahora bajo el criterio del valor de cambio.

10.También el mundo político-jurídico encuentra en este mismo espacio social de la modernidad estructuras de método para hacer el gobierno de la república o el gobierno del principado. Un ejemplo de este temperamento metodológico se encuentra en la obra de Maquiavelo. También en la física, Galileo aporta con un nuevo método en la exposición del fundamento del mundo físico y su esencia matemática.

11.Descartes,1998 (Pág.. 19-20)

12.Ver Reglas del Método. Descartes, 1998

13.Todo lo anterior creo una imagen optimista del papel de la geometría en la descripción de la realidad. Se suponía que la naturaleza estaba construida igualmente con criterios geométricos.

14. Frente a un mundo cerrado, la modernidad presenta la propuesta de un universo infinito . ver Koyré Alexander. Del Mundo cerrado al universo infinito.1978

15. Las nociones usadas para describir las actividades prácticas (trabajo de campo, talleres, trabajo en laboratorio se derivan de estas categorías modernas Baconianas.

16. Con el título de Reglas para la dirección del espíritu Descartes muestra que el criterio es la subjetividad que ha adquirido sus propias certezas frente al mundo. El camino medieval y premoderno en general se ve con estos nuevos fundamentos superado.

17.Esta dinámica debe ser estudiada en los países de la periferia del orden científico mundial. En Colombia el acento durante décadas se ha hecho en la educación confesional y dogmática de las transformaciones escolásticas.

18. Kant reseña esta situación en el prólogo de la Crítica de la Razón Pura. Allí muestra como se genera una confusión que paraliza al pensamiento cuando este usa sin discriminación ninguna diversos principios, sin saber de dónde provienen.

19. Prólogo de la primera edición de la Crítica de la Razón Pura, Kant, 1781

20.Basta con revisar esta misma estructura en la obra de Popper. La imposibilidad del conocimiento científico por inducción. De igual modo, ya no es posible imaginar un conocimiento sin el contacto con los objetos

21. Este será el punto de vista del filosofo E. Kant en su obra de la Crítica de la Razón Pura, como un esfuerzo por superar las contradicciones presentes en los criterios de objetividad antes de 1781.

22. “La razón debe acudir a la naturaleza llevando en una mano sus principios, según los cuales tan sólo los fenómenos concordantes pueden tener valor de leyes, y en la otra el experimento, pensado según aquellos principios; así conseguirá ser instruida por la naturaleza, mas no en calidad de discípulo que escucha todo lo que el maestro quiere, sino en la de juez autorizado, que obliga a los testigos a contestar a las preguntas que les hace”.E. Kant. Crítica de la razón Pura  segundo prólogo.

23. El desarrollo del idealismo alemán debe entenderse como la determinación minuciosa del carácter del yo pienso

24.Este aspecto moderno fue reseñado por Descartes al advertir que otros grupos humanos que el veía como extravagantes y ridículas en sus costumbres, son formas humanas legítimas y genuinas, aún en el caso de paracer como extrañas.

25.Investigación contemporánea de Karl Kosik en Dialéctica de lo Concreto.

26.En la actualidad el trabajo de ubicación y registro del arte rupestre parece ser lo esencial. Pasada esta etapa se pondrán en marcha los otros temas expuestos.

27.Popper, Witgenstein, Russel, Benjamin, Adorno. Marcuse ,entre otros, constituyen algunos de los autores cuyas disputas han generado implicaciones metodológicas en las ciencias sociales.

28. Filosofías de la ciencia, discusiones sobre ciencias básicas y fundamentos epistemológicos

29. Director de Patrimonio de Francia e investigador en arte rupestre.

30. Congreso Internacional de arte rupestre Cochabamba,Bolivia 1997.

31.En Coa (Portugal), Rusia, Francia (Chauvet y Cosquer)

32.Este autor había descalificado y desprestigiado el hallazgo del conde Marcelino de Sautuola en 1879. Sólo hasta comienzos de siglo, ahora con cientos de evidencias se reconoce la autenticidad de los argumentos y la veracidad de las inquietudes frente a la antigüedad de la cueva de Altamira. Mea culpa d´un sceptique fue el subtítulo del artículo publicado en la revista de mayor difusión L´Anthropologie de París en 1902.

33.Según Ucko-Rosenfeld estas representaciones “pueden agruparse como signos (y que incluyen ciertas variantes clasificadas con los nombres de tectiformes, penniformes, etc).

34.Mamuts, bisontes, leones, aves, caballos, rinocerontes son descritos.

35. Los hallazgos ocasionales en las cuevas fueron llevados exposiciones y mostrados en el siglo pasado como objetos curiosos.

36.Investigador argentino que reseña críticamente el escandaloso éxito de la arqueología de ficción entre los cuales cita a E. Von Daniken

37.International news letter in Rock Art (INORA), Rock art Research, Pintura , Boletín Siarb, Tracce on line, Rupestre, entre otras no sólo publican profusamente los trabajos de cada región y los hallazgos internacionales, sino que algunas de estas tienen además una capacidad insospechada de manejo en internet.


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