Investigadores y Redes de comunicación electrónicas.
Estrategias culturales y de conocimiento que implican las nuevas tecnologías comunicacionales en los investigadores, docentes y estudiantes de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.
Trabajo Final de Grado
Carrera Ciencias Antropológicas
Directora de tesis: Lic. María Rosa Neufeld
Alumna: Claudia Maria Cóceres
4.@.Conclusiones: Pararse desde lo virtual-real para ver y reflexionar
[ INDICE ] [ CAPITULO 1 ] [ CAPITULO 2 ] [ CAPITULO 3] [ ANEXOS ] [ BIBLIOGRAFIA ]
4.@.Conclusiones:
Pararse desde lo virtual-real para ver y reflexionar:
Entre mis objetivos estuvo reconocer dimensiones socio-culturales que permitan analizar este proceso de cambio tecnológico, dando cuenta de algunas de las posibilidades de estudio desde la antropología. Los discursos y prácticas mostraron que estos cambios se dan como una innovación que llega de modo desigual: falta de capacitación para el uso del nuevo medio y con una estructura que no da respuestas concretas al cambio tecnológico. En este contexto las voces de los sujetos son diversas, mostrándose a favor de su incorporación, o con resistencias que se manifiestan en grados diversos y con diferentes excusas.
El cambio implícito las nuevas lógicas de operar (como por ejemplo el hipertexto) los llevan a tratar de conocer el nuevo lenguaje, a adoptarlo y a la vez resignificarlo ya que los esquemas rígidos de conceptualización acotan las interpretaciones y relaciones que se investigan en ciencias sociales. (Esto se ve claramente en el ejemplo del uso de programas de traducción donde las múltiples lecturas y traducciones deben ser seleccionadas de acuerdo a los contextos, ya que las funciones mecánicas no responden a lo que se quiere expresar). Para las ciencias exactas es más simple mostrar funciones lógicas, binarias y cartesianas dado que los mismos programas fueron armados desde ese razonamiento y su lectura es más directa. Rescato esta lectura desde el análisis de las aplicaciones de las Nuevas Tecnologías a la educación, en el que tomo en cuenta el tratamiento que se le dio en el curso de postgrado en “Educación e Informática” que cursé en la Universidad de Lomas de Zamora en 1994, donde debíamos armar guiones multimediales y los docentes nos obligaron a focalizar sólo temas del área de ciencias exactas.
Desde el plano institucional, los cambios tecnológicos se encuentran con obstáculos tales como la falta de recursos económicos y de capacitación tecnológica. Esto es una de las maneras en que se plantea la contradicción por la que los antropólogos analizan los cambios culturales, al tiempo que están inmersos en este contexto, que los deja fuera de las transformaciones informáticas en una sociedad del conocimiento.
Pero las innovaciones no dependen sólo del acceso a la tecnología, sino que requieren una organización prevista, donde los objetivos de utilización sean claros, donde las implicancias y efectos de sus usos queden públicamente analizados y demostrados. Mientras en centros mundiales importantes de investigacion se invierten 21,3 millones de dólares como es el caso de la Universidad de Oxford (en Clarín- sección Sociedad del lunes 4 de junio de 2001), nuestro centro Filored de informática está a cargo de 3 personas que cumplen un horario restringido, donde no se realizan actividades de capacitación ni de investigación, y su inversión anual es aproximadamente de 10.000 dólares entre hardware, conexión y sueldos docentes.
Esto nos permite reflexionar acerca de la contradicción del papel de la Universidad como lugar de producción y transformación del conocimiento frente a los cambios tecnológicos.
Los antropólogos entrevistados fueron dando cuenta de las distintas formas de este proceso que los involucra, señalando la falta de ámbitos de discusión acerca del papel de los investigadores en este contexto de globalización.
En la llamada sociedad de la información, los intelectuales tienen un papel fundamental en la organización de la información y el conocimiento, tal como lo señalan organizaciones e instituciones de investigación internacionales. A nivel local, al momento de planificar las acciones, apenas quedan en los discursos.
Frente a este panorama, los antropólogos articulan sus posibilidades en la medida que observan cómo este proceso avanza dejándolos en parte al margen del mismo.
Ya en 1997 el comunicador social Jorge Arabito señalaba que “en un mundo que se globaliza y se extiende, donde la información es segundo a segundo una mercancía y herramienta privilegiada es preciso enseñar a navegar y pescar certeramente en mares de información“.
Desde mis observaciones lejos están los antropólogos de poder formar parte integralmente de este proceso tecnológico, que según Arabito “en el se presencia un profundo cambio personal y social, en el que nacen nuevas culturas y se debe comprender la dimensión humana del cambio tecnológico. El habitante de esta época evoluciona…es alguien que produce, consume, vende, comparte, administra y trabaja con información. Necesita hacer cosas con palabras, con contenidos, y en este contexto una habilidad básica es la de interactuar exitosamente con la información, especialmente en cuanto a diseñarla exitosamente y evaluarla críticamente”.
Realizando esta investigación percibí que los antropólogos tienen un fuerte reconocimiento de la necesidad de que circule la información y demostrar sus producciones. En algunos casos, van más allá, en una búsqueda de reconocimiento sobres sus posibilidades de investigar las problemáticas de la sociedad buscando además, ampliar sus espacios laborales. No todos accionan con estos medios colectivamente, algunos diseñan sus páginas personales u organizan listas temáticas para fortalecer sus áreas. En este nuevo medio, algunas prácticas reproducen las ya existentes en las instituciones, tales como la concentración de la información, desvirtuando así la filosofía de Internet sobre el libre fluir de la información.
Este proceso tecnológico es constantemente modificado por diversos acontecimientos políticos, económicos, culturales y educativos, así como por la rapidez propia de las transformaciones tecnológicas. Por esta razón el grado de valorización de estas tecnologías fue creciendo a medida que se difundían las posibilidades de las mismas, dado el uso generalizado de las NT en la sociedad y en las instituciones.
Frente a cuales era el uso y el valor de estas tecnologías, las respuestas sobre el tema no fueron uniformes reafirmando en cierto modo que las instituciones no preparan a sus docentes, estudiantes e investigadores para este cambio tecnológico, a diferencia de otras disciplinas, como las ciencias económicas-medicina-ciencias exactas. (Sería más que relevante analizar como las instituciones van incorporando estas tecnologías, modificando su administración interna).
Sumo a estas conclusiones algunas perspectivas que aparecieron en el Simposio sobre “Antropología, Sociedad y Nuevas tecnologías”, que coordiné junto al lic. Pablo Gustavo Rodríguez, en el Cuarto Congreso de Antropología. Este se llamó “Los desafíos de la Antropología: Sociedad Moderna, Globalización y Diferencia”, que se realizó en Chile entre los días 19 al 23 de noviembre de 2001:
Las perspectivas allí planteadas concuerdan con la problemática que encontré en mi trabajo de tesis, en diversos aspectos y que también coinciden con la realidad chilena de los antropólogos. El Programa de Informática de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Chile propone convertirse “en un interlocutor válido ante los desarrollos globales de la Universidad y la integración de la investigación en ciencias sociales a la nueva realidad formada alrededor y dentro de las nuevas tecnologías de información y comunicación" Además desarrolla una investigación con el propósito de contribuir “ a la discusión y análisis de los contenidos en Internet de la Universidad”( Torres, 2001).
Menciono el caso chileno dado que coincide con mis conclusiones en cuanto a que los “contenidos en la Web chilena son algo poco estudiado, siendo este fenómeno fundamental para entender los comportamientos de los usos de la información, sus patrones de conocimiento y sistemas de validación en la Web nacional. Pensamos que parte de los problemas para levantar contenidos, dirigirlos y darles un valor viene dado que se desconoce que esas redes son fenómenos sociales, donde la observación y análisis de los usos nos permite distinguir la apropiación y desarrollo de las tecnologías como un fenómeno societal de primera magnitud, el que requiere de investigación y conocimiento endógeno para contrastar con criterios propios los antecedentes, conocimientos y progresos imperantes en una tecnología de impacto mundial. Usos que están mediados-en gran medida-por los contenidos” (en Torres).
Este Reporte Preliminar de análisis de sitios Web la Universidad de Chile escrito por Luis Catalán Torres Consultor de Proyectos e investigación del Programa de Informática de la Universidad de Chile en 2001, indica que las dificultades de reconocer a estas tecnologías como parte de un fenómeno social es un obstáculo para su uso. A diferencia de sus consideraciones, pretendo rescatar a los productores de los contenidos de las páginas académicas, en este caso a los antropólogos, pero no desde una visión cuantitativa como él lo hace en su informe. Pretendí dar cuenta de las dificultades que tienen los científicos sociales para incorporarse a esos cambios culturales-tecnológicos.
Cabe destacar como palabras finales de este trabajo, pero que en verdad son el punto de partida, un segmento de discusión del foro de globalización en que dos antropólogos discuten sobre el uso de las NT y los antropólogos. Esto muestra en parte el espacio en el que navegamos los antropólogos.
En otro mensaje escribiste:
ah!! me olvidaba: por la escasa participación de nuestro colectivo profesional en este foro, no sé en otros ya que no los he encontrado aún, me temo que los antropólogos seguimos aferrados a las culturas "tradicionales", quizás eso es muy bueno, en este caso al menos...no sé. aquí donde vivo, un grupo de antropólogos han creado una tertulia semanal para debatir temas generales, se han invitado otros profesionales y no profesionales, y el éxito de la propuesta es grande. se propuso en broma continuar en un chat en lugar del café y casi corrió sangre...en fin no sé...( Elisa Tabakman, antropóloga española participante del I Congreso Virtual de Antropología)
La verdad es que discutir en un chat teniendo la facilidad de reunirse personalmente no tiene mucho sentido, pero si esa reacción refleja un rechazo a la tecnología per se, cuánto lo lamento. Muchos indios amazónicos con el apoyo de ONG´s ecologistas aprendieron a usar Internet, correo electrónico y videograbadoras para hacer conocer en el mundo sus reivindicaciones. ¡Qué paradójico sería que ellos les enseñen a algunos antropólogos a usar esas tecnologías ¿no? (Pablo Gustavo Rodríguez, antropólogo argentino participante del mismo congreso en el foro de Globalización).
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