I Congreso Virtual sobre Turismo Cultural-NAyA
Conclusiones
- Documento de Propuestas
El I Congreso Virtual Internacional de Turismo Cultural organizado
por Noticias de Antropología y Arqueología (NAyA) durante el mes
de octubre, coordinado por antropólogos y especialistas en turismo,
permitió enriquecer la discusión sobre las perspectivas del tema.
El congreso, se estableció sobre la base de algunas de las posibilidades
que brindan las nuevas tecnologías, favoreció el intercambio entre
científicos sociales, profesionales, estudiantes y políticos para
discutir e intercambiar ideas y experiencias, desde lugares como
Chile, Colombia, Guatemala, España, México, Perú, Portugal, Venezuela,
Brasil y Argentina.
A partir del Programa
de Comunicación Cultural-NAyA entendemos "que el turismo es
un fenómeno social de características tan amplias y diversas que
debe ser estudiado desde una óptica multidisciplinaria (también
transdisciplinaria), en tanto constituye una actividad que sobrepasa
el imaginario de todas las clases. Si bien la mayoría no puede concretar
viajes con fines turísticos, es responsable del desplazamiento creciente
en los últimos tiempos de un número sin precedentes de personas
de un país a otro o de una ciudad a otra, donde se constituyen en
residentes temporarios. Junto con los medios de comunicación ha
sido en gran medida responsable de la globalización de la cultura
y ha demostrado su amplia y beneficiosa capacidad para ser utilizado
en la mejora de diversas actividades que pueden contribuir al enriquecimiento
cultural de la sociedad, así como también para adquirir educación,
resolver problemas sociales, y preservar el patrimonio cultural
y turístico de un pueblo o nación, entre otras cuestiones.
El turismo se
ha presentado, desde los años 70, como capaz de viabilizar soluciones
para problemas económicos y sociales. En él cifran los países subdesarrollados
sus esperanzas de desarrollo y los teóricos, las esperanzas de que
sirva de vehículo para la comprensión entre los seres humanos.
No obstante, entre
el discurso de la turismología sobre lo que el turismo debería y
podría ser y la evidencia empírica de lo que es (de acuerdo con
las investigaciones científicas sobre este fenómeno) hay pocas coincidencias.
¿Qué está pasando con el turismo? ¿Qué impactos ocasiona en la sociedad
receptora? ¿Qué pasa en las sociedades emisoras que generan las
condiciones para que el turista frecuentemente se comporte como
un predador cuando sale de su medio? ¿Existe intercambio cultural
entre visitante y visitado? ¿Cuales son los impactos de los residentes
temporarios en el cotidiano de los residentes permanentes?, ¿Cuáles
han sido las contribuciones efectivas del turismo al enriquecimiento
cultural de los turistas y de las poblaciones anfitrionas? ¿Cuáles
son las semejanzas entre turismo y migraciones a la luz de los mecanismos
de evasión? ¿Cómo reaccionan las poblaciones anfitrionas a los diferentes
tipos de turistas?, ¿Cuáles son los mitos construidos en torno del
turismo? ¿Puede el turismo contribuir con la preservación del patrimonio?
¿Cuáles son los efectos del turismo en las identidades locales?.
Estos son algunos
de los temas discutidos tanto en el I Congreso Virtual de Turismo
Cultural así como en las instancias presenciales del I Encuentro
de Turismo Cultural desarrollado en la ciudad de Salta (agosto de
2001) y en las charlas en el Museo José Hernández sobre "Museos
y Turismo: aliados en permanente crecimiento".
Creemos que estos
deben ser discutidos con la participación de todos los
sectores involucrados en el tema. Las ponencias a dicho congreso
permitieron una discusión sobre problemáticas reales. Considerar
lo ya hecho evaluando posibilidades, dificultades y aciertos hace
que nuestra propuesta se muestre desde lo factible. De allí, algunas
necesidades detectadas:
- No solo debatir
y conocer que se hace desde la práctica y la investigación sino
construir espacios comunes de trabajo enfocados a analizar el turismo
desde una totalidad.
- Es preciso que
quienes ejecuten políticas culturales para el turismo tengan en
cuenta la necesidad de asesorarse para planificar, organizar, administrar,
evaluar y difundir las actividades relacionadas con el turismo.
- Generar proyectos
de promoción multidisciplinaria que contemple otras formas de disfrutar
del turismo que involucre a todos los sectores del área.
- Promover los
análisis e investigaciones aplicadas para el área de turismo como
una necesidad básica para realizar además mejoramientos en los servicios.
- Realizar devoluciones
de los resultados de las investigaciones y posibilidades del turismo
cultural a las instituciones y a las comunidades como herramientas
para acciones planificadas.
- Planificar y
organizar campañas de difusión del turismo cultural desde una perspectiva
integral de lo que es el turismo cultural.
- Agilizar el
sistema de información sobre el turismo y sus posibilidades.
- Realizar programas
para el área de educación patrimonial para apoyar el turismo.
- Promover las
producciones del turismo desde un política cultural integral que
valorice las producciones artísticas y artesanales.
- Promover la
concientización del patrimonio turístico apoyando programas de alfabetización
cultural.
- Establecer una
red de quienes trabajen en el área y deseen intercambiar opiniones
sobre los cambios que se están generando.
- Actualizar la
capacitación en forma integral para quienes estén trabajando en
las instituciones de turismo y para las comunidades.
Turismo cultural
en el marco de la propuesta del turismo sustentable
El desarrollo
turístico debe fundamentarse sobre criterios de sustentabilidad,
es decir, que debe beneficiar a todos los actores involucrados,
ser viable económicamente y equitativo, comercialmente rentable,
ecológicamente sostenible, socioculturalmente aceptable y que proporcione
un alto grado de satisfacción al turista.
Una propuesta
tal de turismo se propone desde :
- Proveer
mayor calidad de experiencia para el visitante.
- Mantener
la calidad del medio ambiente -natural y cultural- del que dependen
la población local y los turistas.
- Obtener
mayores niveles de rentabilidad económica de la actividad turística
para los residentes locales.
- Asegurar la obtención de beneficios
por parte de los empresarios turísticos, sobre todo
los pequeños empresarios
locales.
- Procurar que el negocio turístico sustentable
sea rentable, para que el sector privado mantenga el pacto de sustentabilidad
y equilibrio.
Ninguna propuesta
de turismo sustentable es viable sin un plan de manejo que considere
el entorno social y político en el que se inserta un bien. Aunque
para llevar a cabo el desarrollo, la ejecución y el seguimiento
de un plan de manejo es necesario considerar el apoyo financiero,
creemos que además deben tenerse en cuenta otros elementos que pueden
afectarlo positiva o negativamente. En esta situación entran en
juego diferentes protagonistas que representan intereses particulares
y pertenecen a sectores específicos:
- Sector Público
Lo integran fundamentalmente
las autoridades municipales y nacionales establecidas en la ciudad.
Es quien administra la mayoría de las actividades económicas desarrolladas
en el partido
[MB1]
: actúa como organismo fiscalizador,
interviene en la concesión de permisos, organiza eventos y apoya
determinados emprendimientos
- Sector Privado
La diferencia
con el sector público radica en que sus inversiones persiguen un
beneficio personal y no específicamente comunitario. Las personas
y emprendimientos involucrados son muy diversos y van desde artesanos,
pescadores, agentes turísticos hasta comerciantes y empresarios
hoteleros. Todos ellos son los que, en diversos grados, financian
la infraestructura apropiada para recibir a los visitantes en la
temporada turística. Cumplen un papel relevante en la economía local
ya que proveen la mayor cantidad de puestos de trabajo en la población
- Intereses culturales
Con "intereses
culturales" nos referimos a aquellas actividades, iniciativas,
eventos, expresiones o acontecimientos culturales que no sean de
carácter científico y que estén protagonizados por instituciones
o individuos de la comunidad.
-
Intereses Medioambientales
Se refiere
a la dimensión de la zona y del espacio
utilizable; a la fragilidad del medio ambiente;
a las características de la fauna;
a la topografía y cobertura vegetal;
y a lasensibilidad del comportamiento
de ciertas especies animales a las visitas humanas.
- Intereses Sociales
de la población local:
Se entiende
por esto que la renta por turismo esté concentrada
o equitativamente distribuida; y verificar el respeto a la
capacidad de carga percibida.
- Intereses Sociales de los turistas:
Se refiera
a la necesidad de propiciar
experiencias adecuadas a la expectativa de los turistas, respetando
su condición de consumidore, tomando en
cuenta la opinión de los visitantes: y la disponibilidad y calidad de las instalaciones.
Propuestas de
acción
a) Comunidades,
Identidad y turismo cultural:
Para un desarrollo
basado en el consenso de los actores, se debe promover la discusión
de los proyectos turísticos, especialmente con los posibles afectados
y en especial, discutir los impactos probables y las medidas alternativas
de mitigación si fuesen necesarias. Es necesario de nuevo plantear
estos problemas: ¿cómo percibe la comunidad al turismo en relación
son su identidad étnica?; ¿cuál es el punto de vista de los diversos
agentes y actores sociales?; ¿cómo se han planteado los criterios
sobre el manejo del negocio turístico y cómo se ejerce el poder
por cada uno de los actores?
Es necesario capacitar
a las comunidades para que entiendan la magnitud y complejidad de
la actividad turística, tanto cualitativa como cuantitativa.
La autorreflexión
sobre las representaciones culturales es un elemento básico en el
diseño de un proyecto, especialmente si trata de preservar los recursos
culturales autóctonos -simbólicos y sociales- y reducir la posibilidad
de una alienación a causa de un proyecto, o al menos limitar la
promoción de lo exótico que sólo beneficiaría a la empresa promotora
y al turista. El turismo cultural debe pasar primero por la voluntad
de las comunidades, eso quiere decir una comunidad bien informada,
a objeto de que el turismo contribuya a la unidad del pueblo y no
a la confusión como lo viene haciendo. Que el Estado y sector privado
en el ámbito turístico demuestre una participación más comprometida
con la cosmovisión de la comunidad receptora.
Garantizar los derechos culturales de los pueblos,
lo que no debe limitarse a la protección de su derecho a la expresión
cultural sino que debe también garantizar las bases materiales de
la existencia de las comunidades. Por esto es que hay que replantearse
la forma de distribuir las ganancias económicas que el turismo aporta
para que beneficie a las comunidades involucradas en el proceso.
Hay que reconocer además la autodeterminación de las comunidades
a participar o no de esta actividad, pues, por un lado, la presencia
de los turistas puede significar la alteración del ritmo de vida
tradicional, y, por otro, puede exigir, en determinado momento,
la "escenificación de su cultura", o sea, actuar de determinada
forma para satisfacer la expectativa de los turistas..
Exigir que las comunidades tengan derecho a la
libertad de conservar y recrear su cultura y adaptar sus formas
de expresión cultural y social a la nueva situación de mayor interacción
con el mundo que nos rodea. Nuestro pueblos no deben ser "zoologizados"
para una mayor venta de su cultura, sea por su exotismo o por su
pobreza. Deben participar activamente de los beneficios económicos
del turismo, y del progreso tecnológico que este puede traer si
así lo desean, y no ser tratados como fósiles vivientes para el
agrado de los turistas urbanos en busca de paraísos perdidos.
Permitir que las comunidades se beneficien con
programas educativos y de capacitación, para poder integrarse económica
y socialmente en el proceso de turistificación, profesionalizándose
en el trato a los turistas y aprendiendo técnicas empresariales.
En fin, que las comunidades locales no sean "atractivos"
turísticos, sino prestadores de servicios y propietarios de equipamientos
turísticos, actores plenos con inserción económica y social.
b) El viajero,
el visitante, el turista.
Surge el interrogante
por todas las percepciones que participan en la construcción de
espacios públicos, donde la diversidad de miradas y la relación
con el entorno genera trayectorias de transito, que pueden ser vistas
como portadoras de sentido y a la vez, significantes para otros
actores sociales involucrados. El viajero y las practicas de desplazamiento
contribuyen a la generación de nuevas percepciones sociales y usos
y apropiación de espacios públicos, a su vez, el viajero se convierte
en una forma social de comunicación, que al transitar por diversas
geográficas y ser portador de significados culturales, reconfiguran
practicas sociales.
Interesa conocer
el tipo de relación que establecen determinados sujetos con su entorno
urbano. El análisis de este objeto de estudio no puede entenderse
de manera aislada, sino que es necesario reflexionar en torno a
otros puntos centrales: la cantidad y calidad de servicios turísticos
que existen en cada municipio y el background de cada turista -la
información- que lo llevo a visitar determinado lugar.
Ciertamente, estudiar
al viajero y sus espacios sin tomar en cuenta los servicios turísticos
y el background de cada persona, es dejar de lado reflexiones fundamentales.
Patrimonio cultural y turismo
El patrimonio
histórico-cultural comprende todos aquellos elementos y manifestaciones
tangibles o intangibles producidos por las sociedades. En ocasiones,
la masificación del turismo conlleva a la transformación, el deterioro
y la destrucción de los recursos culturales. Siempre aparece como
más importante el interés económico de maximizar los beneficios,
que la adopción de medidas concretas de salvaguarda de los diversos
componentes que integran el patrimonio histórico-cultural.
La protección legal del patrimonio en todos los
casos dista mucho de ser aceptable. La depredación, la impunidad
y el desinterés no son síntomas positivos que puedan ayudarnos.
Esta problemática se desarrolla dentro de un contexto nacional en
el que no nos es ajena la precariedad con la que se sostienen las
políticas culturales. La comunidad que cobija las localidades arqueológicas
o que manifiesta algún tipo de lazo con las mismas, es quien tiene
mayores posibilidades de garantizar su existencia en el tiempo.
Por dicha razón, la comunicación entre arqueólogos, antropólogos
sociales, y demás científicos y la comunidad debe ser fluida y bidireccional.
Sólo un análisis de las características de la región en que se encuentra
un recurso de amenidad, donde se incluya a la comunidad, la infraestructura
y los intereses involucrados, junto con la naturaleza y particularidad
del recurso nos permitirá planificar una propuesta sustentable a
largo plazo. En base a esta información es posible aislar una serie
de variables pertinentes para el tratamiento de una región particular.
Considerando
esto el desarrollo sustentable propone estrategias diversificadas
que permitan mejorar la realidad social, política, económica y ambiental
especifica de cada lugar. Así el turismo, como uno de sus ejes de
acción, propuesto para algunas comunidades, puede preservar o revalorizar
elementos patrimoniales. En el marco de la sustentabilidad el turismo
plantea la necesidad de dar respuestas a las realidades locales.
La revalorización del patrimonio, ya sea cultural o natural, es
la respuesta que muchos destinos encuentran en procesos de cambio
y readaptación.
En torno a esto
los convenios y recomendaciones de la UNESCO se basan en las mejores
prácticas profesionales conocidas, con vistas a garantizar el mantenimiento
y la preservación del patrimonio cultural; formulando las reglas
para hacer frente a las amenazas contra el patrimonio cultural.
Es preciso sensibilizar a los gobiernos con respecto a ese importante
tesoro de la humanidad y sugieren los principios sobre los cuales
debe cimentarse la legislación nacional que deberá, por supuesto,
tener en cuenta la especificidad de los distintos patrimonios presentes
en cada país. Estos pretenden igualmente ayudar a los ciudadanos
que luchan contra proyectos inadecuados; y favorecen la constitución
de redes de profesionales de la cultura, que pueden comparar sus
éxitos y sus fracasos, y mejorar así sus capacidades para salvar
el patrimonio de una posible desaparición.
Educación y turismo cultural:
a) Interpretación
del patrimonio (o educación patrimonial).
Se considera a
la Interpretación del patrimonio como un instrumento o estrategia
de gestión para hacer compatibles la preservación del patrimonio
y su utilización como recurso de atracción turística. Con la aplicación
de programas interpretativos se pueden promover no sólo comportamientos
acorde con el lugar visitado, concienciando acerca de la importancia
de conservarlo, estimulando y persuadiendo, sino también el desarrollo
económico y social. La Interpretación constituye uno de los métodos
indirectos más efectivos para controlar el impacto de los visitantes,
para reorientar flujos de turistas, para gestionar el patrimonio
natural e histórico. La interpretación no puede ser entendida como
un simple ejercicio de presentación del patrimonio sino que, mediante
un determinado discurso comunicativo y un sistema de presentación
y gestión de los recursos, es a la vez comunicación y explotación.
Y en ambos casos es capaz de generar efectos en la comunidad. De
hecho, la interpretación aparece como respuesta a una demanda o
necesidad social de uso del patrimonio. Al mismo tiempo el patrimonio
ofrece a cada territorio la posibilidad de posicionarse frente a
sus competidores y desarrollar políticas de comercialización y explotación
turística: un territorio rico en elementos históricos contextuales
no puede desarrollar sus actividades productivas, comerciales y
culturales a espaldas de este potencial, generador de servicios
culturales o de ocio y potenciador de los recursos endógenos.
Así
las cosas, la interpretación del patrimonio debe consensuar: la
democratización de los bienes culturales, la demanda y consumo del
pasado como producto turístico y la necesidad de proteger y conservar
la herencia cultural. La interpretación de quienes juega un papel
primordial en la difusión y posterior valoración y conservación
del patrimonio cultural. Contribuye eficazmente a reducir, cuantitativa
y cualitativamente, el impacto negativo que la propia labor de difusión
puede generar en los espacios más visitados o, en aquellos que,
por sus peculiares características, podemos considerar como amenazados.
Además se hace necesaria una planificación con especialistas acerca
de los siguientes temas:
Comprender los cambios sociales económicos y culturales y las tendencias
de futuro en el campo del turismo, el medio ambiente y la cultura.
_ · Aplicar las técnicas turísticas. Conocer las técnicas de dinamización
del patrimonio._ · Analizar los recursos turísticos de su entorno._
· Diseñar rutas e itinerarios turísticos culturales.
Elaborar planes y estrategias de actuación en el patrimonio. Conocer
los fundamentos teóricos y la aplicación de las técnicas de presentación
del patrimonio cultural. _ · Aplicar las técnicas y estrategias
del marketing cultural y la comunicación._ · Elaborar y gestionar
un producto de turismo cultural, integrando los conceptos de desarrollo
económica y conservación del patrimonio. _ · Diseñar los servicios
de atención al público en cualquier centro patrimonial o servicio
de turismo cultural. _ · Conocer la diversidad de fuentes y formas
de financiación para la dinamización del patrimonio cultural. Diseñar senderos de observación; reducir el conflicto
entre usos competitivos; facilitar servicios adecuados de información
e interpretación medioambiental; proteger los recursos utilizados.
Propuestas de gestión y consideraciones
finales:
Los planes de
manejo son herramientas para asegurar la correcta toma de decisiones
en términos de la supervivencia a largo plazo de los recursos patrimoniales.
Siguiendo el trabajo
de Ferraro y Molinari (Primer Congreso Virtual de Turismo Cultural-NAyA-2001)
planteamos que una estrategia de manejo funciona en dos niveles.
Hasta el momento hemos enfocado el manejo técnico, la ponderación
de los agentes y variables involucrados en la evaluación de un recurso
desde uno de los sectores: los arqueólogos. Este nivel contempla
fundamentalmente las particularidades de la localidad y los distintos
recursos. Para que sea exitoso un plan de manejo se debe definir
el significado cultural de los sitios y luego conciliar las posiciones
de todos los grupos involucrados. Existen otros elementos de importancia:
la documentación de la historia de los sitios, la revisión de la
condición física del sitio y los problemas actuales de conservación
así como los factores legales, sociales y físicos que afectan la
toma de decisión para el manejo.
Al hablar de manejo
también hablamos del patrimonio y de la identidad de la comunidad
que está involucrada en el plan propuesto. Por ello, se hace necesario
aquí considerar algunas cuestiones vinculadas con estos temas.
Pero también es
necesario considerar la otra esfera que es inseparable del aspecto
técnico: el manejo evaluativo. El enfoque holístico al que adherimos
supone que el manejo es exitoso si considera las interrelaciones
del recurso con el medio físico y social en el que nos incluimos.
En este sentido, dentro del manejo evaluativo somos un agente más
en la evaluación tanto del recurso, como de los valores e intereses
involucrados pero la preponderancia es la de las opiniones de la
comunidad.
Consideramos que
la conservación de un recurso requiere de la identificación de la
sociedad con el patrimonio que posee (Ferraro y Molinari 2001),
con lo cual la propuesta que presentamos deberá considerar el intercambio
de evaluaciones y proyectos de todos los participantes para consensuar
una estrategia de manejo sustentable acorde a los intereses y a
las necesidades de la comunidad, y a la supervivencia a largo plazo
del recurso. Así, la comunidad científica participará en las distintas
etapas del plan de manejo en calidad de asistente técnico permanente
pero la toma de decisiones quedará en manos de un organismo local
con poder de aplicación.
Para el Equipo
NAyA- (área turismo cultural) éstas son las primeras aproximaciones
que nos comprometen a seguir profundizando el dialogo entre quienes
deciden las políticas de desarrollo cultural para el turismo desde
todas las dimensiones económicas-políticas y sociales buscando una
mejor calidad de vida para nuestras sociedades.
Entendemos que
los científicos sociales podemos aportar nuestra producción de información
y conocimiento a los sectores, que en este caso lo este requiriendo
en función de sus necesidades para planificar con responsabilidad
sus actividades sociales.
NOTAS
Fragmentos extraídos de las siguientes ponencias:
# “CRECIMIENTO TURÍSTICO
Y SUSTENTABILIDAD DE POBLACIONES COSTERAS EN LA PROVINCIA DE BUENOS
AIRES, REPÚBLICA ARGENTINA”
Ferraro, Lorena, Paulides, Leonardo S., Vidal, Aixa
# “PROYECTO DE TURISMO
ECO-CULTURAL PARA LA PROVINCIA DE CATAMARCA: 1ra. Fase (Dpto. de
Andalgalá)”
Norma Ratto
# “El turismo cultural:
gestión de partes interesadas y la complejidad del equilibrio”
Alfredo Ascanio
# “EL PATRIMONIO HISTORICO-CULTURAL
REVALORIZADO EN EL MARCO DE UN DESARROLLO SUSTENTABLE DEL TURISMO.”
Guillermina Fernández, Aldo Guzmán Ramos
# “Reencontrar
el Patrimonio. Estrategias de Desarrollo Territorial a Partir de
la Interpretación”
Margalida Castells Valdivielso
# “MUSEUS, CULTURA
POPULAR E TURISMO CULTURAL NA CIDADE DO RIO DE JANEIRO: Algumas
Reflexões”.
Maria Alcina Quintela
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